Capítulo 11

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No puedo creer que se tomara el tiempo para comprarme un vestido para la cena de mañana. Sé que no sería exactamente él y que probablemente haya enviado a alguien para que lo hiciera por él pero lo que importa es el detalle, uno que definitivamente me encantó, aunque me hace sentir un poco rara porque no quiero que crea que estoy con él por cosas como éstas.

—El vestido está precioso —exclama emocionada Jessie— y ese color te queda hermoso. Que detallista ¿Lucca, no quieres estar conmigo? —dice como si Lucca estuviese aquí.

—¡Oye!, ¡es mío! —exclamo fingiendo molestia pero solamente bromeo.

—¡Pruébatelo! —me exige Marcela.

—Me baño y me lo pruebo —le aviso.

Me baño rápidamente con la emoción de querer probarme el vestido. Tengo que llamarlo y darle las gracias pero también para decirle que no tenía porque hacer eso, yo podía haberme comprado uno si me decía a donde íbamos.

Me coloco el vestido y puesto es mucho más hermoso. Es uno de los vestidos mas hermosos que he visto en mi vida. Es de seda rojo, tiene finos tirantes, el escote es en forma de corazón y me llega a la mitad de los muslos.

Dejo entrar a las chicas a la habitación para que puedan ver como me queda y puedo notar por las expresiones en sus rostros, que les encanta tanto como a mí.

—Te queda espectacular, Elena —murmura Jessie.

—Concuerdo con Jess. Está bello y te queda genial —dice Alice, levantando sus pulgares en señal de aprobación.

—Pienso lo mismo —inquiere Marcela—. Ese vestido tuvo que haber costado bastante, es de seda.

—Sí, ¿verdad? —paso las manos por el vestido mientras me observo en el espejo—. No entiendo porqué me hizo éste regalo.

—Porque le gustas —dice Alice como si fuese obvio.

—Es muy pronto para eso.

—Para eso no hay tiempo, sólo sucede y ya.

Tiene razón pero es que siento que estoy viviendo en un cuento de hadas así que sigo sin creerme lo que me está pasando con Lucca.

Les pido que salgan de la habitación para quitarme el vestido. Aprovecho el momento sola y busco mi celular para llamar a Lucca. Suena pero no contesta.

Voy a la sala con las chicas para ver una película de ciencia ficción que habíamos querido ver hace días. La película va por la mitad cuando siento mi celular vibrar sobre mi estómago. Lo agarro y veo que es Lucca. Me levanto del sofá y camino a la habitación para no molestarlas y tener privacidad.

—Hola —contesto cerrando la puerta de la habitación.

—Hola, Lena.

—Oye, gracias por el vestido pero no tenías porque haberlo hecho, yo podía comprarme uno —menciono sentandome sobre mi cama.

—Lo sé pero quería hacerte un regalo. ¿Te molestó? —pregunta, y puedo notar la preocupación en su voz.

—¡No! —digo rápidamente—. No me molestó, al contrario, me encantó. Es muy lindo el vestido, gracias.

—Me alegra que te haya gustado porque sino igual se podía cambiar por otro si no te gustaba ese.

—Me gusta éste. ¿Qué haces?

—Estoy acostado en la habitación, ¿tú qué haces?

—Estaba viendo una película con las chicas pero me vine a la habitación para hablar contigo.

Te voy a amar ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora