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_ Mamá, ¿Cómo estás?...

+Hijo, estoy bien pero, ¿que ha sido de ti?, ya no nos vienes a visitar y nos preocupas, ni siquiera una llamada para saber que vives.

_ Que exagerada señora Francisca, su hijo siempre estará bien.

+ Me vuelves a llamar de esa manera y ya verás Fernando Alejandro.

Risas por parte del hombre se hicieron presentes

_ ¿Cómo han estado, mamá?, no me he podido comunicar y mucho menos visitarlos porque Ender y Tomás tuvieron a sus bebes y...

+ ¿Ya nacieron las bebes?, ¡Uyyyyyy! Quiero conocerlas, Fernando, ¿Por qué no me habías comentado nada?

_Si, debí avisarte, me disculpo por eso, pero es que, estaba cuidando esos días al pequeño Ulises.

+ Entiendo, pero aun así, una llamadita no te hubiese quitado ni 5 minutos.

_ Tienes razón, es mi culpa.

+ Claro que lo es, Fernando.

_ Dios, siempre quieres tener la razón.

+ Tu madre siempre la tendrá, aun así, quiero que vengas la próxima semana a casa, tengo que darte una sorpresa.

_ ¿Qué clase de sorpresa?

+ Ya lo veras, y por favor... Trae una acompañante que sea educada y bonita.

_ ¿acompañante?, y eso, ¿para qué?

+ Solo hazlo y vengan bien presentables, si es posible elegantes. Cariño, te espero el viernes a las 18:00H en la Capilla Central.

El hombre todo extrañado, dejo su teléfono en el sofá y siguió durmiendo a la pequeña, hasta que llegaran sus amigos. No obstante, Martina tenía su ceño fruncido y apretada sus puños, el lunes a primera hora ahorcaría a Kike.

__ ¿Cómo se le ocurrió darme un número errado? –Se preguntó- ¡Que idiota!

Pero la presencia de sus hermanos logró captar su atención.

__ ¿Qué te pasa? –Dijo José sentándose a su lado-

__ Nada, simplemente que se está haciendo tarde...

__ Pero si acabamos de llegar, Arti.

__ Junior tiene razón, acabamos de llegar.

__ Llegamos hace unas 3 horas más o menos, pero recuerden que debemos pasar por el gimnasio, además que... El entrenador se ira y no podremos hablar con él.

__ Ahora Arti tiene razón, gemelos.

__ Arti siempre debe tener la razón, todo por ser mujer... -se quejó junior-

__ Ponte una peluca y bórralo –se burló-

__ Idiota, simplemente idiota. –Negó el primer nombrado para luego sonreír- entonces, ¿nos vamos?

__ Es así, pequeño. –Concordó Arti-

Sin más nada que decir, los cuatro se colocaron a recoger las cosas que habían llevado para dirigirse al gimnasio que después de esperar como media hora pudieron hablar con el entrenador, quien se encontraba muy a gusto de volver a ver a Martina, entre diálogos y recuerdos, acepto volverlos a tener en su gimnasio, despidiéndose así de Pablo, regresaron a su hogar, y no faltaba esta vez José para decir...

__ Creo que tengo hambre...

*

El lunes a primera hora, todos se encontraban en clases con el profesor de química avanzada pero la única que faltaba era Martina, "que raro", pensó Fernando, aun así, estaba preocupado. No obstante, Arti estaba bastante ajetreada porque tuvo que ir a llevar a los gemelos a su colegio ya que decidieron quedarse esta semana también con su hermana mayor, Lander se tuvo que ir a trabajar y no tenían quien los llevase, pero como siempre, algo debe salir de improvisto, los gemelos no tuvieron clases así que decidió llevarlos consigo a la universidad.

SEÑORITA [Double S #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora