“¿Él te hizo algo?”
Describiría a la familia de Lander con tres simples palabras; divertida, ruidosa y unida. Por lo que he podido observar en estos pocos días, ellos son todo risas y unas cuantas peleas tontas, por ejemplo la pequeña pelea que hubo entre Fanny y Kenneth por el control remoto de la tele, y también está aquella vez que pelearon por quien se comió la ultima rebanada de pizza.
Pero no pude evitar hacer comparaciones, su familia es muy distinta a la mía en muchos sentidos, mientras que su familia es grande y ruidosa, la mía es más tranquila y pequeña, la relación de padre he hijo es muy distinta, mi hermano aún no quiere perdonar a nuestros padres y he sabido muy poco de el en estos días, en cambio la familia de Lander las disculpas son automáticas y las peleas no duran más de dos horas, y ya se que no está bien hacer comparaciones pero se me hizo casi imposible no hacerlo.
En estos días Lander me llevó a conocer el lugar, en especial me llevo al pequeño hotel que tiene su familia. El hotel es manejado por toda su familia, se puede decir que es un negocio totalmente familiar, manejado y guiado por sus abuelos y tíos.
La verdad no se como describirles el lugar, es un hotel de no más de siete pisos, el hotel está decorado en azul rey y blanco, para tener un ambiente tan familiar y acogedor es bastante modernos, como estamos en mes de vacaciones el lugar está bastante lleno, familias de todo tipo y tamaños se encuentran hospedados en el lugar. El restaurante y la piscina a mi parecer son lo mejor, en la mañana Lander me llevó al restaurante, el olor a café y tostadas me inundó, todo olía y sabía tan bien, que estaba por quedarme ahí todo el día, pero como Lander insistía en enseñarme el resto del hotel, tuve que resistirme a la idea de quedarme ahí.
Tomo un gran suspiro al sentarme en los muebles que están en recepción, este chico me ha hecho recorrer cada sitio que hay aquí, incluso me llevó al pequeño gimnasio que tienen en la planta de arriba.
-Este lugar es más grande de lo que aparenta ser- Suspiro cansada.
Noto como se encoge de hombros restándole importancia.
-Hace algunos años hicieron remodelaciones-
Asiento con la cabeza.
-De eso estoy más que segura-
Lander se sienta a mi lado, siento como toma mi mano y une nuestros dedos en un pequeño apretón, inclina un poco su cabeza y me deja un beso en la comisura de los labios, me quejo cuando lo siento alejarse, antes de que se aleje del todo lo tomo por el cuello de su camiseta y lo acerco a mi, inicio un nuevo beso pero este es más profundo y lento, sus labios son suaves y dulces contra los míos, cuando abro un poco mi boca para tomar aire él lo aprovecha para introducir su lengua y volver el beso más húmedo, siento mi piel erizarse cuando su legua rosa la mía, Santa Virgen de los besos, esto me está volviendo gelatina.
Nos separamos por falta de aire.
-Si me vas a besar, lo tienes que hacer bien-Le guiño un ojo.
Ríe divertido, nos alejamos unos cuantos centímetros, su mira inspecciona mi rostro antes de llevar una de sus manos a mi mejilla y acariciarla, me inclino hacia su tacto y inconscientemente cierro los ojos para disfrutar de su toque.
-Lo tendré en cuenta Joyita- sonríe para después darme un pequeño beso y alejarse de mi.-Mañana es noche buena- se acomoda
-Y también es tu cumpleaños- le recuerdo.
-Sí, mamá anda como loca organizando todo, como siempre pasamos noche buena en el salón principal del hotel y también celebramos mi cumpleaños ahí, se la pasa todo el día dando ordenes a mis tíos y obligando a papá a ayudarla- se ríe un poco mientras niega.
Y de eso estoy más que segura, yo me ofrecí a ayudarla pero ella declinó, su escusa fue que mantuviera a Lander el mayor tiempo posible distraído, al parecer le tenía alguna sorpresa, o simplemente no quería escuchar las quejas de su hijo, me inclino más por la segunda opción.
Y sobre la mención del padre de Lander no puedo evitar pensar nuestra convivencia del otro día.
En un principio su padre fue muy reservado conmigo, solo decía pocas palabras de cortesía y nada más, en algún momento llegué a pensar que me detestaba, pero en realidad me di cuenta que es una persona bastante tímida, días atrás lo ayudé con un pequeño huerto que tiene en el patio de su casa, conversamos de todo un poco, como Lander y sus hermanos estaban ayudando a su madre con las compras, yo me ofrecí para ayudar a Federico -Padre de Lander- con el huerto de vegetales y demás, al inicio todo era un poco incomodo pero después la conversación surgió y todo se volvió más llevadero, Federico Jones es un gran hombre y padre de familia, poco a poco me fui dando cuenta de su personalidad y su sabiduría, después de haberlo ayudado todo se volvió más cómodo a nuestro al rededor.
Me distraigo de mis pensamientos cuando siento un flash.
Desvío mi mirada hacia las puertas del hotel, una cantidad considerable de paparazi se encuentran detrás de las puertas de cristal, los dos guardias de seguridad de la entrada evitan que entren al hotel.
-Ya nos encontraron- desvía su mirada divertido hacia la puerta.
-Claro que lo hicieron, es su trabajo después de todo - concedo divertida.
En mi opinión se tardaron bastante en encontrarnos, después de que las fotos de Lander y mías estuvieran por todo internet, todo se volvió un caos, como Lander no forma parte del mundo de las cámaras ni nada por el estilo, se les hizo más difícil reconocerlo, hasta hoy que una revista logró localizarlo y decir hasta en donde trabajan sus padres.
El artículo en si decía algo como esto;
"Hace algunos días atrás pudimos apreciar imágenes de la modelo Italiana junto con un joven de su misma edad, debemos de recordar que a Olivia de Luca no la vemos con nadie desde hace varios años atrás, pero al parecer el amor llegó a su vida junto a la imagen de un apuesto chico, al cual se le a visto recientemente junto a la modelo en el aeropuerto de Londres. Todos se preguntaran ¿Quien es ese chico?, pues aquí tenemos la exclusiva. Su nombre es Lander Jones, su familia posee un hotel en la ciudad de Siracusa, tiene tres hermanos, Dante Jones, Kenneth Jones y Fanny Jones y sus padres son Anne Jones y Federico Jones, ¡Si que es grande esta familia!, no sabemos con certeza desde cuando está saliendo con Olivia, pero la modelo en estos últimos días nos a mostrados unas lindas fotos a través de sus historias de instagram"
El articulo seguía pero la verdad no recuerdo con exactitud que era lo que decía.
-Será mejor que salgamos de aquí-Me puse de pie.
-¿Y a donde se supone que iremos?, aún es temprano y lo más seguro es que mamá todavía no haya terminado- mira la hora en su celular.
-Quiero ir al centro comercial, necesito hacer algunas compras- me encojo de hombros y me encamino al elevador, si queremos salir de aquí no lo podemos hacer desde la puerta principal, así que saldremos desde el estacionamiento subterráneo.
No tengo que decirle que me siga porque inmediatamente lo hace, presiono el botón del elevador y gracias a Dios no tenemos que esperar mucho, al estar ya adentro se cierran las puerta frente a nosotros, presiono el botón del estacionamiento y la caja metálica comienza a bajar.
-¿Tienes las llaves del auto?- Creo que debía de preguntar eso antes de subirnos al elevador.
-Sí, Matteo me las dio antes de irse a ayudar a mamá con todo-
Solo asiento con la cabeza.
Cuando salimos del elevador Lander comienza a presionar la alarma del auto para poder localizarlo, cuando lo encontramos subimos.
-¿Me ayudarías a elegir los regalos de tus hermanos y de tus papás?- Le pregunto mientras me abrocho el cinturón de seguridad, veo como el abrocha el suyo y procede a encender el auto.
-No es necesario que les compres algo- niega.
-Pues yo les quiero comprar algo, mañana es Navidad y a todos les gusta recibir regalos, además que me encanta comprarlos.— me encojo de hombros restándole importancia.
