Te voy a amar ✔️

Capítulo 02

Los latidos de mi corazón se aceleran a niveles estratosféricos. No sé en qué momento mis manos empezaron a temblar. Abro la boca para decir algo pero no sale absolutamente nada de ella. Estoy como en un estado de shock.

A lo largo de los años, he imaginado distintas formas de como podría llegar a conocerlo pero jamás pensé que realmente fuese a suceder.

Mi ojos están fijos en él. No puedo —quiero— apartar la mirada de él. No puedo creer que Lucca Evans esté justo frente a mí. Seguramente estoy en uno de esos tantos sueños que suelo tener con él.

Disimuladamente pellizco mi mano y en definitiva, no estoy soñando porque duele. Entonces, ya estoy muy ebria y estoy empezando a alucinar, pero no puede ser posible porque no he bebido tanto como para estar viendo cosas que no son reales.

Extiende su mano hacia mí y veo que me quiere entregar el celular.

—Disculpa por tropezar contigo, no fue mi intención —lo escucho decir. Su voz en persona es más hermosa de lo que esperaba. Es ronca y profunda. Me dedica una pequeña sonrisa avergonzada.

—No... —los nervios no me dejan hablar pero lo intento de nuevo—, no te preocupes, estaba distraída con el celular —mi voz sale torpe por los nervios.

Estiro mis temblorosas manos hacia él y agarro el celular, sin darme cuenta rozo levemente mis dedos con su mano y siento como una corriente eléctrica recorre todo mi cuerpo.

Definitivamente las fotos y los vídeos no le hacen justicia a como realmente es en persona. Es una de las personas más atractivas y sexy que he visto en mi vida. Ahora entiendo esos comentarios de otras fans que leía; decían que nada como verlo en persona, que era mucho más atractivo, etc.

En mis locos sueños que suelo tener despierta, imaginaba como sería que me dedicara una de sus perfectas sonrisas pero no creía que realmente llegaría a sucederme eso.

También soñaba con verlo desde un angulo cercano a mí pero que ahora lo tenga justo en frente y haber rozado mis dedos con su mano, es un verdadero sueño, pero de esos en los que no te quieres despertar nunca.

—¿Podría tomarme una foto contigo? —me apresuro a decir antes de perder la oportunidad de obtener una foto con él. Su sonrisa se ensancha y siento mis piernas flaquear. Sus hoyuelos aparecen y siento que voy morir en éste mismo instante.

Asiente.

Rápidamente y con manos temblorosas, coloco la cámara de mi celular. Aprovecho la situación y junto mi cuerpo al suyo, eso es algo que quizá no vuelva a ocurrir jamás y no puedo perder la oportunidad de sentirlo cerca de mí.

Después de sacar la foto, me volteo para estar frente a él y lo miro guardando en mi memoria cada parte de él. Esto es algo que jamás se me olvidará en la vida. No sé cuento tiempo pasa, quizá solo unos segundos cuando vuelve a hablar.

—Tengo que irme —dice, y la tristeza embarga todo mi cuerpo. Quisiera decirle que no se vaya pero de mi boca no sale nada. No tendría razones para quedarse a hablar conmigo. Soy una simple fan con la que tropezó por accidente—. Fue un placer haberte conocido.

—Gracias por la foto —murmuro tímida—. El placer es completamente mío —me regala una última sonrisa y desaparece de mi vista.

Las mejillas me duelen por la sonrisa que no ha desaparecido de mi rostro desde el momento en el que lo vi.

Sin terminar de creer lo que acaba de suceder, me encamino devuelta a la mesa con las chicas. Necesito contarles lo que acaba de suceder. No se lo van a creer, es que ni yo me lo creería si alguna de ellas me contara algo parecido.