A la mañana siguiente me despierto para ir trabajar. Alice tiene el café listo como cada mañana. Hace el mejor café que haya probado en la vida por eso ella es la que hace el café ya que a todas nos encanta.
Me levanto de la cama con más pereza de lo normal. Odio despertarme temprano pero prefiero trabajar en el turno de la mañana ya que siento que el día es más largo.
Cada mañana antes de ir al trabajo me doy un baño para quitarme parte de la pereza con la que me despierto y luego el café termina por quitarlo completamente.
En el ascensor me encuentro con la señora Foster, es nuestra vecina. Es una señora de 80 años, vive sola con un perrito. Es una mujer muy amable y cariñosa. La señora Foster suele regalarnos galletas de avena que le quedan de maravilla. Dice que le recordamos a sus nietas que están en Inglaterra estudiando en la Universidad, solo las ve en navidad cuando se reúnen para las fiestas y por eso nos consciente como si fuésemos sus nietas
De camino al trabajo escucho música, hace que me relaje un montón antes de trabajar y mucho más la música de Lucca. Su voz es como escuchar a los mismísimos angeles cantar.
Al llegar a la cafetería me encuentro a John está abriendo el lugar. Es mi jefe y es un buen jefe, nos trata muy bien a todos. Si hay algún tipo de problema siempre lo soluciona de buenas formas, aunque es muy raro que haya alguno ya que todos nos llevamos bien y tenemos tiempo trabajando aquí, así que ya sabemos como son las cosas.
—¡Buen día, John! —digo con entusiasmo.
—Buen día, Elena.
Termina de abrir la cafetería y entramos. Me voy directo a cambiar la ropa que llevo puesta por mi uniforme para luego ocupar mi puesto de trabajo.
Veo entrar en la cafetería a Lottie justo cuando ocupo mi lugar.
—¡Hola!
—Llegas un poquito tarde, Lottie —digo señalando un reloj imaginario en mi muñeca.
—Ya lo sé —responde con la voz cansada, seguro corrió para llegar más rápido. Y va a cambiarse rápido para que Jonh no lo note. Lottie es muy distraída, suele llegar tarde al trabajo pero tiene suerte que siempre que le pasa, John está adentro y no lo nota.
La mañana se me pasa volando y cuando me doy cuenta, ya es hora del almuerzo. Nos dan media hora para almorzar y cuando voy a comer, John ocupa mi lugar.
Aprovecho el rato libre que tengo para comer para llamar a Lucca. Suena y suena pero no contesta, así que no insisto más porque seguramente está ocupado. Termino mi almuerzo y vuelvo a mi puesto.
—Le enseñé a mi mamá el vestido que me compré y le gustó —me comenta Lottie, que está junto a mí ya que no hay nadie en la cafetería.
—Es que está hermoso y te queda muy bien.
La figura de Lottie es muy bonita. Sus pechos son de buen tamaño porque no son pequeños pero tampoco son muy grandes, pasa igual con su trasero. Y su cintura es pequeña. Claramente que alguien con un cuerpo así, cualquier prenda de ropa le quedaría fantástico, eso es algo que no me sucede a mí. No cualquier cosa me queda bien.
—Sí y el color me gustó mucho —dice antes de ver como entran clientes a la cafetería, así que dejamos de hablar.
No volvemos a hablar después de eso porque el lugar de un momento se llena de gente.
Cuando llego al apartamento no hay nadie, las chicas todavía no llegan de sus trabajos. Voy directo al baño a ducharme y luego me visto con ropa de estar en casa.
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Te voy a amar ✔️
RomanceElla siempre soñó con conocerlo, pero nunca imaginó que al hacerlo, sucedería todo eso que se imaginaba por las noches antes de dormir. *** Elena, es una chica común y corriente que vive en Nueva york con sus tres mejores amigas; hay un sueño que co...