Les quiero regalar algo a su familia porque me han tratado muy bien, además que me recibieron en su casa y me brindan las tres comidas del día, lo menos que puedo hacer es darles un regalo de agradecimiento.
Cuando salimos del estacionamiento desvío mi mirada hacia la entrada del hotel, creo que estás personas se multiplicaron, muchos de ellos intentan ingresar a la fuerza pero los dos guardias se mantienen firmes en su lugar evitando el paso, los pierdo de vista cuando el auto se comienza a alejar.
—Hace unos días se me vino a la mente una pregunta.—Poso mi mirada en Lander, el mantiene su vista fija en la carretera y sus dos manos en el volante.—¿Porqué no tienes guarda espaldas? ¿No crees que sería mejor que siempre llevaras uno contigo? — desvía un segundo su vista hacia mi pero la vuelve a posar en el camino— sé que eres fuerte y te puedes defender, pero no te vendría mal alguien que te cuide las espaldas.—me sonríe.
—Antes tenía uno, su nombre es Harold, pero como ingresé al internado él no podía venir conmigo, ya sabes, sería muy difícil pasar desapercibida con un hombre de casi dos metros caminando detrás de mí—me encojo de hombros— tal vez lo llame después de las fiestas y también podría contratar a tres más, además ahora tu familia está vinculada conmigo, ustedes también necesitan protección.
Lander frunce su ceño pero asiente en acuerdo, hace algunas maniobras para poder estacionar el auto en un buen lugar, nos quitamos el cinturón de seguridad y bajamos del auto, Lander se acerca y toma mi mano entre las suyas, aseguro mi bolso.
—Después de que todos estemos bien y a salvo, no me importaría tener a tres hombres siguiéndonos.—me sonríe.
—Pues después de las fiestas tendrás a esos tres hombres siguiéndonos, pero le diré a Armando que se haga cargo de eso.—lo último lo digo más para mí que para él.
Lander solo vuelve a asentir y me besa la frente.
En el centro comercial no hay muchas personas, algo que es un tanto extraño ya que usualmente las personas suelen hacer sus compras navideñas en el último momento, y me incluyo, aquí me encuentro buscando cinco regalos para la familia de mi novio, por suerte los regalos de mis padres y hermano ya están listos, los mandé ayer por correo solo espero que lleguen a tiempo, y los regalos de Lander también están listos, porque si son varios, dos son de cumpleaños y el otro es de navidad.
—¿Que le puedo comprar a tu hermana?—pregunto mientras me detengo frente a una vitrina en donde muestran una linda pulsera con varios dijes.— ¿Crees que le gusten los accesorios? —digo viendo un par de aretes que me llamaron la atención.
—¿Que si le gustan? Pff—hace un gesto con su mano— una vez ahorró su mesada de cuatro meses para comprarse un juego de collares y pulseras.— se ríe ante el recuerdo.
—¿Y si le doy esa pulsera junto a esos aretes? —señalo las dos prendas que estuve ojeando anteriormente.
Lander baja su mirada y analiza las joyas.
—Te aseguro que si le das esa pulsera se volverá loca, y junto a esas argollas ella enloquecería— coloca su otra mano en su cintura y se inclina para ver mejor.
Río cuando lo veo en esa posición.
—Bueno, entonces serán esos—tomados de la mano entramos a la pequeña joyería.
Una chica de pequeña estatura se acerca a nosotros cuando nos ve entrar, una sonrisa se planta en sus labio.
—Buenas tardes, bienvenidos ¿En que los puedo ayudar? —pregunta sin borrar su sonrisa.
—Quisiera comprar la pulsera de dijes y las argollas que se encuentran en la vitrina— señalo.
—¡Claro con gusto!—habla entusiasmada.
La chica se dirige rápidamente a la vitrina que le señalé, alzo una ceja sorprendida, esta chica o siempre es efusiva con sus clientes o tal vez esa sea su personalidad, aunque me calló bastante bien.
—¿Son estos cierto? —volteo cuando la escucho preguntar.
Asiento con la cabeza cuando noto las dos prendas en sus manos.
