Lo que me faltaba

Luna

Advertencia: Les vengo a recordar   n u e v a m e n t e   que esta es una historia que contiene versatilidad, así que téngalo en cuenta antes de proceder a leer esto. Disfrutad de la lectura.

Haces la oscuridad mucho más brillante.

¿En verdad te conoces? ¿Sabes lo hermosa que es tu alma?

Me moveré a tu alrededor, estaré a tu lado

Tu luz seré, todo por ti.

Fueron despertados por los rayos del sol y cómo no, un punzante dolor de espalda, el primero en despertar fue el moreno, un poco desorientado acerca de dónde se hallaba, sin embargo, al notar el peso en su hombro y observar a Tweek que todavía dormía apaciblemente le hizo orientarse y llenarse de una calidez intensa; una sonrisa de oreja a oreja cruzo por su rostro.

Oh dios mío, lo había hecho.

Su rostro simplemente enrojeció de recordar la noche anterior, como una colegiala, justo así se sentía Craig, eso le provocó una sonrisa pues en su etapa colegial su enfermedad no le había dejado experimentar ninguna de esas cosas, así que decidió que estaba bien. No obstante, aquel dolor de espalda volvió haciéndole recordar que debían marcharse, con delicadeza movió al rubio, sus ojos se abrieron lentamente mirando a Craig antes de romper su seriedad con una sonrisa brillante.

—Hola— dijo, tratando de aguantar sus ganas de reír.

—Hola— resopló Craig divertido.

—¿Soy el único que no aguanta la espalda?

Craig se carcajeó y negó.

—No, no lo eres— admitió, para luego intentar incorporarse y estirarse, aunque sea un poco—. Creo que deberíamos irnos, está noche tienes tu presentación.

—Oh, Jesús es cierto— exclamó Tweek incorporándose y pasándose el cabello para atrás, en un gesto que, a vista de Craig, era totalmente atractivo—. Sé que ha pasado mucho tiempo y que eventualmente tenía que pasar, pero ¡Hombre! se siente todo tan rápido, no puedo creer que sea hoy.

Craig acarició su espalda amorosamente.

—Definitivamente, he estado tachando los días en mi calendario esperando este día, por fin veré a mi fabuloso novio en el escenario— Tweek desvió la mirada claramente cohibido por el tono de dulzura que uso el moreno— ¿Tweek?

—Necesito una ducha, me siento... pegajoso— admitió tratando de no reírse por la situación.

—Podríamos ir al motel de aquella vez y pedir unas pocas horas para ducharnos— sugirió el moreno, Tweek asintió ferozmente—. Creo que primero debemos vestirnos.

—Sí, lo creo también.

Hicieron a lo mucho media hora antes de llegar al motel, y esta vez las habitaciones no fueron separadas, Craig se preguntó por un momento si el recepcionista los reconocería, si lo hiciera, no diría nada, sólo mencionó algo acerca de un kit por una suma más, el moreno pensó de inmediato en uno de limpieza así que aceptó.

No perdieron mucho tiempo antes de llegar a la habitación y comenzara a abrir la ducha para que el agua se fuese calentando. El moreno comenzó a desvestirse mientras trataba de regular la temperatura de la ducha.

—¿Tweek puedes ver si nos dejaron acondicionador? —pidió, Tweek asintió, después de un par de segundos escuchó carcajadas, bastante extraño si le preguntabas al moreno— ¿Qué pasa?

—Es un kit que viene con todo— trató de explicar el rubio apartando la risa, falló— ya sabes, jabón, champú, condenes, acondicionador, lubricante...