Nuestro Amor

43- El deseo de un adulto nuevo.

Stephen:

A penas y soy capaz de mantenerme de pie cuando Scott, Mary, Carol y Elijah se tiran sobre mí en un abrazo grupal que casi se siente como ser aplastado... pero con mucho amor. Me rodean para dar brincos entre risas y ponerme un gorrito puntiagudo de cumpleaños que llama la atención de todos -o al menos la de la gran mayoría- de los estudiantes que vinieron a tener una comida pacifica en la cafetería de la universidad y yo no puedo hacer nada más que reír y sentirme avergonzado y agradecido al mismo tiempo por tener esta clase de amigos.

-Aun no es mi cumpleaños, ¿qué están haciendo? -me río, ajustando la tira del gorrito para que quede detrás de mis orejas en vez de a mitad de mis mejillas.

Todo porque no quiero que me haga lucir "cachetón", como todos me han estado llamando últimamente porque -gracias a mi estado de felicidad en mi relación con Aaron y por el hecho de que habíamos estado comiendo comida no tan casera porque él ha estado demasiado ocupado con su trabajo como para cocinar- me había estado convirtiendo en la viva imagen de "lleno de amor".

Desde que me dí cuenta de ello he estado comiendo tan saludable como puedo y haciendo algo de ejercicio, pero es increíble lo muy difícil que es bajar de peso y lo muy fácil que es ganarlo.

-¿Qué importa si aun no es tu cumpleaños? -repone Mary con una sonrisa enorme al mismo tiempo que da pequeños aplausos de emoción- El bebé en nuestro grupo al fin será legal, ¡un adulto nuevo! ¡eso hay que celebrarlo por más de un día!

-¡Exacto! -concuerda Scott- ¿Y cuál es la mejor manera de celebrar a alguien que al fin va a ser legal? 

Ni si quiera tienen que decírmelo para que sepa la respuesta. Hacía meses que estaban hablando de mi cumpleaños y de como no querían que hiciera planes para celebrar mi mayoría de edad sólo con Aaron porque llevaban tiempo preparándose para celebrarlo todos juntos de una manera que fuera -según ellos- inolvidable.

Y estaba feliz por ello ya que su enorme emoción sobre mi cumpleaños 21 es realmente contagiosa y divertida. Sin embargo, no puedo evitar tener mis dudas sobre el tipo de celebración que están planeando y no porque no tenga ganas de celebrarlo todos juntos, sino  porque sé que lo que tienen en mente para que sea una "celebración inolvidable" no es otra cosa que...

-¡Alcohol! -exclaman al unísono.

-Iremos a un bar y luego a un club, bailaremos, cantaremos, beberemos, reiremos, ¡será increíble! -dice Carol completamente emocionada, casi como si estuviera rapeando al ritmo de alguna canción que desconozco- ¡Verás de lo que te has estado perdiendo hasta ahora!

-Okay -río, dejándome llevar por ellos y olvidándome de cualquier duda o inquietud que mi mal hábito de imaginar el peor escenario posible pudiera traer a mi cabeza para hacer que me acobarde de haber aceptado tomar y usar mi identificación por primera vez.

Me divierto hablando con ellos de sus experiencias en cuanto se trata de alcohol hasta el momento en el que mi teléfono comienza a vibrar en el bolsillo trasero de mi pantalón. Lo tomo con la idea de que posiblemente sea la alarma que puse en la mañana para que me recuerde ir a buscar a Aaron a su trabajo y cuando me doy cuenta que he acertado comienzo a guardar mis cosas de vuelta a mi mochila.

-¿Te vas? -pregunta Elijah, interrumpiendo la conversación y centrando la atención de los demás en mi.

Asiento con la cabeza y busco las llaves del auto de Aaron en mi mochila antes de cerrarla y levantarme.

-Aaron ya va a salir de trabajar y yo tengo sus llaves del auto así que... -les sonrío a modo de despedida y disculpa también porque ellos no se retienen de soltar un pequeño abucheo que deja a relucir que querían que me quedara un rato más.