Mi Ángel. {Mitades Opuestas #2} COMPLETA

*Capítulo 30: Sincero.

Dedicado a: JackyeCam13 espero te guste  tu 2 cap!!! Y muchas gracias por estar al pendiente de la historia!!

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Semanas después.

Por el el momento no había nada nuevo que reportar, todo estaba yendo bien, en general. Había dormido, el plan seguía en marcha, el profesor pagaba mis colegiaturas, Matt me seguía pagando bien y sobre todo las cosas con Jess están más que bien. Hace tanto que no me sentía así, sin angustia y sin ira, y todo gracias a ella, sabía que era así.

Ahora mismo estaba en la universidad, en mi última clase para ser más exacto y cuando el llegó la hora el profesor nos dejó libres.

— Es todo por hoy, pueden irse, feliz fin de semana. — todos comenzamos a guardar nuestras cosas para finalmente irnos.

En cuanto salí lo único que podía pensar es que pasaría toda la tarde con Jess, la idea me encantaba pero cuando estuve afuera del edificio y escuché esa voz supe que todo se iría a la mierda.

— ¡Ey! ¿¡A dónde vas!? — rodé los ojos para luego girar sobre mis talones. Al parecer estaba tan perdido en mis planes que no noté que Matt me estaba esperando justo al lado de la puerta. Me acerqué a él para que la conversación no fuera pública pues siempre que Matt veía era por trabajo.

— ¿Pues a dónde crees, imbécil? A casa, ya es hora de irse aunque tal vez tú no entiendas eso porque no te presentas a ninguna clase.

— Claro que lo sé, yo lo sé TODO. — sonrió engreído para después ponerse serio.— Voy a ignorar tu actitud de mierda y seré directo porque no tengo mucho tiempo. Necesito que vuelvas como camarógrafo. — Automáticamente mi cerebro tuvo la respuesta.

— Vete a la mierda.— le mostré el dedo de en medio y estuve listo para marcharme pero claro que no se rendiría. De la nada aparecieron dos más de su grupo para bloquearme el paso. Volví a mirarlo. — ¿Es una puta broma? — se encogió de hombros.

— Tú no me dejaste otra opción, últimamente estás rechazando todos los trabajos que no te parecen y honestamente me estoy cansado de eso porque el puto jefe soy yo, no tú.

— ¿Y qué? ¿Me van a golpear? — reí. Era estúpido siquiera pensarlo porque de todos los del grupo que Matt tenía en la universidad yo era el mejor para pelear, él mismo lo dijo. Rió.

— ¡Claro que no! Ellos están aquí para detenerte, pero los demás están afuera  vestidor para nadadores listos para entrar y golpear a todos allí adentro.— me encogí de hombros.

— ¿Eso tendría que importarme? — soltó una carcajada haciendo que me confundiera.

— ¡Pues sí! ¡¿A quién crees que culparan?! El único de nosotros y está metido en esa mierda eres tú y claro que nadie lo dudara porque todos allí te odian. Y creo que el mejor castigo para algo tan serio sería la expulsión ¿No lo crees? Tú que estás "estudiando" derecho lo debería de saber. — al final solo me miró con una gran sonrisa pues sabía que me tenía encerrado y lo único que podía hacer era cerrar los puños y tensar la mandíbula por la impotencia.

— Bien.— sonrió más.— ¿Qué tengo que hacer está vez? — Matt se acercó para abrazarme por los hombros y comenzar a caminar por las escaleras.

— Que bueno que hayas razonado William, ahora te contaré...

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Unas de las principales razones por las que dejé de lado el ser camarógrafo de los vídeos es porque conforme pasaba el tiempo me di cuenta que cada vez los clientes pedían cosas mucho más extrañas, y no, no me refiero a cosas como juegos sadomasoquistas o incluso orgías sino a cosas como algo... enfermas, podríamos decirlo de esa forma.