- Rachel: Porque una carta la podemos escribir en cualquier lado -dijo molesta-.
- Michael: Pero aquí estaríamos mas cómodos! Y no estarán ni Luke ni Ashley molestándonos…tu sabes como se pone Luke cuando me acerco a ti.
- Rachel: ¡Está bien! – dijo cansada – apaga las luces, si hubiera sabido que te pondrías tan pesado no aceptaba.- Michael: Tengo una profesora exigente – la abrazó mientras se ponían el abrigo – sorprendentemente me he convertido en un perfecto alumno.
- Rachel: eres un idiota, ¿sabes? – dijo ella riendo, él la abrazó y se acercó pícaramente a su oído.
- Michael: No tengo remedio… estoy enamorado- Rachel sintió que todo su cuerpo perdía la fuerza. Que dulces y sensuales sonaban esas palabras de su boca, pero desafortunadamente no eran para ella.. él no las decía pensando en ella. Suspiró. Esto de ayudarlo sería lo más doloroso que viviría si Michael no caía en su trampa como ella tenía planeado.
Michael esa noche se fue a su cuarto… se puso su pijama y se acostó.. quería estar solo, sin que nadie lo molestase… debía pensar qué diablos había pasado esa noche en la lavanderia y se convenció de que no había sucedido absolutamente nada... nada que alterara sus pensamientos. Miró hacia la mesita de noche y vió uno de los libros y se dijo **¿Por qué no?** Lo cogió y lo leyó entero, no era tan grueso apenas tenía veinte poemas… eran buenos según su opinión. **Y seguro que de aquí puedo sacar algunas ideas para la carta de Lisa invitándola a ir a la cita, como la echo de menos…** De repente se paró a leer el último poema.
“Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: la noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos…
- Michael: **Que profundo** -pensó, y continuó leyendo-.
…El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso...
- Michael: **Pero yo quiero a Lisa, y ella me quiere** Sonrió. Aun pensando que eso era una pérdida de tiempo siguió leyendo. Fuera de su cama, se escuchaban las voces de sus compañeros al entrar a la habitación, él apagó la luz y esperó a que se durmieran, después de un rato volvió a la lectura.
…En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido…
- Michael: **¿Que estoy leyendo? Yo la tengo y no la he perdido, definitivamente estos poetas son muy dramáticos… y yo estoy completamente loco por estar leyendo esto** suspiró
…Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío...
- Michael: **O sea que el verso… cae y penetra el alma… como el rocío… es absorbido por el pasto… y éste se regocija cuando cae el rocío, por ende el verso regocija el alma?** suspiró, **Pero, ¿cómo puede regocijarse si el poema habla de un amor perdido? Joder, no entiendo una mierda**
… Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. a lo lejos alguien canta. a lo lejos.,
Mi alma no se contenta con haberle perdido…
- Michael: ¿quien? – Dió la vuelta el libro – **¿quién es el que canta? Será mejor que no me mate analizando estas cosas… sólo me dedicaré a leerlos y disfrutarlos… pero cómo los puedes disfrutar si no los entiendes? Qué diablos, dejaré que mi corazón hable por si solo. Ay Rachel esto me pasa por pedirte ayuda!**
… Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido…
- Michael: ¡Pero ponte de acuerdo! – murmuró ya cansado - ¿la quieres o no?
…Porque en noches como ésta
la tuve entre mis brazos,
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.”
- Michael: **Ay Lisa…** suspiró, **te echo tanto de menos... sólo así puedo entender lo que estoy haciendo** Y dejó a un lado el libro para taparse y descansar. Apagó la lámpara y se quedó mirando el oscuro techo de su habitación. Pensó en todo lo que pasó durante el día **mal día para el fútbol… y realmente no sé por qué… Estuve todo el día pensando en lo que dijo Rachel** De repente le apareció una sonrisa tímida -**Tiene la piel tan suave… y definitivamente sus ojos son preciosos. Si Luke me escuchara me mataría.** Sonrió. Y con esa estúpida sonrisa cerró los ojos y se durmió.
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Aprendiendo a ser romántico (Michael Clifford y tú) *adaptación*
FanfictionRachel, hermana de Luke Hemmings, ambos están en la universidad, ella está perdidamente enamorada del mejor amigo de su hermano, Michael Clifford. ¿Qué hará la pequeña de los Hemmings para conquistar a Mike, el chico poco romántico y más pasota del...