¡Maldito gringo! [USArg] CountryHumans

꧁Capitulo 29: La oscuridad que nos rodea꧂

5:40 AM

La noche llegaba a su fin, en el cielo las estrellas comenzaban a desaparecer, la calidez extraña que invadía el ambiente los rodeaba. En la mansión, la música lentamente se reducía hasta poder escuchar las voces de cada invitado aún presente. Cada pais regresaba a su hogar, incluyendo a cierto argentino que en busca de alguien estaba. La persona que buscaba no se hacía presente, desde las cuatro de la mañana que con su mirada suplicaba por su presencia. Ese era Estados Unidos.

Sentía que lo había dejado completamente solo después de que tuviera que irse por culpa de la presencia de aquel inglés de mayor edad. Y estaba preocupado, muy preocupado por USA. Conocía la mala relación que ambos tenían y temía que Inglaterra le haya dicho algo horrible o incluso...hecho.

Culpa. Eso era lo que sentía en su mayoría, culpa por dejarlo solo y distraerse con cierto ruso. Pero no todo recaía en él, la situación que había vivido con el tricolores no fue algo que hubiera podido saber a adivinar. Seguía sorprendido al respecto, razón por la que ni siquiera pudo dar una respuesta negativa o positiva a la propuesta de Rusia.

"Lo voy a pensar", fue lo único que pudo decirle para luego salir huyendo del lugar con una fuerte sonrojo en su rostro y sentimientos que lo tenían confundido. Odiaba esto, sentirse de esta forma era tan estresante. Rusia se había confesado y aunque el beso que se dieron fue glorioso, en ningún momento pudo dejar de pensar en el estadounidense, como si culpa por sus acciones sintiera cuando ellos dos ni siquiera eran amigos en su totalidad o pareja. Y eso solo lo hacía peor para Argentina.

Dos potencias. Un sentimiento en común y una decisión que debía tomar. Rusia y USA eran demasiado diferentes pero el sentimiento que causaban en el latino no estaba lejos de ser igual. Solo que con uno era más fuerte.

No. No podía elegir, no era tan fácil, se negaba completamente a aceptar que sentía algo por... aquel de lentes oscuros. Ni siquiera debería. ¡Él había dañado a sus amigos por años! ¡También le había dañado a él! Estados Unidos era una persona horrible, lo era. Necesitaba que lo fuera. Simplemente... rogaba que lo fuera.

- ¿Buscabas a alguien? -Su voz, esa era la voz de quien tanto buscaba. Aún usaba la chaqueta que USA le dio para abrirgarse y cuando volteó a verlo, una sonrisa en su rostro se formó. Aunque no podríamos decir lo mismo del norteamericano.

- Ah, si. ¿Dónde estabas, chabon? Che, perdona que te deje re solari...

- No importa. -¿Por qué el ambiente tan tenso? Eso incomodaba al celeste y blanco, notaba algo extraño en su contrario. Su mueca de malhumor y esa cerveza en mano no ayudaba a dar buena imagen.

Inmediato fue en sacar la primera conclusión.

- ¿Estas en pedo?

- Tsk. Si solo vas a decir eso me largo. -Oficialmente esa respuesta no fue grata para Argentina, quien fruncio el ceño y, notando como USA tenía intenciones de irse, le detuvo sosteniendo su brazo.

- ¡Para, boludo! ¿Qué te pasa? No tenes porqué tratarme así. - Y así es como había comenzado una discusión que no se detendría. Y siendo Argentina tan terco, no permitiría que USA se fuera tan fácilmente.

- ¿Te interesa? Ha, es irónico que te interese. - El argento estaba confundido. ¿Por qué decía eso? - Pareciera que NUNCA te interesas por lo que yo piense.

- ¿Qué? Agh, no te entiendo chabon. Si me explicas mejor las cosas podría ayu... - No pudo terminar de hablar, el de estrellas le interrumpió, zafando de aquel agarre.

- ¿Ayudarme? ¿Crees que necesito tu estúpida ayuda? ¡Estoy perfectamente bien! No te hagas el desentendido. -Pobre Argentina, no comprendía porqué se comportaba de esa forma, tan solo trataba de ayudarlo. El alcohol bebido no era de ayuda.