CAPÍTULO 17° PARTE 2/3

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--Verdades innegables--

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Miercoles...

El miércoles llegó con Susana y los niños arreglados para poder ir de compras con ella.

Solo esperaban a Cuauhtémoc quien estaba terminándose de arreglar en su habitación con Diego esperándolo recargado en la puerta.

-Creo que me compraré un traje nuevo. -Comento Diego mirándose la vestimenta.

-Aja. -Exclamó Cuauhtémoc viéndose en el espejo y rápidamente se colocó los zapatos terminándose de vestir. -¿Me veo bien? -Preguntó y Diego levantó los pulgares en señal de que se veía bien. -Bien, vamos. Susi debe de estar esperando. Pero no sé donde dejó Marta mis botines vino... me los quería poner. -Dijo resignado.

Ambos barajaron hasta la sala donde tras despedirse de Pancho y la pequeña niña, salieron afuera subiéndose al auto de Susana.

Pancho en casa se dispuso alistarse para ir a darle una visita sorpresa a su amigo Robert.

-¿Me ayudas Fersusi a buscar que ponerme? -Preguntó a la niña quien solo lo miró. -A ver, por lo menos dí pa-Pan-cho.... ey, dilo... -Pero la niña no hizo ni el más mínimo intento para hablar. -Chale... Que callada eres.



Doña Imelda se dispuso a ir su tienda y entregar las medidas de Violeta para tener su vestido listo el viernes.

◾Linda fue por Frida para poder ir de compras, ya que esta le había informado de lo ocurrido en la mañana y con tal de despejarse un momento ella aceptó encantada.

Dejando de lado sus problemas le dedicó una radiante sonrisa a su madre para evitar preguntas de ella. Funcionó, ya que la mujer solo le anduvo platicando sobre los nuevas festejos que se llevaría acabo, Linda se despidió sin ninguno contratiempo llevándose a Frida consigo.

◾Axel agradecía no tener consultas ya que no tenía mente para nada que no fueran sus conflictos de la noche anterior con su pareja. Estaba distraído en el trabajo.

◾Julieta estaba dirigiendo una sesión de fotos con sus dos hijos a su lado, Catalina y Cassandra la acompañaban, esta última estaba explicando algo a la pequeña Blanca quien escuchaba atenta, mientras que él muy callado pequeño Eugenio solo miraba con atención los modelos que lucían la ropa y los múltiples flash de las cámaras lo entretenían.

◾Don Eugenio tenía sus sesiones con su médico y platicaba muy animado en su habitación.

◾Arquímedes estaba acompañando a su padre, quien se había entretenido platicando con unos amigos que se encontró en el camino, el niño solo estaba sentado en una banqueta mientras miraba una niño pintando a lo lejos, se acomodó mejor para verlo, claro su padre no lo miraba.

◾David estaba con su padre Robert en la fundación, se entretenía con los niños de ahí, entre ellos él solía sentirse bien- aunque sonara mal- por tener la misma condición que ellos. Sus experiencias solía servir de motivación para los niños de no rendirse o sentirse mal consigo mismos. Y de alguna manera eso le hacía sentir de gran utilidad.

Y se esforzaba en llevarse bien con todos y siempre ayudar en algo.

◾Amapola estaba pasando el día normal en la panadería trabajando, siempre había algun cliente.

◾Gabriel se dedicó a organizar los muebles en el salón con la ayuda de Aristotéles. Desde temprano la mayoría de los juegos fueron llegando, aquellos que iban a ir al aérea de los niños.

Aristotéles era quien dirigía el área del escenario, área que poco a poco fue tomando forma, los amplificadores llegarían para la tarde y Aristotéles tenía que recibir.
Todo iba perfecto, a excepción de una cosa, o mejor dicho, alguien... la ausencia de Cuauhtémoc López.

Cuando habla el Corazón (Aristemo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora