Mascarada {KyuMin/YeWook} [TRADUCCIÓN]

37

Siendo franco el musical no fue tan malo.

Dejó una impresión moderada y buena en Kyuhyun, quien no solía disfrutar de este tipo de entretenimiento.

Pero lo que en realidad lo entretuvo durante todo el espectáculo fue el chico sentado a su lado. Sungmin admiraba cada escena de la obra con una mirada encimada que provocaba sonrisas imparables en Kyuhyun.

—Fue una buena obra, ¿no?—preguntó Sungmin.

Ahora a salvo, habiendo logrado escapar de los ojos de los guardaespaldas, estaban cenando en un restaurante justo enfrente del teatro, con una copa de Castillo de Molina frente a ellos. La suave iluminación del restaurante se reflejaba en el glamuroso vino tinto, el ambiente transmitía calidez entre las dos personas.

—No estuvo mal—. Concedió Kyuhyun.

—Creo que el tipo que hizo de Frank era realmente bueno—. Sungmin comentó. —Sabía cómo manejarse en el escenario.

—Mm—. Kyuhyun solo estuvo de acuerdo, aunque no podía recordar quién era Frank.

—Me divertí—. Dijo Sungmin con una sonrisa, levantando su copa de vino hacia el más joven. —Deberíamos hacerlo de nuevo alguna vez.

Kyuhyun, también con una vaga sonrisa, levantó su propia copa hasta la de Sungmin. Los cristales se encontraron en un agradable tintineo.

Kyuhyun disfrutó del sabor amargo del líquido, aunque de alguna manera era más dulce de lo habitual.

—No estás hablando mucho—. Sungmin señaló. —Déjame adivinar, te sientes incómodo porque estás preocupado por tu trabajo.

—No estás mal, pero tampoco es exactamente correcto—. Contestó Kyuhyun.

—Está bien, entonces ¿qué es?

La respuesta no era para nada difícil.

Se sentía incómodo porque tenía problemas para mantener su loco corazón bajo control.

Debía haber algo mal con él y no tenía ninguna idea de cómo arreglarlo. Estaba empeorando a cada momento, así que necesitaba ser rápido para encontrar una manera de corregirlo. De lo contrario, incluso llegaría a un punto en el que tendría que admitir algo que no quería.

Además no había una manera sencilla de decirle aquello a Sungmin.

—¿Por qué no lo averiguas tú mismo? —Sugirió al final. —Tú eres el experto.

Sungmin consideró el desafío por un segundo.

Para ser completamente honesto, no tenía ni idea de lo que pensaba Kyuhyun en ese momento.

Sin embargo, como era psiquiatra experimentado, se le ocurrió una táctica brillante para ese juego. Una táctica para obtener la verdad.

Le sonrió a Kyuhyun, luego abrió la boca.

—Bueno, ya sé lo que es—. Dijo. —Sólo quería oírlo de tu boca.

Sungmin esperaba una expresión de sorpresa en el rostro de Kyuhyun, o al menos un pequeño ceño fruncido. Esperaba al menos la pregunta, ¿cómo lo sabes? o ¿qué es entonces?

Pero debió haber sabido que estaba tratando con una persona de un nivel superior a ese.

Kyuhyun no mostró ni siquiera un cambio sutil en su expresión, ni siquiera una ceja levantada, porque ya se había dado cuenta de que lo que Sungmin acababa de decir era una simple chorrada.

—Entonces, ¿qué tal si cambiamos el tema?— Dijo sin más. —Como ambos sabemos, no hay necesidad de hablar de ello.

En ese momento, Sungmin decidió no forzar el tema.