Un año más tarde:
Asuna:
Estábamos a unos días del cumpleaños de Kirito-kun, decidí hacerme cargo de organizarle una fiesta sorpresa; invitados, comida, lugar, música, todo.Estos últimos días él se ha comportado muy distanciado de mí, sé muy bien que este es nuestro último año en la escuela, ya estábamos a un suspiro de entrar a la Universidad, pero nunca imaginé que se llevaría todo el tiempo, la atención y la presencia de mi peli negro, eso me molestaba, en cierto punto.
En esos momentos me encontraba con mis amigas, recién me había desocupado de las tareas escolares, quería mantener la mente el blanco para no pensar tanto en Kirito, fue una recomendación de Alice.
—Oye y ¿esa niña dónde está? – preguntó Rika. Levanté mi mirada y levanté mis hombros, restándole importancia.
—Me dijo que no podría venir, cosas que hacer – dije y aplaudi al ver que Yuna y Keiko terminaron de cantar.
—Entiendo. Debo tomar aire fresco. Tomar mucho líquido me ha mareado
Asentí ante lo que dijo. Note como Keiko y Yuna me llamaban a cantar sonreí, me levanté de mi puesto y las fui a acompañar.
Narrador:
La castaña oscuro salió del pequeño karaoke y se dió a la tarea de seguir a la mencionada rubia. No le comentó nada a su amiga ya que quería comprobar que hacia ella allí.Esta caminaba de la mano junto a quien sería su novio, arqueo una ceja y sonrió con malicia. Se acercó lo suficiente y los tomó de los hombros.
—¡Alice-san! – dijo y sobresalto a los dos jóvenes. Esta mantuvo su sonrisa en todo momento. – No sabía que tenía una cita con Eugeo-kun
—R-Rika-chan – dijo posicionando una de sus manos en su pecho. – Tuve cosas que hacer, pero Eugeo-kun me preguntó si podía acompañarlo en un mandado.
Volteó su rostro claramente avergonzada, sus mejillas la delataban, se cruzó de brazos y miró al rubio quien rápidamente se disculpó y las dejó solas.
—Lamento no haber ido, si es por eso que estás aquí, pero debo ir con Eugeo-kun.
—¿Debes? ¿No que le estabas haciendo un favor?
Esta sudó frío al meditar lo que había dicho, río nerviosa y se despidió de la castaña. Esta por su parte esperó a que se perdieran de su vista y volteó.
—Algo tramas Schuberg-san, y te descubriré tarde o temprano
(...)
Las clases estaban por iniciar dentro de unos minutos, nuestra castaña claro se había quedado dormida por la salida del día anterior e iba retrasada, logró ingresar a la institución, se acercó a su casillero para cambiar sus zapatos.
—Hola, hermosa
—Hayashi-kun – dije y cerré la puerta de mi casillero. Le miré con una ceja arqueada. – ¿Necesitas algo?
—Una cita contigo, ¿sabes?
Rodó sus ojos y desvió su mirada hacia otro lado.
—No. – contestó. – Dejá de insistir, por favor.
Río ante sus palabras y la acorraló contra los casilleros.
—Es por Kirigaya, ¿no?
Esta le lanzó una mirada con obviedad, le empujó con ambas manos y caminó en dirección al salón de clases.
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Hilo rojo
Fanfiction"Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar el tiempo, lugar o circunstancia. El hilo rojo se puede estirar, contraer o enredar, pero nunca romper" Una simple leyenda... Una simple leyenda ha unido a d...