capitulo 29

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Ya había amanecido y yo estaba en la sala principal, anoche no dormí nada. Solo me fui a cambiar hace unos minutos.

Estaba parada enfrente de la ventana, mirando el jardín. Después miré el piano a mí lado, me acerqué a el dispuesta a tocar como antes.

El piano sonaba por toda la casa y de alguna manera me calmaba, me hacía sentir tranquila.

-no sabía que tocabas el piano.-escuché la voz de Sebastian

-es que hace tiempo lo dejé... recuerdo que a Ciel le gustaba mucho oírlo-sonrió

-lo entiendo pues tocas bien -se sentó al lado de mi.-para ser humana tocas perfecto

-pues gracias, creo.-reí

-¿Dónde está, Ciel?

-sigue dormido, horita iré a despertarlo.

-ah...hazlo pronto, aparte acaba de llegar una carta de la reina. Deberías dársela.

-si pero continúa tocando. Es hermoso.

-entonces espera... él se despertará solo.-le sonreí

Después de unos minutos bajo Ciel, venía con su pijama todavía. Me miró sorprendido y después se acercó, me miró con una sonrisa.

Con la misma sonrisa que hacía cuando era pequeño y me escuchaba tocar el piano pero que yo dejaba de tocar solo porque él estaba ahí.

Pero esta vez era diferente, seguí tocando mientras le dedicaba una sonrisa.

-pensé que lo habías dejado.

-no lo dije... simplemente no me apetecía tocar pero tenía que relajarme y nada mejor que esto.

-ya veo...me alegro de escucharte tocar otra vez.

-gracias Ciel.-le sonreí

Ambos escuchábamos el sonido del piano, incluso se acercaron Mey-Rin, Finnian y Bardroy ellos también nos miraron con una sonrisa.

Al mirar a Sebastian ví que ahí estaba Tanaka-san, tomando su té como siempre solía hacerlo. Reí al verlo ahí y después miré a Sebastian ahora sí.

Él me sonrió y yo le devolví la sonrisa.

Me sentía calmada y había olvidado por completo mi sueño. Ahora estaba pasándola bien con Ciel y con todos los demás.

🌸🌸🌸

Estábamos en la parada del tren, viajariamos en uno ya que había un ladrón que tenía a un niño de reen y quería dinero por él.

Le dijo a su padre que lo vería en una parte del tren y por ende nosotros hemos venido.

Mientras esperábamos a que las personas subieran sus cosas estábamos con los chicos, Finnian se veía muy emocionado por viajar en tren pero él no iría. En otro momento le diría que viajariamos juntos para que supiera como se siente viajar en un tren.

La Hermana Mayor De Ciel (Sebastian Michaels y tu) Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora