__ ¿Cómo es que los dos están fuera de clases? –Pregunto cruzado de brazos-
__ ¿fuera de clases?, disculpe profesor pero estamos en nuestra hora de descanso –dijo Arti guiñándole el ojo a Ulises-
__ Eso es cierto, tío.
__ Pues, déjeme decirles que ambos están equivocados, su descanso termino hace más de 10 minutos.
Al escuchar esto, inmediatamente Martina reviso su celular para verificar la hora para luego negar y fulminarlo con la mirada.
__ Eres bastante odioso, me has asustado sin necesidad.
Fernando sonrió y desordeno su cabello.
__ ¿Cómo estas, campeón? –pregunto-
__ Bien tío pero, no desordenes el cabello de A, luego tendrá que ir al baño a acomodarse.
__ Gracias por eso, chiquito. Tu tío sí que esta pasado.
__ Uy, creo que me han reemplazado en estos momentos –comento algo sincero-
__ No tío –se apresuró a decir Ulises- Yo los quiero a los dos mucho –sonrió-
__ Y eso es increíble, U.
__ Si, A. Por cierto tío Fer, A me ha traído galletas, ¿quieres una?
__ Claro hijo.
Ulises volvió abrir la cajita en la cual se encontraban las galletas y le brindo una a su tío, quien muy gustoso se la acepto, llevándola así a su boca.
__ ¿Están ricas? –Pregunto Arti-
__ Un poco, pero creo que yo las hago más deliciosas.
__ Tío...
__ Está bien, está bien. Señorita las galletas que ha preparado están deliciosas. –Guiño su ojo-
__ Gracias profesor. –Le devolvió el guiño-
__ Oh, mis compañeros están entrando a clases, ya debo irme. –Se despidió todo acelerado para volver a su aula-
__ No sé en qué momento creció tanto. –confeso el hombre observando a su sobrino-
__ Y yo no sé en qué momento tú te volviste más guapo que ayer. –se giró para poder mirarlo-
Eso le causó mucha gracia y negó algo sonrojado.
__ Señorita, le recuerdo que estamos en la universidad y que si sigue diciéndome tales cosas, no voy a poder contenerme.
__ Esa es la idea, señor Castillo. –admitió-
__ ¿Cuándo podemos vernos fuera de la universidad, Martina? –pregunto pero alguien llego para interrumpirlos-
__ Disculpe profesor Castillo.
Andreina hizo que ambos voltearan.
__ No puede ser cierto –susurro Arti-
__ Si, dígame –comento observando a la profesora- relájate amor –murmullo para su chica-
La profesora Mejías frunció su ceño al ver a este par juntos, aun así se decidió para acercarse a ellos.
__ Disculpe pero, ¿Qué hace con Martina en este lugar?
__ La señorita Martina me enseñaba las plantas que había estado sembrando en este lugar –señalo al piso- por eso estamos en este lugar.
__ Comprendo pero, ¿por qué no pudo decirle a otro profesor?
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SEÑORITA [Double S #1]
रोमांसDesde que Martina Hidalgo cumplió sus 18 años, ha querido experimentar todo lo que tenga que ver con el sexo, desde el punto más mínimo, hasta el punto máximo, pero había un pequeño detalle... Ella aún seguía virgen.