¡Maldito gringo! [USArg] CountryHumans

꧁Capitulo 46: Oscuro secreto꧂

La noche se hacía presente en aquel territorio, la luz de la luna iluminaba con su resplandor la belleza de un castillo antiguo mientras el sonido de los grillos le acompañaba en una dulce melodía, y dentro de una pequeña oficina, podía apreciarse a la potencia conocida como Reino Unido sentado en su sofá de cuero rojo, sosteniendo un celular en una de sus manos y un vaso de whisky en la otra. Dio un sorbo a éste último para luego suspirar con pesadez y marcar un número dentro de sus contactos. Esperó pacientemente a ser atendido mientras se colocaba de pie, dando pasos sin un destino fijo, simplemente caminando de un lado a otro, tomando cada vez más de ese exquisito liquido que lograba quemar su garganta pero calmar sus penas.

− Finalmente contestas. −No dudó en decir cuando su llamada fue atendida. Logró escuchar como la persona con quien hablaba había soltado una carcajada sutil.

− Estaba ocupado, claramente. ¿A qué se debe tu llamado, Reino?

− Te tengo noticias. Demasiado gratas para ti. −Mientras hablaba, se acercó a su escritorio para servir más whisky a su vaso. Esa noche se estaba dando gusto, incluso si no acostumbraba a beber alcohol. El silencio formado desde el otro lado de la llamada le dio a entender que debía seguir hablando− Mis hijos descubrieron la verdad y quieren ver a Argentina lo más antes posible.

− Eso suena como una invitación. −Esa misteriosa voz respondió con clara satisfacción ante la noticia− Lo que buscas es un plan, ¿Cierto?

− Eres el jefe, tú decides.

− Llévalos con él. Esto es demasiado conveniente para nosotros. −El británico observó la bebida entre sus manos mientras se mantenía apoyado contra el borde de su escritorio, ahora escuchando más atentamente lo que esa persona tenía por decir− Si haremos que Argentina vea a tus hijos, debes hacer que Usa esté presente en ese momento.

− Wait a second. Why United States? (Espera un segundo, ¿Por qué Estados Unidos?)

− Argentina recordará quién ayudó a su enemigo para que le arrebataran a sus hijos. Es alguien que puede perdonar pero no olvidar. Esto le traerá recuerdos de cierta niña muerta.

− Eres cruel. −Otra carcajada fue escuchada desde el otro lado del teléfono− Argentina tiene mala suerte de tener un amigo como tú.

− Y Usa tiene mala suerte de tener un padre que busca separarlo del chico que le gusta. −El europeo se mantuvo en silencio− Eso pensé. Si vuelves a hacer comentarios como esos, no dudes en que hablaré de tu secreto y todos sabrán la verdadera basura que eres, Reino Unido.

− Lo he entendido. Haré lo que me digas.

− Averiguaré dónde se encuentra Argentina. Espera mi llamada.

− Okey.

Cuando la conversación terminó, el británico terminó por pasar una mano por su rostro con notable frustración para luego dar un último, largo y profundo, trago a su bebida hasta lanzar con fuerza el vaso hacia una pared. El sonido del vidrio rompiéndose de captado por sus oídos. Se odiaba a si mismo por ser tan débil, dejar que lo controlaran de esta forma cuando su único pecado fue amar incondicionalmente. No podía permitir que su secreto fuera descubierto, los problemas recaerían hacia él y con ello, posiblemente a su gente.

− Cumpliré mi promesa... Perdóname, Usa.

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