Encubierta

CAPÍTULO 40

"Hospital"

La muerte

¿Para mi que es la muerte?, en mis pensamientos siempre habita esa pregunta, muchas veces trato de no pensar en ella pero se me hace inevitable no hacerlo, el miedo paralizante de solo pensar en ya no estar en este mundo hace que mi respiración se pare y que mi pecho duela, como todo ser humano el miedo a lo desconocido está presente.

Pero algo que si sé de la muerte, es que los seres queridos que se van te dejan un vacío enorme en el corazón, es como si te arrancaran un poco de tu alma, el simple hecho de saber que esa persona ya no estará físicamente te encoje el corazón, en mis pocos años de vida solo vi a mi abuelo irse y fue una de las cosas más dolorosas, él fue un hombre que siempre estuvo para mi y que se fuera me hizo extrañarlo cada segundo.

En estos momentos no tengo ni idea de que hacer, mi corazón late desbocado por la idea de que el señor Jones ni Kenneth ganen la batalla, acabamos de llegar al hospital, cuando entramos por la sala de urgencias nos acercamos rápidamente al mostrador, una señora de la tercera edad se encuentra tras el mostrador, mirando atentamente el computador, afianzo mi agarre a la Lander.

-Buenas noches- es Anne quien se dirige a la señora- Recibí una llamada informándome que mi esposo e hijo tuvieron un accidente y fueron trasladado a este hospital- Noto como sus manos tiemblan.

-Buenas noches, me podría decir los nombres por favor- sonríe amable.

- Federico Jones y Kenneth Jones- habla rápidamente Dante.

La señora Margareth- leí su nombre bordado en su uniforme - desvía su mirada hacia su monitor situado a su derecha, sus dedos escriben rápido en el teclado y su vista está fija en la pantalla, mi corazón se acelera a mil cuando noto un gesto en sus labios.

-Kenneth Jones fue internado hace una hora y se encuentra en cirugía de emergencia, y Federico Jones... esa información no me corresponde señora, el doctor Keller  se encargará de informarle- Margareth señala hacia una de las puertas de donde sale un doctor que no me paro a analizar porque toda la familia nos dirigimos a él.

-¿Como está mi esposo Federico?- pregunta Anne apenas nos situamos al frente del doctor, en su bata puedo leer su apellido "Keller"

El doctor Keller nos mira un tanto confundido pero reacciona rápidamente, él se inclina un poco hacia la enfermera a su lado y le susurra algo, la enfermera solo asiente y se va hacia alguna habitación, en pocos minutos ella se acerca con una carpeta en sus manos y se la entrega al doctor, mi corazón no hace más que latir fuertemente, en mi frente hay un poco de sudor al igual que en mis manos, Lander a mi lado no deja de moverse y al igual que yo su mano está sudada.

-El señor Federico Jones fue traído hace una hora y veintiocho minutos, cuando llegó al hospital no presentaba signos vitales- mi corazón deja de latir- sufrió de quemaduras nivel cuatro, una pierna rota y mucha perdida de sangre- sigue leyendo el expediente- Se intentó reanimarlo por más de cinco minutos pero no hubo respuesta alguna, hora de la muerte ocho y siete de la noche- un grito desgarrador se escucha por todo el pasillo, lagrimas silenciosas salen de mis ojos.

-Usted está mintiendo- Fanny se acerca molesta al doctor-¡Usted está mintiendo! ¡Mi padre no puede estar muerto!- grita desesperada, uno de sus dedos está en el pecho del doctor, grandes lagrimas de dolor bajan por su rostro sonrojado.

Dante se acerca a su hermana rápidamente y la abraza, su rostro está descompuesto.

Un gran escandalo se forma cuando todos los hermanos del señor Jones se acercan desesperados al oír los gritos de Fanny, Anne los llamó cuando estábamos en camino y les informó lo que estaba pasando.