Te deseo

1.6K 140 9
                                    

Prov.Kris

 Ya es casi un mes donde eh estado viviendo con mi pequeño panda, me ha estado ayudando mucho tanto en mi recuperación como en mis clases, de hecho, me propuse a hacer un trabajo de investigación, de eso en eso estaba cuando mi pandita me llama y enseguida voy sonreía ante cada palabra y como no desaprovechar su cercanía un beso me llevo a la cama estando sobre él. -lo siento bebe ya me controlo sí. -dije al escucharlo gemir, no quiero que piense que me quiero aprovechar ni nada yo enserio estoy enamorado de le. Él me sonríe, siento sus manos cálidas en mi rostro y me acerca el. 


Prov.Tao 

Sus labios y sus caricias me hacían enloquecer, sin querer gemí, pero no logre excitarlo, logre que se alejara me decepcione, pero al escucharle sonrió aliviado y atraigo su rostro más cerca de mí.-ya no hace falta que te controles te amo y te deseo más que nada en el mundo...deseo ser tuyo ahora en nuestra casa...en nuestra cama ser completamente tuyo. 

Él me sonríe y asiente me besa dulcemente es extraño siempre pensé que sería un bruto en la cama el gran dragón de la escuela me estaba tratando como un pequeño jarrón de porcelana, abro mis piernas para que se acomode mejor,lentamente me desnuda, si me sonroje mucho, pero me sentía a gusto y amado. .-confías en mi pequeño panda? - escucho su voz tan ronca que me hizo estremecer con fuerza, asiento levemente y muevo mis caderas haciendo chocar mi entrada contra su gran miembro expuesto ya que estaba desnudo también, su cuerpo es realmente estupendo bien marcado y viendo aun sus cicatrices aun así es maravillo.


 -Te deseo...y confió en ti con mi vida amor. -él me sonríe y sin preparación alguna entra de golpe en mí, arqueo mi espalda con fuerza sintiendo como me habría en dos, sin embargo, era un dolor que me gustaba, una lagrima recorre mi rostro. -amh...Kris dame duro si amor. -jamás pensé en decir cosas así, pero era como si fuera otra persona. El me ve, podía ver su asombro y su deseo hacia mí.


 -como lo desee mi pequeño panda. El alza mis caderas hacia él y comienza a penetrarme con fuera y despiadado,comienzo a gemir parecía a esas mujeres de las porno que parecen perras encelo, me aferro a las sabanas con fuerzas, sintiendo como su miembro entra y sale una y otra y otra vez, el sonido de su cuerpo y el mío chocar hacía eco en nuestro cuarto, como sus gruñidos y mis gemidos. .-amh...Kris, mas ahí amor más así duro amh...


-gemía alto, mis manos recorren su espalda y le arañan, mis piernas a su vez enrollo mis piernas a sus caderas,entraba y salía de mi con brutalidad, de pronto una de sus manos toma mi miembro ya rebosante de mi esencia pre-seminal. .-amh...Kris si haces eso me correré. -gemí en alto él no se detiene en vez de ello sube la fuerza de sus embestidas. 

.-mm...estas tan jodida mente estrecho bebe, me encantas. -gruño y dejo caer una nalgada que seguro me dejaría marcas. .-ohm...solo si me llenas sí. -movía mis caderas contra el de tal manera de hacer que su gran miembro entrara aún más profundo en mí. 

En cosa de segundos me corro y mi cuerpo se contrae apretando su gran miembro y entonces siento su esencia completamente vaciarse en mi interior..

-amh......Kris... -gemí llamando su nombre y el mío. -amh...Tao.

Caigo rendido en la cama y el a mi lado, ambos con la respiración entrecortada. .-amh...si...si definitivamente dragón te va bien. -reí levemente y él sonríe besando mi mejilla y luego mi cuello. .-bueno este dragón ya está listo para la segunda ronda. -abro mis ojos y más ante la sensación de su miembro nuevamente erecto chocar contra mi vientre cuando se subió sobre mí. .-ah...a...amor, pero si te acabas de venir en mí. 

-él sonríe y comienza a besar coqueta mente mi cuello y subiendo una pierna a su cadera acariciando mi entrada con la punta de su miembro. -pues me vendré cuantas veces sea posible mi pequeño panda. Y así nuevamente me lo hizo hasta el amanecer, todas y cada una de esas veces en mi interior, no sé como pero hasta en la ducha lo hicimos unas tres veces más.

RivalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora