Capítulo 54. Bajo La Lluvia

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Capítulo 54. Bajo la lluvia:

(...)

Un pitido, dos pitidos

"deje su mensaje en el buzón de voz"

Esto ya me esta volviendo loca.

–No me contesta –dije bloqueando el teléfono.

–A mi tampoco cielo –Franscisca guarda su celular también, ya no tenía caso seguir intentar.

–Llevo dos días sin saber de ella! Mierda! –dije preocupada.

–Estoy segura de que Macarena está bien –Franscisca trató de tranquilizarme.

Pero la idea de que algo le había pasado no dejaba de rondarme en la mente.

Y sí había tenido un accidente?

Sí alguien la habia encontrado sola en la calle y le hizo algo?

Sí le habian robado su celular?

Sí se cayó y pegó en la cabeza?

No dejaba de imaginarme tragedias.

–Sabe que me voy a preocupar, ya es domingo y no tengo ni siquiera un puto mensaje de ella diciéndome que esta bien, sólo quiero saber que esta viva joder –me agarré de la cabeza sin creer lo que pasaba.

–Mira mañana ya es lunes y ella debe ir a la escuela a dar clases, ahí la encuentras y la enfrentas –asintió–. Nos tiene a todas con el corazón en la mano, no entiendo que mierda tiene en la cabeza esa mujer.

–Espero que mañana vaya –resople–. Ya he ido tres veces a su casa y no está.

–¿Les preparo algo de comer? –mamá aparece en la sala–. ¿Que les pasa? ¿Por qué tienen esa cara? Han estado todo el fin de semana así.

–No es nada madre, cosas de la escuela –intente parecer calmada.

–¿Segura? –me preguntó sin creerme.

–Segura –asentí.

–¿Nos les pasa nada entonces? ¿O sí Franscisca? –la miró–. No creo que me mentirías.

–No pasa nada Drew –la llamo por su nombre guiñandole un ojo.

–Okey... Entonces ¿les preparo algo para comer? –volvió a preguntar.

–Yo no tengo hambre mamá, mejor me voy a dormir –tomé mi cartera del sofá–. Así están un rato a solas –las mire a ambas y sonrieron cómplices.

–Entonces sólo comeremos las dos –mamá se encogió de hombros.

–Quiero de ese queso que probé ayer, estaba exquisito –sonrió Francisca.

–Hey –apunte a mi amiga–. Te quiero a 5 metros de la habitación de mamá, ¿me oíste?

–Haré lo posible –susurró tirándome un beso.

Negué con la cabeza y me fui a mi habitación escuchando un dulce "buenas noches" de mamá.

Después de algunas vueltas en la cama me dormí.

A la mañana siguiente desperté temprano, me bañe, vestí y salí de mi habitación. Estaba dispuesta a irme pero vi a Francisca durmiendo en el sofá.

–Hey Francisca –susurre acercándome.

Ella haciendo un quejido abrió los ojos.

–Buenos días –dijo con la voz ronca.

Stay With Me ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora