Fría Mentira ~ JIMSU.♡

29

Jimin observa el rostro tranquilo del mayor mientras acaricia los cabellos oscuros con tranquilidad.
Fueron a una de las tantas habitaciones que tiene el lugar y apenas Min tocó la almohada se quedó profundamente dormido.

Pero Park no podía descansar de esa misma manera, su dolor y angustia lo mantienen despierto.
Suspiró profundamente fregando su rostro cansado con ambas manos,
Volvió su mirada al cuerpo del pelinegro, se inclinó y le dejó un beso en la mejilla para después salir de la habitación. Desde lo más profundo de su corazón le agradece por acompañarlo en este momento tan difícil. 

Caminó hasta el salón principal y sacó la cajeta de cigarrillos de su bolsillo trasero.
Salió hasta afuera respirando el aire frío de esta solitaria madrugada.
Encendió un cigarrillo y cerró los ojos inhalando profundamente el humo.
Escuchó unos pasos a sus espaldas y se sorprendió al ver a Minho allí.

-¿Qué haces aquí Minho?

El chico se acercó a él con una sonrisa.

-Hola Jimin, ¿Cómo estás?

El rubio juntó ambas cejas, ¿por qué esta aquí? No es como si fuese cercano a su familia, a parte no ha ido a la universidad. Nadie debería saber esto.

-Estoy bien

-¿Estas bien porque tu madre murió?

Jimin abrió sus ojos sorprendido, se volteo hasta quedar totalmente de frente al chico.
¿Cómo sabe él algo de eso?

-¿Qué estupidez dices?

-Ah Park, es muy lamentable. Lo siento por ti y tu madre.

Eso enfureció a Park. Tomó a Minho por el cuello de la camisa de forma amenazante.

-¿Tu cómo sabes de esto? ¿Eh? ¡Responde! No tienes el derecho a decir algo así estúpido. A parte, ¿Qué haces aquí?

Minho se soltó del agarre y empujo el cuerpo de Jimin.

-No seas imbécil. Tú Park Jimin vas  a pagar por lo que hiciste y todas las personas a tu alrededor van a caer junto a ti.

El de cabellos oscuros lo miró con odio y rabia contenida para luego irse.

Eso fue tan jodidamente extraño para Park hasta el punto en el cual se confundió demasiado.

Jimin se quedó viéndole incrédulo. ¿Qué hizo él?
Negó con la cabeza, se terminó el cigarrillo y entró de nuevo al lugar para dirigirse a las habitaciones dejando la puerta abierta.
Se sorprendió por ver a Yoongi incorporándose en la cama, apenas habían pasado unos minutos desde que salió a fumar. 
Se acercó a él y lo tomó de la cintura dejando un beso en su mejilla sonrojada.
El pelinegro recostó su frente en el hombro del rubio suspirando profundamente.

-Hueles a cigarro.

-¿Por qué estás despierto hyung? Pensé que dormirías más.

-Mmhh.. Me sentí un poco solo.

Jimin sonrió, ah... su hyung es tan tierno.

-Vuelve a dormir un rato más.

-Duerme conmigo.

Yoongi se separó de él y lo miró a los ojos de una forma suplicante. Aunque sea quiere que el menor descanse su cuerpo por algunos minutos.
El rubio estaba por aceptar pero una tos falsa los sacó de la pequeña burbuja que ambos habían creado. 

El mayor esta a punto de separarse del cuerpo contrario pero Jimin no lo dejo, en cambio acarició su mejilla y le sonrió con cariño.

-Tranquilo no es nadie importante.

Min solo se limitó a asentir un poco avergonzado.

-¿Disculpa?

Esa voz femenina tan chillona y estresante. Si no fuese hombre ya la hubiera dejado calva. El rubio rodó los ojos casi de forma instantánea. 

-¿Qué haces aquí?

-Solo quise ver como te encuentras. Esto debe de ser difícil para ti.

-Pues como vez estoy bastante bien, no se ni que haces aquí. Por favor retírate..

Masha rodó los ojos ante esa forma tan arrogante en la cual Jimin le habló.

-No haré eso, tu padre llega en unos minutos.

Observó a ambos chicos de su lugar analizando su comportamiento. El pelinegro ni la miraba, esta demasiado relajado entre esos brazos fuertes y cálidos. Minutos después Masha se retiró.

-¿Quién es ella mocoso?
Cuestionó con suavidad en su voz, apenas para que el menor pudiera escucharlo.

-Ella es la mujer por la cual mis papás se divorciaron.

Yoongi se alejó un poco de él y lo miró a los ojos, abriendo la boca un tanto sorprendido.

-¿Qué hace aquí? ¿No tiene respeto?

-Al parecer no, solo espero que papá no venga con su hija.

El pelinegro hizo un puchero y dejo un besito en el cuello del rubio para alejarse de él, buscó su teléfono pero al ver la hora pensó que no sería muy prudente llamar a su madre justo a las 4:00 a.m. 

De todas formas ella despierta temprano, le marcaría mas tarde solo espera que todo este en orden.

Así transcurrió parte de la madrugada y mañana, Jimin no durmió, solo estaba acostado en la cama acariciando el cuerpo del mayor para relajarse. La hora a la que él mas le teme esta por llegar. Los conocidos de su madre y familiares se reunieron para hacer una última oración antes de que el cuerpo de su mamá fuese llevado a la iglesia y luego al cementerio.

Mantuvo su cabeza gacha y su mirada pérdida. Yoongi nunca soltó su mano en todo el proceso.

Se trasladaron hasta la iglesia en donde se llevó a cabo la misa y luego el cementerio.

Ah, el cementerio, un lugar triste y tétrico. ¿Qué simboliza un cementerio? ¿Un final? o ¿Tal vez un recuerdo? ¿Una estadía para siempre?  Jimin no esta seguro de ello, pero supo que no estaba preparado para despedir a su madre cuando su abuela de acerco a él.

Todos están reunidos alrededor del ataúd que mantiene una parte abierta dejando al descubierto el rostro y parte del pecho de la mujer.

-Hijo...

Jimin se volteo al escuchar la voz de su abuelita. Yoongi esta detrás suyo un poco alejado para dar más privacidad.

-¿Sucede algo abuelita?

La mujer de avanzada edad negó con su cabeza, dejo unas caricias en la espalda baja de Jimin.

-¿Quieres ver por última vez a tu madre?

Park guardo silencio y deslizó su vista hacia el ataúd, sintiendo como sus ojos se llenan de lágrimas.

-No lo mires si no quieres Minnie, algunas personas les da miedo, incluso tienen pesadillas pero no debe de ser así. Me gustaría que el recuerdo que quede de tu madre sea uno hermoso y feliz. Sabes que ella siempre estará contigo, recuerda aquella mujer fuerte y con una belleza única que amo incondicionalmente a su hijo.

Aquellas palabras solo hicieron que el corazón del menor quedara destrozado. De verdad el quiere recordar con felicidad a su madre. 

El momento llegó. Cerraron el ataúd y lo dirigieron al hoyo que habían cavado con anterioridad.

Poco a poco fue desapareciendo fue introducido hasta que tocó la superficie. Los trabajadores fueron lanzando la tierra hasta que lograron tapar el hueco.

Jimin siente que pierde la fuerza en sus piernas, su rostro esta lleno de lágrimas y sus manos tiemblan.

-M-mamá no te vayas por favor....