Fría Mentira ~ JIMSU.♡

6

Solo escucho el grito de horror emitido por su madre cuando bajo las escaleras para desayunar.

-¿¡Pero que te ha pasado Min Yoongi!?

Su madre corrió hasta él observando su vendaje.
Cierto, había olvidado eso por completo.

-Estoy bien mamá.

-Parece momia.

Dijo el pequeño Hoseok quién come muy a gusto de su cereal.

-¡Hoseok no digas eso!

Regañó su madre.

-No vayas hoy a la universidad Yoongi, quédate en casa. Un golpe en la cabeza puede ser grave, es mejor que tengas reposo. Iré a dejar a tu hermano y vendré para cambiarte la venda. Hoy es mi día libre.

El pelinegro asintió.
Su hermano terminó el desayuno, cepilló sus dientes y le dio un beso a su hermano mayor en la mejilla.

-Espero que te mejores hyung.

Dijo su hermanito abrazándolo antes de irse.

-Gracias Hobi.

Yoongi acarició los cabellos castaños del niño y lo dejó ir.
Cuando se quedó solo alistó una taza de café y se acomodó en el sofá viendo para ver caricaturas.
Poco a poco se fue quedando dormido.
Hasta que su madre abrió la puerta bruscamente haciendo que diera un salto en su lugar y se levantara del sofá.

-Vamos toma asiento en el suelo, te traje panquecitos rellenos de chocolate.

Los ojos de Yoongi brillan como estrellas, agradeció a su madre y tomó asiento en el suelo tomando un panquecito.

La señora se acomodó en el sofá colocando sus piernas a cada lado de su hijo.

-¿Cómo sucedió esto Min Yoongi?

El nombrado dejo salir un suspiro y cerró sus ojos.

-Salí de la universidad muy cansado, no había dormido nada en todo el día. Esperé en un semáforo y cuando cambió de color crucé la calle. Un auto venía a toda velocidad y un chico se lanzó sobre mí. Creo que el golpe fue por el impacto cuando caí del suelo al ser empujado por el chico. Él realmente me salvó la vida. Quedé en deuda.

Su madre se quedo en silencio sin detener su tarea.

-Voy a verificar este accidente. El conductor fue muy imprudente. ¿Conoces al chico que te ayudó?

Preguntó con curiosidad su madre.

-Yo... Él esta en la universidad, su nombre es Park Jimin. Casi no nos hablamos, solo fueron unas pocas veces que nos hemos topado.

Sus mejilla se ruborizaron al recordar lo que pensó ayer por la noche.
La señora Min asintió con la cabeza aunque su hijo no la estuviera viendo.

-Listo he cambiado el vendaje, ya mañana te lo puedes quitar. Al parecer estas muy bien, no fue mucho eso me alegra Yoonie. Puedes dormir todo el día, no te preocupes.

-Gracias mamá.

El pelinegro se levanto del suelo y planto un beso en la frente de su madre, subió hasta su habitación y tomo una larga siesta hasta olvidarse de su existencia.

💫

Jimin esta en graves problemas, le hace falta algunas horas te trabajo comunal, casi había completado las 35 horas, solo le faltan 5 horas más.

Habló con la chica encargada de la biblioteca, al parecer la señora Joon esta enferma y se tomó un tiempo para recuperarse, así que ahora hay una preciosa chica de cabello rojizo atendiendo.

Jimin se acercó hacía ella con una sonrisa seductora. Tendrá que sacar sus dotes de conquista para poder terminar con ese trabajo.

-Hola preciosa.

La chica lo miró de pies a cabeza y se mordió el labio.

-¿En qué puedo ayudarle?

-Yo estoy buscando un lugar para completar mis horas de trabajo comunal. ¿Hay algo aquí en lo que pueda ayudar?

La chica sonrió, pero enseguida hizo un gesto demasiado fingido de tristeza.

-Lo siento mucho, pero ya hay un chico encargado aquí. Fue escogido por la señora Joon.

Claro Yoongi, lo observó la vez pasada.

Por todos los cielos, Jimin necesita terminar ese trabajo y no hay lugar más fácil para obtener esas horas que la biblioteca. Aunque la vieja fuera una pesada.
Una gran idea paso por su cabeza.
Sonrió maliciosamente, paso su lengua por su labio inferior y luego lo mordió.
Miro a la chica de pies a cabeza analizando la situación.

-¿Hay algo que quieres que haga por ti? Puedo hacerlo, solo si me dejas trabajar aquí.

La voz de Jimin salió suave y ronca, muy seductora a su parecer. Pero no se le ocurre otro lugar en donde pueda completar esas horas.

Las mejillas de la chica tomaron un color similar al de su cabello y trago grueso. Sonrió con nerviosismo.

-Por supuesto, acompañame.

La chica se levanto del escritorio y colocó un cartelito de "cerrado" en la puerta principal. Casi siempre lo usan cuando van a almorzar o beber café. Ahora mismo no hay nadie allí.
Jimin la tomo de la mano y la llevó a uno de los últimos pasillos.
Tuvieron sexo y la verdad el rubio pensó que sería bueno pero termino decepcionado.
Al final la chica le dijo que podía comenzar mañana para completar sus horas de trabajo comunal, le explicaría todo a la señora Joon cuando regresara.
Salió de allí hacía su casa bastante aburrido.

Su padre lo recogió y el no prestó atención a lo que le decía.
Hoy no había visto a Yoongi en todo el día, incluso compartían una clase y el pelinegro estuvo ausente. Pero comprende, es mejor que tenga reposo y se recupere pronto.

Solo espero que se encuentre bien.

~  🌻 ~

Escuchó una risilla traviesa en medio de la oscuridad, sintió como el colchón se hunde por el peso. Es sorprendido por un pequeño cuerpo que se lanza sobre él. Enseguida enciende la lámpara e inicia con su ataque de cosquillas.

La dulce risa de su hermano inunda su habitación y eso le transmite mucha tranquilidad.

-¡Por favor detente Min Miau!

-Cuando me respetes te dejaré en paz mocoso malcriado.

Los dos hermanos rieron al mismo tiempo. Yoongi detuvo las cosquillas y ambos se acostaron en la cama mirándose fijamente.

-Hyung.

-¿Si?

-Mamá dice que bajes a cenar, desde hace rato te estaba llamando. Incluso pensó que estabas desmayado.

Se incorporaron en la cama listos para bajar.

-Mi sueño es muy pesado, lo siento.

Yoongi lo subió a caballito sobre su espalda mientras camina hacia la cocina, Hoseok sonríe mientras mueve sus piecitos.

-¡Vamos gatito momia!

-¡RESPETAME!

-Ustedes hermanos Min, ¡bajen ya!

El gritó de su madre retumbo en las cuatro paredes. Los dos se miraron para estallar en sonoras carcajadas.