Reino Unido.
Su historia comienza desde muchos años atrás. Siendo un simple niño le enseñaron a jamás dejarse ver débil. Su deber era ser el reino más fuerte de todos. Él sería quien diera el ejemplo a las demás naciones, quien sería la punta de la pirámide, el más fuerte e inteligente del mundo. Pero, desgraciadamente, nadie lo veía a él como realmente era. Nadie notaba su esfuerzo, nadie pensaba en sus sentimientos. Poco a poco se había convertido en la sombra de sus padres y el resto de naciones que lo conformaban. Él se había convertido en la primera potencia naval y económica del siglo XIX hasta el siglo XX. ¡Estaba en su mejor momento! Pero... ¿Eso era suficiente?
Formar una familia sonaba como una idea magnifica pero había un pequeño problema: Él no quería tal cosa. Inglaterra y Escocia, durante años, le exigieron dejar un digno heredero para el reino. Fue así que surgió la idea de un matrimonio arreglado. Francia. Aquella magnifica e independiente mujer fue la digna candidata para él. Ella lo amaba como a ninguno, podríamos decir que era la mujer más deseada entre naciones del mundo pero no para UK, jamás logró amarla como una esposa, solo como una simple amiga con la que fue obligado a casarse. Cuando USA llegó a su vida, fue cuando Reino había dado cuenta de lo ahogado que se sentía. Todas esas responsabilidades, el casamiento, los hijos, sus sentimientos que parecían jamás importar...
Y las guerras. Debía admitirlo, las guerras lograban distraerlo de su miserable vida. Sentía que ya nada tenía sentido, que habían controlado todos sus movimientos como si de una marioneta se tratara. Por toda esa confusión, su querido Trece Colonias fue el más afectado y terminó alejándose de su lado cuando se volvió independiente. Francia y él discutían de forma constante pero aún así, ellos fueron grandes aliados en la primera guerra mundial.
Fue durante la segunda guerra mundial que conoció a URSS, hijo de Imperio Ruso quien fue su ex-aliado hasta el día de su muerte. Unión Soviética era quien le reemplazó en su misión de vencer a los alemanes de una vez. De alguna forma, al principio sintió pena por ese hombre ya que su único propósito no era más ni menos que tomar el papel de su progenitor y ser igual a él. Cuando era un niño, Reino tuvo la oportunidad de conocerlo. La frialdad en su mirada era algo que llegó a sorprenderlo. ¿Cómo un niño tan pequeño podía intimidarte con solo mirarte?
Tal vez eso fue lo que hizo que se acercara tanto al soviético. Al ver a URSS, se veía reflejado en él. Como ambos fueron criados para cumplir un objetivo, como nadie pensaba en sus sentimientos.Muchos años atrás...
− Soviet, here are the papers you asked for so much. (Soviético, aquí están los papeles que tanto pedías) −De nueva cuenta se encontraba en la oficina de aquel hombre de rojo, tal y como dijo había llevado unos documentos a quien era su aliado por simple conveniencia y una guerra en común. Lo vio permanecer en silencio, sentado frente a su escritorio, escribiendo sin parar, y hasta parecía que lo estaba ignorando.
Reino rodó los ojos, odiaba aquella actitud tan altanera de su contrario, odiaba tener que ir hasta donde él estaba cuando tranquilamente podría enviar a un mensajero pero URSS era tan desconfiado que dio la orden directa de que cada asunto respecto a la guerra que estaban viviendo en aquel año, tuviera que resolverse frente a frente. Por lo tanto, Reino debía ir a verle en persona si tenía algún documento, plano o mensaje que entregarle.
− Оставьте это здесь. (Déjalo aquí) −¿Le había dado una orden a él? ¿El mismísimo Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte? Bufó, de forma disimulada. Caminó hasta donde aquel comunista para dejar la carpeta llena de papeles sobre futuros planes contra sus enemigos justo sobre el escritorio, simplemente dejando que cayera sobre el papel donde Unión estaba escribiendo y con ello, deteniendo sus movimientos, ganando una mirada del ruso− No te ves de humor, Reino Unido.
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¡Maldito gringo! [USArg] CountryHumans
FanfictionEl odio y el rencor debían ser parte del pasado. Pero avanzar no es fácil, menos para alguien como Argentina que tantas decepciones había tenido a lo largo de la historia y con ello, la desconfianza que tomó hacía el resto creció. Entonces, ¿Cómo c...