Encubierta

CAPÍTULO 21

“Sólo personas dulces”

Siento como una mano recorre la longitud de mi brazo, me comienzo a remover en mi lugar a la vez que frunzo el ceño.

Los recuerdos de esta tarde inundan mi cabeza, en especial el recuerdo de Devon tocando mi cuerpo.

Tiemblo en mi lugar, comienzo a removerme intentado que esas manos se aparten de mí lo más rápido posible.

—¡Déjame, quítate! —grito al sentir que las manos no se apartan.—

—Hey Evy soy yo—al escuchar el mote dejo de moverme.

Intento abrir los ojos pero una luz cegadora no me lo permite, vuelvo a intentar al cabo de unos segundos, espero que mis ojos se acostumbren a la luz antes de dirigir mi mirada hacia Asher que se encuentra sentado junto a mí.

Miro a mi alrededor.

Estoy acostada en una camilla, mi ropa fue sustituida por una bata él cuarto en donde estoy es bastante espacioso sus paredes son blancas, además llevo una intravenosa en mi brazo izquierdo .

—Estás en el hospital.—me enfoco nuevamente en Asher.—Te trajimos aquí, es un infierno allá fuera Evy—se restriega las manos en el rostro.

—Todo... Todo el mundo ya lo sabe.—siento como mi garganta arde al hablar inclusive mi voz casi es imperceptible.

—Los guardias sacaron a Devon por la puerta principal, ese fue el primer escándalo pero todo empeoró cuando Lander y yo te tuvimos que sacar, no podíamos esperar a que nos dieran acceso a una puerta secundaria, te habías desmayado y no respondías, lo siento mucho Evy pero todos te vieron.—Se disculpa.

Mi pecho se presiona, no voy a llorar ya no más, no voy ha solucionar nada llorando.

—Ellos saben lo que pasó específicamente.—no sigo hablando al sentir nuevamente el dolor en mis cuerdas vocales.

Mi rostro y labio los siento hinchados a las vez que mis muñecas están con las horribles marcas de sus manos en ella.

—Los guardias no tuvieron filtro y dijeron todo lo que vieron Evy.—se acomoda.

Solo asiento, me quedo mirando fijamente la puerta.

—Qué pasó con el desfile.—no puedo evitar preguntar.

—Se aplazó para dentro de dos meses.—

No puedo evitar sorprenderme, no en dos ni tres semana si no dos meses.

—Hay un agente afuera que quiere tomar tu testimonio de los hechos, nuestro abogado también está aquí ya.—Asher toma una de mis manos y la acaricia.

—Llamaste a mamá y papá.—veo como se tensa pero no deja de acariciar mis manos.  

Baja su mirada.

—Tenía que hacerlo, estarán aquí en pocos minutos.—

No digo nada más, recuesto mi cabeza en la almohada y vuelvo a cerrar los ojos.

Escucho como la puerta se abre pero no le presto mucha atención.

La parte en donde estaba sentado Asher se deja de hundir por unos segundos antes de volver a sentir su peso.

—Los chicos están aquí.—me sobre salto al escuchar la voz de Lander.

Abro rápidamente los ojos topándome con los suyos, él se encuentra en el lugar donde estaba anteriormente sentado Ash.

—Qué chicos.—frunzo el ceño confundida.

—Pues quienes más van a ser joyita nuestros amigos —rueda los ojos divertido.