—Sí, esas son.— le doy una sonrisa de boca cerrada.
—¿Los quisieras para regalo o en una bolsa? —se encamina hacia la caja, supongo que para cobrarme.
—En una caja de regalo estaría bien.— jalo un poco del brazo de Lander para que comience a caminar, su vista estaba perdida en una de las vitrinas.
Bajé la mirada para saber qué era lo que estaba observando. En la vitrina habían varios collares y anillos pero no sabría decir cuál de los dos estaba ojeando.
Me volteo cuando la chica comienza a cobrar mi compra, cuando noto el precio en el marcador y la chica está a punto de decir el monto le hago una señal para que guarde silencio, si Lander llega a saber cuanto constaron estas prendas no me dejará comprarlas, comienzo a buscar mi tarjeta lo más rápido posible y se la tiendo a la chica, ella me pasa el datafono para que ingrese mi clave y la compra sea completada.
—Aquí está la factura y en unos momentos le pasaré los productos.—me tiende el papel con una sonrisa amable y se aleja para envolver el regalo.
Observo a Lander para saber si notó algo pero el sigue viendo las vitrina de los collares y anillos, decido no decir nada, si le pregunto que está haciendo lo más seguro es que después me pregunté en cuanto salió el regalo, así que prefiero que no se ponga en sus planes de chico orgulloso.
Cuando la chica me entrega el regalo en una bolsa le doy las gracias por todo y debo de volver a jalar a Lander para que comience a caminar, él reacciona rápidamente y se despide de la chica.
El resto de la tarde Lander me ayuda a elegir los otros regalos, se puede decir que recorrimos todo el centro comercial, desde la tienda de música en donde le compré un violín personalizado a Kenneth, también fuimos a una tienda de botánica en donde estaban vendiendo unas semillas de flores las cuales según Lander su padre llevaba buscando toda una eternidad y que sería un regalo perfecto, después fuimos a una tienda de electrodomésticos en donde le compré una linda batidora color lila a su madre, a la cual le gusta hacer muchos tipos de postres, a Dante le compré libros, en total fueron cuatro libros que forman parte de una saga, y en el proceso no pude evitar comprarle algo a Matteo ya que él a sido bastante amable y divertido a mi alrededor, por lo que regresamos a la joyería por un llavero personalizado el cual consiste en un pequeño auto de formula 1 y en la parte de atrás tiene su nombre tallado.
Y pues ahora nos encontramos en el área de comida tomando algo de comer, bueno en realidad solo estoy yo aquí sentada esperando que Lander regrese del baño, le doy la última mordida a mi hamburguesa y me apresuro a tomar mi celular cuando lo siento sonar y vibrar en la mesa, junto con el celular tomo una servilleta y me limpio las manos.
Descuelgo la llamada cuando leo el nombre de Kloe en el identificador.
—¡Hola Kloe! ¿Como estás? —contesto emocionada.
Borro mi sonrisa cuando escucho un sollozo.
—Oye ¿estás bien? ¿Qué sucedió? —pregunto preocupada.
Veo como Lander viene regresando del baño, su ceño se frunce cuando nota me expresión de preocupación.
—¿Tienes el número de Tristan Ross? — su voz se entrecorta un poco.
—¿Él te hizo algo?—pregunto comenzando a enojarme.
Si Tristan se atrevió a hacerle algo malo, juro que lo voy a castrar.
—No—suspiro aliviada— bueno en realidad sí— se escucha otro sollozo y yo me tenso. —
—Dios cuando lo vea lo voy a matar— me llevo una mano a la frente frustrada.
Cuando Lander llega a la mesa y se sienta al frente de mí, su ceño está aún fruncido y sus ojos tienen una visible interrogante, modulo con mis labios el nombre de Tristan y el asiente comprendiendo, como si el ya supiera de qué es lo que hablo.
—Sí, él me hizo algo— su voz se escucha más tranquila.
—¿Y que te hizo? — me muerdo una uña nerviosa.
—Él me dejó muy embarazada— y los sollozos vuelven.
Jadeo sorprendida llamando la atención de Lander.
—¡¿Estás embarazada?! — digo sorprendida.
Lander salta en su asiento y me mira sorprendido, me hace una señal con sus manos queriendo saber con quien estoy hablando.
Si será chismoso.
—¡Sí! Y tengo que recurrir a ti porque ni siquiera tengo el número del futuro padre de mi hijo— se vuelven a escuchar sollozos.
O Dios mío, estoy en esos momentos en los que no se qué decir, esta noticia me ha tomado por sorpresa.
—Kloe tranquila— intento que se tranquilice, Lander alza una ceja sorprendido cuando escucha el nombre.
Este chico no puede ser más chismoso, en su momento me hubiera reído pero tengo a una amiga detrás de la línea llorando porque será madre y ni siquiera tiene el número del progenitor de su bebé.
—Kloe necesito que te tranquilices y me escuches.— llamo su atención— no te puedo asegurar que todo va a estar bien, pero te voy a apoyar en todo, aunque en estos momentos no estoy en Londres tú cuentas conmigo, necesito que te tranquilices porque eso le puede hacer daño al bebé, esto es lo que vamos a hacer—tomo un gran suspiro— te pasaré la dirección y número de Tristan por mensaje, tú decidirás por cual medio se lo dirás, y si él no te va a apoyar— trago grueso cuando digo las últimas palabras, Tristan es mi amigo, sé que él no es un cobarde, solo espero que no decepcione a Kloe y a este bebé en camino— tú cumpliste con decírselo y no llevarás con el peso de no haberle dicho.
La línea se queda en silencio cuando termino de hablar, Lander me sonríe y asiente, estando de acuerdo conmigo supongo.
—Eso haré, le voy a decir sobre nuestro bebé, ya él si quiere formar parte de su vida— su voz se escucha más decidida lo cual me hace sonreír—pero sabes, voy a tener fe en Tristan, no se por qué pero le tengo fe—la escucho suspirar.
Sonrío.
—Yo también le tengo fe amiga, pero ya sabes cualquier cosa estoy aquí para ti—le recuerdo— y cuando nazca ese bebé yo podría ser la madrina.—bromeo.
Cuando la escucho reír me relajo.
—Claro que serás la madrina—suspiró —pero bueno te tengo que dejar, debo de hacer una sesión.
—De acuerdo, cualquier cosa me llamas, y en unos minutos te mandaré la dirección y el número de Tritan— Kloe solo hace un sonido en acuerdo y se despide una última vez para después finalizar la llamada.
—Tristan va a ser padre—me llevo una mano a la frente.
—Eso fue lo que pude escuchar— sonríe.
—Claro si eres todo un chismoso—lo molesto.
El abre su boca y lleva una de sus manos a su pecho fingiendo estar ofendido.
—Yo solo me estoy informando.—se defiende.
Suelto una carcajada divertida.
—Claro, siempre hay que estar bien informado — me burlo.
El solo asiente y me sonríe.
Tomo un suspiro, solo espero que esto salga bien para Kloe, en el poco tiempo que llevo conociéndola le he tomado mucho cariño, no quiero que salga lastimada de esto, y mucho menos quiero que el motivo de su tristeza sea por una de las personas que más aprecio, no podría volver a ver a los ojos a Tristan si tomara una mala decisión.~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~
HOLIWIISS, estoy muy emocionada porque ayer estuvimos en el puesto número 2 en chick-lit y eso me tiene muy contenta.
Y bueno les tengo una buena noticia, en mi perfil van a encontrar la nueva historia que estoy escribiendo, ya saben Mi Fe en Tristan, por ahora solo estará la sinopsis y el Prólogo pero espero que les vaya a gustar.
NO OLVIDEN VOTAR ✨🥳
~VMBM✨🧚🏻♀️
ESTÁS LEYENDO
Encubierta
Novela Juvenil||Completa|| En edición ⚠️ ||Todos los capítulos disponibles|| Olivia De Luca, una hermosa modelo, actriz y aficionada a la fotografía. Nacida y criada en Italia. Sin tener un solo amigo en su vida, se replantea si vale la pena tener millones de se...