Hermana de Harry Styles

57- La cena

Liam tapó mis ojos con suavidad mientras avanzábamos.

-¿Dónde estamos?- pregunté haciendo puchero.

-Ya vas a ver.- rió él.

-Amor, no doy mas de la intriga.

-Pensá en otra cosa.- rió nuevamente.

-¿En qué?- bufé.

-En que vas a casarte conmigo y en que sigo vivo. Tu hermano no me asesinó todavía.

-No voy a dejar que te asesine.- reí acariciando su mano.

-¿Cómo vas a hacer eso?- preguntó divertido.

-Me voy a convertir en una guerrera y voy a combatir con mi espada.- dije y él estalló en risas.

-Las princesas no pelean con espadas.

-Yo no soy una princesa, Liam- me quejé.

-Vos sos mi princesa, mi princesita sin corona que usa zapatillas.

-Tenés que admitir que combinan con mi vestido.- reí.

-Sí, te quedan hermosas. Además si no tenés tacos seguís enanita y te amo así de enanita.

Depositó un beso en mis labios y yo sonreí inconscientemente.

...

Bajamos y él me destapó los ojos. Estábamos en una isla, era hermosa y el agua era cristalina. Liam realmente me había llevado a una isla. Cada día encontraba algo nuevo con lo que sorprenderme y yo no podía creerlo. Sus detalles eran realmente preciosos y únicos.

-Bienvenida.- dijo Liam.

Sonreí y lo besé aún cautivada por la belleza del lugar.

-¿Te gusta?- preguntó algo inseguro.

-Me encanta.- sonreí.

Un hombre detrás nuestro rió.

-Tenías razón,- dijo.- es especial.

-Es hermosa.- dijo Liam viéndome con los ojos iluminados.

Me sonrojé y él soltó una risita. Cenamos y reímos recordando miles de cosas. Terminamos sentados en la arena abrazados viendo la luna.

-Si pudieras pedir un deseo ¿Cuál sería?- pregunté.

-Tener una hermosa familia con vos a mi lado.

Lo miré y me besó.

-Vamos a casa.- murmuró.

-Está muy lejos casa.- reí.

-Con vos cualquier lugar es casa.

Me mordí el labio bajando la vista. Era increíble lo bien que me hacía sentir con tan solo palabras.

-Te amo.- susurré.

-Yo te amo muchísimo más, mi princesita.

...

Liam cerró la puerta a su espalda mientras me besaba. Me depositó en la cama y se sacó su saco sin dejar de besarme. Me volvía loca, claro que lo hacía. Desde el primer beso, el primer abrazo. La primera vez que lo vi ya sabía que iba a quererlo, pero jamás creí que fuera a sentirme tan a gusto con él. Nunca pensé que él iba a volverse mi vida, mi razón de ser, mi todo.

Estábamos los dos, solos, comprometidos, acostados en la cama de un hotel en Argentina, desnudos, juntos. Tenía mi cabeza recostada en su pecho y él me rodeaba con su brazo pegándome a su cuerpo. Besó mi frente.

-Dormí, amor que mañana volvemos al bus.

Asentí y cerré mis ojos luego de depositar un beso en su pecho desnudo. Lo amaba, claro que lo hacía y ahora sentía el anillo en mi dedo y no podía evitar sonreír. En la mañana volvíamos al bus. Cada vez faltaba menos para volver a casa. Lo único que me preocupaba era que en la mañana debía hablar con Harry que, aunque quisiera matar a Liam, yo sabía que en el fondo estaba muy feliz con nuestro compromiso. Lo supe en cuando tomó mi mano y acarició mi anillo con suavidad con una pequeña sonrisa surcando sus labios.