CAPITULO 52 "Confesiones"

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Los días pasaban y yo... Yo permanecía con aquel crudo mensaje en mi mente... Kagome me había terminado por culpa de su papá... Había pasado una semana desde q se habían ido, yo sabía q todo lo q él había dicho era mentira y q en algún momento ella se daría cuenta.
-maldición, maldición!- golpeaba las docenas de pantalones en la bodega de la tienda y las lágrimas caían sobre estos. -te extraño mucho mi amor- me senté en el piso y abracé la enorme pila de pantalones q tenía al frente, quería verla, abrazarla, besarla y sobretodo aclarar las cosas pero no podía por q no tenía ni un maldito número de teléfono para llamarle, le escribía a diario al Messenger pero ella no se conectaba, lo único q me hacía mantener la esperanza era q ella no me había bloqueado, quizá a pesar de todo ella aún me amaba.
Sentí a alguien abrazarme por la espalda y me derrumbé, lloré como un niño, quería sacar todo aquello q me atormentaba y volteé quedando frente a ella y la abracé muy fuerte.
-la extraño mucho, quiero verla aunque sea un par de segundos- ella acariciaba mi cabello y su otra mano sobaba mi espalda.
-sesshy hermoso no llores, ella volverá, la visa para España dura entre 3 y 6 meses, ella también te ama, también te extraña, la conozco- besó mi cabeza y deshizo el abrazo. -te doy mi palabra q cuando ella se conecte verá los mensajes y sembraremos la duda- sonrió y secó mis lágrimas, Kagura era como una hermana, ella era una linda persona.
-gracias Kagura- volví a abrazarla y regresamos a atender a los clientes.
Unos días más tarde ví Bankotsu, Miroku y Kohaku en el centro comercial.
-que hay sesshomaru, cómo estás?- retuve un suspiro y sonreí viéndolo a los ojos.
-estoy bien bank, tú cómo estás?- asentí viendo a Miroku y Kohaku q permanecían a unos 3 metros.
-no estas bien sessh, te conozco hace mucho y se q no estás bien- volteó hacia los chicos y alzó la voz. -Muchachos vayamos por unas cervezas- los acompañé y entre cerveza y cerveza les comentaba lo q había ocurrido, q ella se había ido bajo engaños.
Horas más tarde los chicos estaban ebrios y yo solo había tomado 3 cervezas.
-no estés triste sessh, olvídate de ella y búscate a otra, si ella se fue sin haber hablado contigo es por q le importa poco tu versión y cree ciegamente en su papá- voltee a verlo con el ceño fruncido y remarque mis palabras con odio.
-Miroku, si no tienes nada mejor q decir entonces cierra el hocico y deja de hablar mierdas!- golpee la mesa muy molesto mientras lo veía fijamente a los ojos.
-por q te enojas? Sabes q lo q te digo es cierto no? Ella te va olvidar, se va encontrar un español y se va enamorar, se va casar y tú qué? Vas a quedarte solo para siempre? Ella no te ama y se fue por q deseaba viajar, conocer el mundo y tú le importas 10 kilos de verga- quise ponerme de pie y partirle la cara pero los chicos no me lo permitieron.
-callate maldita sea Miroku!- Kohaku me tomaba por los hombros y ejercía presión para q yo no me levantara de mi lugar.
-de verdad q te andas buscando un estate quiero cabron, cierra el culo q tienes por boca- dijo Bankotsu apretándome la mano mientras veía a Miroku.
-ok, ok ya me calmé- fue la respuesta de Miroku, buscó algo de dinero en su cartera y dejo algunos billetes sobre la mesa antes de irse.
-sesshomaru, no le hagas caso ya está ebrio- Bankotsu tenía razón, yo estaba en mis 5 sentidos y Miroku estaba ebrio, si lo golpeaba sería un acto de cobardía de mi parte.
-vamonos de aquí antes de q nos echen, esto se salió de control y será mejor irnos a descansar- Kohaku tomó lo q quedaba de su cerveza, pagó la cuenta y cada quien se fue a su casa.
Los días pasaban y no tenía ninguna noticia de kagome, mi amiga Gera me escribía constantemente y me desahogaba contándole mis tristezas y angustias, ella siempre me daba ánimos y un día me dijo q kagome le había respondido los mensajes; ellos estaban bien, habían rentado una casa y él señor Higurashi estaba trabajando en una academia de artes marciales. No era mucho pero me hacía sentir mejor saber q ellos estaban bien.
Gera y las demás chicas le habían contado mi versión de los hechos a Kagome y tal y como dijo Kagura habían sembrado la duda en ella.

(Narra kagome)
Había leído los mensajes de mis amigas, sesshomaru decía q él no había roto el compromiso, q él me amaba, q estaba muy triste por mi partida y q todo aquello eran mentiras de mi papá.
No sabía si creer o no, mi papá nunca me había mentido y quizá por eso decidí creerle cuando me dijo q lo había golpeado por eso, también me había dicho todo lo q había ocurrido; q mamá quería abortar por q él le había propuesto el divorcio ya q deseaba estar con su novia...
Todos los días asistía a las clases de taekwondo q el impartía, tenía conocimientos en karate pero ésta disciplina era diferente, con técnicas diferentes, toda mi vida lo había visto entrenar en el cuarto de entrenamientos en casa así q no me fue muy difícil adaptarme.
Un viernes por la tarde tuvimos una conversación.
-oye papá, por q me tienes incomunicada? Compraste una tablet no más para cronometrar los combates y llevar las puntuaciones, déjame conectarme, necesito hablar con mis amigas, con Kagura, con mamá- desde q llegamos a España no me había permitido conectarme, el había cerrado su cuenta de facebook y yo me había conectado un par de veces por q me había hecho amiga de una vecina la cual me prestaba su celular para comunicarme con las chicas del grupo.
-kagome, no quiero q hables con ese imbécil otra vez, el no quiere nada contigo entiéndelo!- fruncí el ceño pues no había mencionado a Sesshomaru y eso se me hizo extraño, él quería q yo no hablara con Sesshomaru por algo, a q le temía? Acaso lo q decían las chicas del grupo y Kagura era verdad? Acaso sesshomaru no había roto el compromiso?.
-ok, no pensaba hacerlo de todas formas... Oye... Vamos a dar una vuelta?- él asintió y salimos a caminar un poco, después de haber caminado por algunas calles ví un bar muy bonito y le pedí q entraramos.
-kag, es un bar, quieres tomar?- asentí y sin darle tiempo de protestar lo halé hacia adentro y tomamos asiento.
-dos cervezas por favor- ordené sonriente y él frunció el ceño muy molesto.
-una- siseó mirándome muy serio.
-dos cervezas- reiteré sonriendo y mirándolo fijamente a los ojos.
Prácticamente tuve q obligarlo a tomar la cerveza, él hacía pucheros con cada trago pues jamás en su vida había tomado licor, al terminarla volví a pedir otras dos cervezas y él de mala gana bufó asqueado.
-una más y nos vamos- volteó hacia la derecha y vió a una pareja en una mesa cercana q hablaban cariñosamente tomados de la mano.
Cuando el mesero llevo la otras dos cervezas q acababa de pedir, mi papá la tomó de un solo trago sin despegar la vista de aquella pareja.
-la amas verdad?- el asintió poniendo la botella vacía sobre la mesa y tomé su mano con tristeza. -se q las cosas con mamá ya no funcionan, se q ella te hizo daño rechazandote, humillandote, entiendo q hayas buscado el amor por otro lado y ahora q ella supo del embarazo de mamá... Lo siento mucho papá- poco a poco tomé mi cerveza y el cerró los ojos con fuerza al ver q aquella pareja se daba un apasionado beso. -quieres algo más fuerte?- el me miró con la tristeza tatuada en su rostro y asintió.
Tomamos una botella de whisky y poco a poco fue abriéndose; me dijo q amaba a su novia, q deseaba estar con ella pero q ella lo había mandado al diablo, q no le había creído q él desconocía sobre el embarazo de mamá y q no quería saber nada de él, q él había dado hacer los anillos ya q pensaba casarse con ella pero q ya todo se había ido al carajo... Las lágrimas rodaron por sus mejillas y con cada trago se abría más; me dijo q todo era mentira, q sesshomaru no había dicho nada y q él lo había golpeado por q le impidió irse de la clínica y atravesó la camioneta para impedirle el paso y q casi se estrella contra la camioneta... Me pidió disculpas llorando de arrepentimiento, sabía q era sincero, ésta vez no estaba mintiendo... Había logrado mi objetivo real; q me confesara la verdad.

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