Un mafioso caprichoso.
Un futuro agente de la DEA.
Ella novia de los dos.
¿Qué podría salir mal?
Consciente de que el padecimiento que sufre podría quitarle la vida en menos de un año, el hijo menor de una poderosa familia de mafiosos, hará lo posi...
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Todo se había vuelto tan extraño, fue como si en mi vida se marcara un antes y un después con respecto a Jossie, el veinticuatro de diciembre estuvimos todos en la hacienda, su hermano es muy agradable, tuve una conversación muy interesante con él, Jossie estuvo como avergonzada toda la noche y Eva también, así que mi conversación fue básicamente con Julián.
Intercambiamos regalos, había comprado demasiados y de forma individual, compré una gargantilla de oro para Jossie y ella había comprado para mí un reloj, algo había cambiado, algo ya no estaba en su lugar, entre ella y yo había un mar de distancia y no entendía por qué.
A partir de unos días a la fecha, tengo mucho dolor muscular, demasiados espasmos y las articulaciones rígidas, por ello había recurrido al uso de la cannabis en muchas presentaciones: crema, gel, aceite o en bruto, la dejaba en el agua caliente y después me quedaba ahí dos o tres horas, ayudaba mucho con el dolor y qué les digo de un porro, en lo personal no soy fan de la marihuana ni de la cocaína o heroína, pero ahora no lo hago por hobbie, es totalmente necesario para poder moverme sin parecer un abuelo de ochenta años. Cómo ya se habrán dado cuenta, Polo y Josué no están, los dejé ir a su pueblo y he estado solo merodeando las calles sin ningún problema, supongo que nadie da por hecho que saldría solo después de todo el poder que tengo en la boca, justo caminaba por el centro de la ciudad cuando Jossie me interceptó.
—José Manuel.
—¿Qué pasó mija?
—Dudé por un momento que fueras tú.
—¿Por qué lo dice? ¿Me veo diferente con ropa o que chingaos?
—Muy gracioso, lo digo porque estás solo.
—No lo diga así, se escucha feo.
—José Manuel, yo...
—Ah ya, ya le puso seriedad a la cosa, no es divertido.
—José Manuel quiero hablar de lo que pasó hace unos días entre tú y yo.
—¿De qué quiere hablar? Lo hecho, hecho está mija.
—Solo quiero que quede claro que yo estaba muy enojada ése día y que no volverá a pasar, es más si puedes hacer como que no ocurrió, mucho mejor.
—A ver mija, me resulta imposible creer que me está pidiendo eso cuando ya la vi como Diosito la mandó al mundo —me acerqué un poco—, no es algo que me pueda sacar de la cabeza así nomás, usted y yo cruzamos la línea del no retorno, Jossie, solo sea responsable y ya, no puedo dejarlo pasar porque es algo con lo que estuve soñando desde que la vi por primera vez.
—Solo déjalo ahí y ya.
—Claro que no, lo he revivido una y otra vez, es así como vivo ahora, usted le cambió el propósito a mi vida, Jossie, solo sea responsable de eso y se acabó, usted vino a mencionarlo, yo no lo hice porque es algo suyo y mío, no lo voy a publicar en Facebook ni en Twitter, es algo de usted y mío y no puede pedirme que lo destruya porque pa' empezar regios no se puede oiga, puede quedar en una noche de pasión desenfrenada o se puede convertir en algo más grande, porque podrá decir lo que sea, pero no creo que pueda decir que no le gustó.
