—Wow, eso es ir un poco rápido, ¿no? —Le contesté y su cara era un poema. No sabía si era porque se acababa de dar cuenta de que se había equivocado o porque no esperaba esa respuesta por mi parte.
—Quería decir a tu habitación. Sí, eso a tu habitación. —Dijo medio riendo y medio avergonzado.
Y allí se quedó pensativo mientras movía su pelo hacia un lado y a otro.
—Harry, ¿me llevas? —A lo que él sólo asintió.
Mientras lo seguía escaleras arriba pensaba en lo que le había pasado. Estaba como en otro mundo. Por mi parte, no podía dejar de mirar a todos lados. Al subir las escaleras había un pasillo bastante largo. En él habían cinco puertas y en cada extremo podía ver más puertas, todas ellas cerradas. Avancé siguiéndolo hasta que se detuvo en la penúltima puerta.
—Esta es tu habitación. —Dijo mientras abría la puerta pero sin girarse hacia mí. —Yo estaré aquí al lado, si necesitas algo, siempre puedes tocar la puerta.
Lo que debía ser una cálida bienvenida se había convertido en una conversación fría y distante. En ese momento me enfadé. No tanto por sus palabras sino porque ni se dignó a mirarme, simplemente se marchó y entró en la habitación contigua a la mía, cerrando la puerta tras de sí. Me resigné y comencé a pensar si en el fondo no era tan bienvenida como pensaba.
Entré en mi habitación y suspiré. Necesitaba aire. Así que lo primero que hice fue abrir las subir las persianas y abrir las ventanas.
Cuando la luz entró en la habitación me sentí relajada. Este cuarto era muy bonito en realidad. La cama era grande y tenía un cabecero de madera. En la pared de enfrente había un armario empotrado que claramente era demasiado grande para mí. Había a su lado una puerta que supuse que era el baño. Sin duda, la habitación era mucho más grande de lo que parecía por fuera. Había también un escritorio y varias estanterías.
No hace falte ser un genio para darse cuenta de que esta era la habitación de Zayn. En las paredes había posters aún puestos y todos los colores y detalles de la habitación eran masculinos, por así decirlo. Así que en primer lugar, me puse a recoger todos aquellos objetos que no eran míos y los reuní en una caja.
—Hola Dani, ¿se puede? —Preguntó Niall desde el marco de la puerta. —¿Has podido encontrar tu habitación?
—Sí, Harry me ha ayudado. —Le contesté a lo que Niall se extrañó. —¿Pasa algo?
—No, no, es que no sabía que estaba aquí. La mayoría han ido a buscar a Rob porque...bueno, nada.
—Entiendo. —Le respondí.
¿Nadie podía entender que acababa de llegar a un sitio desconocido para mí? No quería ser un estorbo, pero eso era lo que estaba pareciendo. Una cosa que no me ha gustado nunca son las medias tintas: si formo parte de esta banda lo hago al 100%, sino, no formo parte de nada. Como si me hubiese leído la mente Niall habló.
—Verás, es que hemos tenido algún que otro problema con Zayn en Twitter. —Dijo esto mientras se sentaba en la cama. La verdad es que se veía afectado por lo que decidí sentarme con él. — Louis y él se han peleado y el mundo se está volviendo loco.
—No me imagino lo difícil que tiene que ser todo esto para vosotros.
Y no sólo hablaba de lo de Zayn, también hablaba de mi presencia en la casa. Era una sustitución en toda regla y yo no podía reemplazar a un amigo, que apuesto que era como su hermano.
—Lo está siendo, pero no por ti. Ha sido bueno encontrar alguien de tu talento tan rápido.
—Bueno, lo del talento está por ver. —Dije en un tono divertido. —Niall, yo estaba recogiendo sus cosas y dejándolas en una caja. ¿Está bien? A mí me da igual dejarlas en la habitación.
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Our Song | Harry Styles
RomanceDanielle escribe canciones desde que tiene uso de razón. Para escribirlas, siempre se ha inspirado en novelas o en historias que su abuela le contaba. Su vida dará un vuelco cuando debe decidir si dedicarse a la música por completo, aceptando las co...