33- Anne

4.1K 182 3
                                    

Harry llamó a la puerta y yo presioné su mano. Estaba nerviosa, súper nerviosa, después de todo no se conocía a una madre todos los días. Sentía curiosidad, sí, además de tener la necesidad de llenar ese espacio en blanco que llevaba su nombre. Mi madre no había sido quizás, la mejor figura. No, sí, lo había sido. Me había cuidado, me había querido, pero algunas cosas no eran fáciles para nadie y nosotras habíamos vivido un infierno.

-Tranquila. Todo va a estar bien.- susurró Harry en mi oído.

La puerta se abrió y sentí que no podía moverme. Ahí estaba ella. Era mi mamá. No sabría cómo describirla a ella ni lo que sentí, sólo recuerdo que no sabía qué hacer. Estaba paralizada, aturdida, sorprendida.

-Mamá, ella es Nina. Princesa, ella es tu mamá.

Mis ojos se llenaron de lágrimas al igual que los de ellos. Era tan extraño conocerla. ¿Cómo se suponía que se conocía a una madre? ¿Qué se decía? ¿Qué se sentía? Las manos me temblaban.

-Claro que es ella. Son los mismos ojos oscuros, la misma sonrisa.- sollozó.-¿Puedo abrazarla?

Harry me miró y asintió, entonces ella me rodeó con sus brazos. Es mi mamá. Mi verdadera mamá. No me atreví a cerrar los ojos. Pasé mis brazos en torno a ella. Sentí su perfume y su cabello me hizo cosquillas.

Cuando se apartó, entramos a la casa y me senté junto a Harry en el sofá. Ella se fue a buscar algo de tomar a los pocos minutos. Estaba inquieta. Los tres lo estábamos.

...

-Hola, hermosa.- saludó una mujer alta con el cabello rojo.- Aquí están tus nuevos padres.

Junto a la puerta mi mamá y mi papá me miraban sonriendo.

...

Presioné la mano de Harry.

-Tenemos que irnos,- gritó.- esto fue una mala idea.-dijo para sí.

Me tomó en brazos y salió corriendo de ahí. Vi a Anne asomarse a la puerta pero se detuvo ahí. Si Harry hacía lo que hacía debía tener una buena razón y ella sabía eso.

...

-Esta es tu nueva casa.- dijo mi mamá.

-Esperamos que te guste.- sonrió mi papá.

...

-Aguantá un segundo más.- pidió Harry revolviendo mi bolso.

...

-Nina, despertate. Tenemos que irnos.- dijo mi madre. En la puerta se veían destellos de luces azules y rojas.

-¿A dónde mami?

-Eso, linda, yo soy tu mami. Si alguien pregunta, yo soy tu mami y él tu papi.

Me tomó en brazos un cubrió mi cuerpo con una manta.

...

-Nina, por favor.- pidió Harry entre lágrimas.

El respirador funcionó. Me incorporé en el asiento y él me abrazó con todas su fuerzas.

...

Narra Harry.

Casi me muero cuando la vi cerrar los ojos. No encontraba el inhalador y ella no parecía estar escuchándome.

-Nina, por favor.- pedí llorando. No podía estar pasando eso, no otra vez. No ahora que por fin la recuperaba.

Ella abrió los ojos y la tomé en mis brazos prometiendo que todo iba a estar bien. Le dije a Paul que nos llevara a casa y ella se durmió en el transcurso del viaje. Tomé el teléfono y mi mamá atendió al instante.

-Antes de que digas nada, dejame pedirte disculpas. Fue una mala idea. Pensé que esto podía pasar, pero ella tenía tantas ganas de conocerte. Dejá que esto se arregle y voy a volver a llevarla a casa, lo prometo. Pero no quiero que nada malo le pase a mi hermana. Mamá, la amo, no sé cómo ni por qué se separó de nosotros durante tanto tiempo, no te echo la culpa de nada pero solo... Dejala que se ponga bien antes de que te vea otra vez. La amo y solo quiero que esté bien.- dije.

-Harry... Está bien. Solo... Cuidala muchísimo. Sé que querés saber qué pasó, por qué nunca supiste de ella pero no puedo explicártelo.

-Está bien, mamá, no necesito que me lo expliques. Solo voy a decir que la vida de Nina era una mierda y no quiero que eso vuelva a pasar. Quiero mimarla y consentirla. Quiero cuidarla. Quiero ser su hermano.

-Está bien, Harry. Adiós, te amo.

-Y yo a vos.

Corté. Sabía que le dolía que me haya llevado a Nina pero le dolería más que algo grave le pasara a su hija. Sabía que en ese momento ella no estaba bien, ninguna de las dos lo estaba. Mi madre no me cortaba el teléfono, siempre era yo quien lo hacía. Nunca hablaba poco ni con frases cortas, no conmigo, a menos que las cosas no estuvieran bien. Suspiré y acaricié el cabello de mi hermanita hasta llegar a casa. No permitiría que nada le sucediera, jamás.

Hermana de Harry StylesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora