Capítulo 41.

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- Luke: ¿Estarás mucho más rato estirando el calcetín? - dijo sacándolo de su intrincada mente - Es que ya lo llevas por la rodilla - Michael bajó la vista y observó que sus calcetines parecían un can-can. Los bajó rápidamente y se puso las botas de fútbol - ¿En que piensas?

- Michael: En nada - dijo secamente-.

- Luke: Vamos - le sonrió - ¿Tan bien te lo pasaste anoche con tu "prometida"? - él lo miro. Tenía ganas de desahogarse, pero tenía miedo, después de todo, se trataba de Luke.

- Michael: Vamos a jugar - se levantó y empezó a caminar-.

- Luke: Mike...

- Michael: ¿Qué quieres que te diga? - preguntó molesto. Sacó la pelota y le dio una patada a la tapa del baúl que se cerró con fuerza.

- Luke: ¿Qué te pasa?

- Michael: ¡Mi vida apesta! - dijo colérico - ¡eso pasa!

- Luke: Sabes que soy tu amigo - le decía mientras bajaban las escaleras.

- Michael: No tengo ganas de hablar - decía moviendo furiosamente la bola.

- Luke: Pero si alguna vez necesitas desahogarte... - fueron las palabras exactas.

- Michael: Siempre esta Ashley molestando - dijo en un tono de voz apagado.

- Luke: Bueno, podemos decirle que no te encontrabas bien - trató de convencerlo

- Michael: Pero... no, olvídalo. Vamos a jugar, a lo mejor se me pasa.

- Luke: Si - lo seguía - Mike, ¿te fue bien con Lisa?

- Michael: Digamos que sigue siendo mi novia.

- Luke: ¿Te comprometiste con ella?

- Michael: No - Luke se detuvo en seco. Michael seguía caminando por la sala.

- Luke: ¡Espérate ahí papa! - gritó. Michael se detuvo y lo miró. Luke se acercó y lo cogió de un brazo tumbándolo en un sofá de la sala - ¡Nos dijiste que te había aceptado!

- Michael: ¿Qué querías que te dijera? - preguntó - ¿Que fue una porquería de cita?

- Luke: ¿Tan mal fue? - dijo mirándole con cara de lástima.

- Michael: Lisa no es ni lo que aparenta - dijo con un dejo de voz - Es...es... -trataba de encontrar las palabras exactas para definirla, pero no podía.

- Luke: Es una, ¿materialista? - Michael miró a su amigo y con todo el dolor del alma, asintió - Te lo dijimos cientos de veces, pero...

- Michael: No importa. Yo, estoy dispuesto a seguir con ella- dijo tercamente.

- Luke: ¿Aunque no la quieras? - le preguntó. Michael lo miró pálido y luego asintió, levantándose del sillón.

- Michael: Luke no lo entenderías nunca - se iba. Luke se levantó también.

- Luke: ¿Aunque te mueras de amor por mi hermana? - se paró en seco y se giró para ver la cara sonriente de su amigo- ¿Es eso no? Por eso dices que tu vida apesta, ¡te diste cuenta de que mi hermana existe! - más sonriente.

- Michael: Pero, ¿Qué dices? - preguntó nervioso.

- Luke: Caíste en la trampa del amor.

- Michael: ¡No seas ridículo! - dijo algo colorado.

- Luke: Por eso te pones furioso cuando ahora Alex la invita a salir y ella ha decidido...

- Michael: ¿Qué?

- Luke: Bueno... que Alex es un buen chico... tu sabes esas cosas.

- Michael: No me importa, ¡ya te lo he dicho, estoy con Lisa!

- Luke: ¿Pero eres imbécil o qué? Piensas seguir con esa que ni te calienta, ¿y dejas a la que realmente te importa?

- Michael: No sabes lo que dices, mira, puede que esté confundido, que en cierta manera, haya entendido mal el mensaje con Rachel y bueno haya confundido la verdad de los acontecimientos - suspiró - y que en cierta manera yo...

- Luke: Te has enamorado - Michael se sentó abatido y se tapó la cara con las manos.

- Michael: Si - Luke se acercó y le palmeó la espalda.

- Luke: Te entiendo - él lo miró. Esperaba un golpe en la cara de su amigo, por fijarse en su hermana, pero en realidad su amigo lo estaba animando - Es algo que los Hemmings no podemos evitar - suspiró sonriente.

- Michael: ¿Eh? - dijo confundido.

- Luke: Es parte de nuestro encanto, ¡le gustamos a todo el mundo! - Michael sonrió - Mírame a mi, ¡la chica más popular de la universidad babea por mi! - Michael rió- y ahora uno de los chicos más importantes de la universidad babeando por mi hermanita. Los Hemmings somos irresistibles.

- Michael: ¡Estás loco! Aun así, no creo...

- Luke: ¿Qué te pasa?

- Michael: No puedo decírselo, después de lo que pasó - se quedó callado. Miró a Luke que lo observaba tratando de entender qué quería decir. Con los nervios, casi había delatado la maravillosa noche que pasó con Rachel. Eso no lo contaría nunca. Una cosa era que Luke aceptase que estaba enamorado de Rachel, y otra muy distinta era que aceptara que su amigo se tirara a su hermana - Ella además está interesada en alguien más, a parte ahora está Alex - Luke lo miró y pensó **¡Pero será estúpido! Si supiera que ese alguien más es él** Sonrió.

- Luke: ¡Díselo! - lo animó.

- Michael: ¡NO! - dijo - ¿no lo entiendes? Yo estoy con Lisa, le prometí que... - en eso la puerta se abrió y vieron una melena castaña entrar deprisa - Por favor Luke, de esto ni una palabra a Ashley - dijo en voz baja.

- Luke: ¿Estás loco? - susurró - ¿sabiendo lo pesada se pondría?

- Ashley: ¿De qué habláis?

- Luke: Cosas de hombres, vamos al campo - Ashley lo miró - Deja de hacer esas miradas Ashley, ¡vamos a jugar!

- Ashley: Pero yo, ¿Michael te encuentras bien? - dijo mirándolo-.

- Michael: ¡Si, claro! ¿por qué no iba a estarlo? Mi vida es estupenda, y tengo a la novia que elegí - Dijo con sarcasmo. Y sin decir más, y bastante deprisa, salieron de allí hacia el campo de fútbol.

Aprendiendo a ser romántico (Michael Clifford y tú) *adaptación*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora