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Era una noche sorpresivamente tranquila.

En especial después de todo el caos que ocurrió en la oficina del Presidente esa tarde.

Kyuhyun, quien decidió era inútil volver al trabajo, estaba en la sala de estar de Sungmin. Con Sungmin a su lado, por supuesto.

—Estás en problemas—. Dijo Heechul por teléfono. Sungmin estaba cerca por lo que también pudo escuchar.

—Estás tan condenado. Estoy orgulloso de ti, hombre. En lo personal, creo que es lo mejor que has hecho en toda tu vida. Solo puedo decirte una palabra.

—¿Qué?— Dijo Kyuhyun en voz baja.

—Felicidades, idiota.

Heechul se echó a reír a carcajadas.

—Oh, espera, esas fueron dos palabras, no una.

—No puedo creer que te esté escuchando—. Kyuhyun frotó un dedo contra su sien.

—Sí, yo también estoy cansado de ti. Pon a Sungmin en el teléfono.

Kyuhyun frunció el ceño, pero aun así le entregó el teléfono a Sungmin.

—Hola—. Dijo Sungmin.

—Hola, bonito

Ante la voz coqueta de Heechul, Kyuhyun frunció más el ceño.

Pero Sungmin solo se rio.

—Tengo que decir, cariño, tú también eres un gran idiota.

—Lo estoy, sí—. Sungmin sonrió de una manera adorable, la palabra idiota no encajaba con él.

—Tienes esta imagen de cachorrito, como si estuvieras en aprietos, pero luego cuando te das vuelta, ahí está eres un zorro astuto.

—Eso es un cumplido, ¿verdad?— Sungmin se rio.

—Por supuesto que es un cumplido, estoy tratando de gustarte.

Antes de que Sungmin pudiera responder, escuchó a Kyuhyun murmurar un imbécil dirigido a Heechul.

—Ya me gustas—. Dijo Sungmin, sonriendo a Kyuhyun cuando este le lanzó una mirada de advertencia. —Pero cierto alguien parece no aprobarlo.

—¿Está ese alguien quejándose de mí otra vez?

–Parece ser que sí.

—Dile que no tiene ninguna posibilidad contra mí. Quiero decir, soy el mejor. ¿Qué crees?

—Admito que eres atractivo—. Comentó Sungmin casual, Kyuhyun sacudió la cabeza con incredulidad.

—Veo que sabes cómo jugar, lindura.

Kyuhyun frunció las cejas y trató de alcanzar el teléfono en la mano de Sungmin para poner fin al coqueteo, pero este rió y retrocedió.

—Estoy aprendiendo de ti—. Dijo Sungmin coqueto, siguiendo el juego.

Kyuhyun molesto, hizo un gesto hacia el teléfono. Dámelo.

Sungmin divertido movió su cabeza de lado a lado, frunciendo los labios en un no.

—Bien, bien, ya casi te tengo. Ven al lado oscuro, bebé. Tenemos cosas interesantes aquí.

—Es genial escuchar eso, pero cierto alguien está tratando de quitarme el teléfono.

—No se va a dar por vencido, ¿verdad? Bueno, tendra que irse a llorar a un rincón cuando te haga mío.

Kyuhyun finalmente logró quitarle el teléfono a Sungmin, quien se rió con ganas.

Mascarada {KyuMin/YeWook} [TRADUCCIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora