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-¿Vas a quedarte?

Jimin observó al mayor quien sostiene la puerta principal, sonrió y acarició le acarició la mejilla suavemente.
Quisiera hacerlo pero no puede. Va bastante atrasado en la universidad y necesita ponerse al día, mantenerse ocupado y no pensar tanto en lo de su madre, aunque Yoongi lo distrae mucho tiene prioridades con su estudio.

-Tengo que intentar ponerme al día con la universidad, creo que será en otra ocasión.

Min hizo ojitos de gatito bajo la lluvia con un puchero intentando verse lo más adorable posible para que el menor se quedara. Últimamente disfruta mucho que estén en su casa.
Eso hizo que el corazón de Park se hiciese polvo y la ternura invadiera su toda su mente.
Estrecho el cuerpo del mayor contra el suyo, dejo salir soniditos divertidos como toda una fangirl viendo a su grupo favorito.

-Eres una masita. Dios mío, tan tierno.

-¡Oye! No digas eso mocoso.

El rubio se alejó y beso los suaves labios de su hyung degustando el leve sabor dulce que tienen.
Yoongi cerró los ojos encantando por el tacto de sus labios, es tan suave y lento. Siente que se derrite como un helado. Es increíble todo lo que el rubio provoca en él.

-Nos vemos mañana hyung.

Park se alejó despacito y procedió a marcharse. 
El pelinegro lo observó irse hasta que se convirtió en un punto y lo perdió de vista.
Dejó salir un suspiro y se adentró a su casa.
Hoseok esta dormido en el sofá, Min se detuvo un momento y lo miró con una profunda tristeza. Luego decidió hacer la cena para su mamá que debe de venir bastante cansada del trabajo.
Cocinó tres trozos de carne, preparó un delicioso puré de papa y ensalada de lechuga.
Los minutos se fueron volando hasta que escuchó la puerta principal abrirse.
Él por su parte colocó los platos en la mesa y fue sirviendo para que no se enfriara.

-Mmmmh... huele delicioso.

Su madre dejó su cartera y algunas bolsas que trae sobre el fregadero para proceder a lavarse las manos
Un adormilado Hoseok caminó a pasitos lentos hacía la mesa y se acomodó en una se las sillas.
La señora Min tomó asiento a su lado al igual que Yoongi.

-¿Cómo están? ¿Qué hicieron hoy?

La mujer comenzó a comer mientras escucha a sus hijos comer. Siente tanta tranquilidad de tenerlos a su lado, es la mujer más feliz del mundo con los mejores hijos.

-Estuvo tranquilo.
Yoongi sirvió un poco de ensalada en su plato y siguió comiendo.

El pequeño castaño mira fijamente su plato sin decir nada al respecto.
Algo extraño para los mayores, ya que el siempre esta hablando de su día y contando todo lo que hizo en la escuela con una gran sonrisa.
Su madre se detuvo y miro fijamente a su hijo.

-Hoseok ¿sucedió algo de lo cuál quieras hablar?

Los ojos del niño se cristalizaron al escuchar esas palabras por parte de su mamá. Intentó por todos los medios no llorar

-M-mamá... ¿De verdad me haz criado mal? ¿Soy un mal niño por que me gusta ver la televisión y que mis pertenencias sean de colores? ¿Está mal querer ser yo mismo?

Esas palabras cayeron como un balde de agua fría sobre Yoongi y quedaron grabadas en lo más profundo de su corazón. Miró como las lágrimas se deslizan por las mejillas de su hermano y él estuvo a punto de llorar también. Hoseok no es un niño que llore mucho por diversas situaciones de su vida diaria, siempre le dice que "prefiere tener una sonrisa para atraer la felicidad y que todos a su alrededor también se sientan felices" y eso es algo que el pelinegro admira tanto. Siempre pensó que su hermano le ha enseñado tantas cosas buenas, debería aprender más de él.

  Fría Mentira  ~ JIMSU.♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora