SEÑORITA [Double S #1]

#77

Maldición esas palabras lo hicieron jadear, cerro sus ojos y la apretó más contra su cuerpo, hasta que siente como su mujer toma de su cabello haciéndolo inclinar su cabeza hacia el espaldar del sofá, la cual no espero para comenzar a devorar su cuello, con besos, lamidas y mordiscos que lo excitaban cada vez más. Sus manos viajaban por todo su cuerpo y quiso adentrarse más al rozar su feminidad pero escuchando la risa de Martina, abrió sus ojos.

__ Aún no. –comento dándole un beso voraz en sus labios para bajarse de su hombre. Estando de pie, estiro su mano para que el la tomara y así lo hizo- Vamos a la habitación.

Fernando estaba temblando, su miembro estaba tan erecto como nunca lo estuvo; Arti estaba muy coqueta y juguetona que volvió acunar su rostro para besarlo, frotándose con él, sintiéndolo, ansiándolo. Separándose bruscamente lo empujo a la cama y el cayo sonriéndole pero sus ojos trasmitían una oscuridad, igual como a la noche misma. Su chica rodo la silla del escritorio y tomo asiento.

__ ¿tendrás el mando esta noche?

__ Así es. –guiño su ojo y se dejó caer en el espaldar- desvístete, Fer.

Él lo hizo, bajo sus pantalones sencillos junto con su bóxer dejando a la vista aquella parte de su virilidad expuesta. Martina relamió sus labios y se abanicó, cosa que lo hizo reír.

__ ¿te gusta lo que ves? –pregunto sarcástico-

__ Por supuesto. -Acostándose uno al lado del otro, Martina mordió el lóbulo del oído de Fernando y beso su sien- tócate cariño, tócate para mí –susurro-

El hombre lentamente llevaba su mano hacia su miembro y comenzó a descender y ascender por él. Martina le susurraba cosas al oído y su novio simplemente cerraba sus ojos dejándose llevar por ella, haciendo un poco de fuerza en su agarre.

__ Joder... -murmuro-

La chica se sentía poderosa por poner a su hombre de tal manera, le gustaba verlo excitado, le gustaba verlo perder el control, por eso decidió ponerse un poco indecorosa;

__ Te voy a follar, Fernando –ante esas palabras gruño- Primero comenzare a acariciarte suavemente, trazare cada parte de tu cuerpo, grabándomelas perfectamente en mis dedos, los rasgos de tu rostro, lo fuerte de tu pecho y tus abdominales que me hacen enloquecer –rozo sus labios- después sustituiré mis manos por mi boca y mi lengua, dejando marcas para que recuerdes con veracidad quien había estado junto a ti, descenderé por todo tu torso, teniéndome en ese lugar en el cual jamás he estado y me arrodillare ante ti. –Otro gemido la animo a continuar- instigare mis manos curiosas para atrapar tu rigidez –acaricio su pierna, muy cerca de su miembro- estas húmedo y comenzare a frotarte, de arriba hacia abajo, amor...

Abrió sus ojos, para observarla y besarla, agarro su mano para que lo ayudara en aquella odisea que él solo batallaba, su mirar se dirigió a lo que ella hacía, la cual lo descontrolo en su totalidad, abrió su boca dejando escapar un gemido audible, cerrando sus ojos, suspiró y dejó caer su cabeza hacia atrás, mientras que Arti se acercaba para besarle el cuello y su pecho. Su olor corporal se mezcla en su sentido haciéndola vibrar, dejo un pequeño recorrido desde su clavícula hasta su mandíbula, deponiendo mordiscos por donde pasaba.

__ Martina... -suplico-

__ Shhh, no digas nada cariño, solo déjate llevar.- tomo la mano de su novio y la coloco de nuevo en su miembro para que siguiera con su cometido- Piensa que estoy ante ti, acariciándote completamente hasta poder situar mi boca en aquel lugar que tanto ansiabas, que tanto deseaba. Estas dentro de mí, sintiéndome cálida, sintiéndote fuerte. Inicio con movimientos lentos, para luego subir y bajar por toda tu longitud, joder que si te gusta que lo haga, mi Fer... -sus caricias aumentaban la velocidad- y a mí me gusta complacerte, por eso continuo con mis jugadas, adentrándote más en mí; me gusta tu sabor, me gusta todo de ti.