La mujer de mis ojos. (Mi Propio yo soy Betty la fea)

Capítulo 136.

-¿Entonces le devolviste la bolsa?

-Si, con todos esos detalles y el Furby con el agujero de bala, ya fuera de mi oficina esa bolsa no me martiriza.

-¿Y por qué no la tiraste tú?

-Porque yo no soy la que tenia que hacerlo y porque me era difícil tirar lo que hizo que volviera sentir sentimientos, por eso que los tenga él y si los quiere tirar que lo haga, pero yo no lo haré.

-Pero aun así el mal no se ha ido, él sigue allí y eso quieras o no es el calvario viviente que te seguirá molestando.

-Si lo dices porque piensas que es para verle estás equivocado, yo no lo hice para eso, solo es que me prometí a mi misma no vengarme más con él y sacarles de la empresa sería hacerle algo malo.

-Bueno, he de reconocer que él se ha portado bien, te ha apoyado en todo.

-Ju, solo porque le conviene, pero en si no quiero que piensen que me aprovecho de mi poder, por eso el coche que te dejare es de mi propiedad, por cierto me enviaron la imagen del que pensaba dejarte y era muy viejo, pero me dijeron que tenian el que el viejo preparo para mi para ir a la universidad, pero que al final no me dio.

-¿Qué coche es?

-Ese. Le señale al mini rosa.

-¿Ese? Pero si es rosa, todos se reirán de mi.

-Pues cámbiale el color, pero desde ya te digo que la pintura la pagarías tu.

-Vale, vale, no me quejo, pero este será temporal, con mi sueldo quiero comprar un coche que está embargado.

-No me jodas que quieres comprar el de la Nancy de mercadillo.

-Si, quiero comprármelo para mi y a ver si reconquisto a Bara.

-Mala, pero muy mala idea, pero si eso quieres, hazlo, pero cuando lo compres el mini me lo devuelves.

Tras llevar a Kazuya a comprar unas medias a Masuzaka-san nos volvimos a la oficina yo mi Lamborghini y él en mini a la oficina encontrándonos a Masuzaka-san chillándole a Yamaguchi-sama para que él le de dinero, pero conociéndole ya le habrá contado que se volvió a casar en New York.

-¿Ya terminaste de felicitar a Koji por su matrimonio?

-¡¿Tú qué sabes...?!- al girase y verme paro -si, ya le felicita, solo le comentaba unos problemillas.

-Bien ¿Y las chicas?

-En el baño en un comité del cuartel, allí se la han pasado todo el día. En esto que veo a una de las chica se la limpieza salir de la oficina de Kanta-san y Hayashi-san con la bolsa de los detalles.

-Disculpe ¿Eso es basura de esa oficina?

-Si señora.

-¡Ah! Muy bien, buen trabajo- saque una chocolatina -tome, por hacerlo.

-Gracias señora. La chica de la limpieza se fue sonriente.

-Sherlock, necesito hablar con usted.

-Lo siento Masuzaka-san, pero tengo mucho que hacer. La deje y me fui camino a la presidencia.

-”Sherlock espera.”

-”¿Qué?”

-”¿Esa era la bolsa de los detalles?”

-”Si.”

-”¿Esperabas que se los quedara?”

-”Ju, no, era obvio que los tiraría.”

-”¿En serio?”

-”Vale tenia una pequeña esperanza, pero ya vez que la realidad gana a la esperanza.”

-”¿No temes que eso ronde por la empresa?”

-”Eso es problema de él, pero no creo que en la basura este en peligro, en si ese es el sitio que le corresponde.”

-”Yo lo digo por las orejas y ojos que trabajan en esta empresa, ese es el peligro.”

-”Ya para de llamar a la mala suerte y ponte a trabajar.”

Continuara...