CAPITULO 19

836 51 6
                                    

SAMUEL

Hace días que Carla empiezo juntarse con el idiota de Alex, eso me molesta, ya le dije lo que pienso y ella va juntándose con él.

Joder.

Quede todo el día en casa, no quiero ir a trabajar, quiero esperar hasta que Carla regresa, quiero hablar con ella y decirle lo que pienso de su ''amistad'' con el idiota.

No puedo controlarme, me enoja mucho, entre todo lo que sucede ahora también tengo que preocuparme de ese asunto. Preferiría partirle la cara para que entienda que no puede ligarse a ella, no puede hacerle daño, para eso tendría que buscar otra chica.

Carla regreso por la noche, yo me levanto de la sofá, la estaba esperando toda la noche, no puedo dormir sin saber que regreso a casa.

-¿Dónde mierda estabas? – pregunto muy alterado

Carla cierra las puertas, me mira confundida, de seguro se preguntaba porque me comporto así de un día  a otro.

-Son las 1 de la mañana.

-Si, no pude dormir, te llevo llamando toda la noche.

-Fuimos al club. – responde

¿Los dos?

¿Ahora también va de fiestas con él cuando se supone que debíamos fingir ser pareja feliz?

-¿Por qué te comportas así? Te digo lo que pienso de él y tú vas, haces la única cosa que no debías.

-No me enrolle con él, es mi amigo.

-Claro.

Carla se acerca a mí, estaba muy enfadada conmigo.

-No eres mi marido o novio, no tienes ningún derecho reclamarme nada, date cuenta de eso.

Carla da vuelta, yéndose a su habitación, yo la sigo, quiero seguir hablándole, no puede irse así porque mañana podríamos dejar todo el asunto atrás, no quiero eso, quiero resolver el problema.

Al entrar en habitación la veo en su ropa interior, ya quito la ropa para poner pijama. No fue mi intención entrar en ese momento, pensé que aun no lo hico pero ya que me encuentro allí no me muevo.

-Samuel...

-Déjame hablar, por favor.

-¿Podría al menos poner la ropa?

-Espera...

Me acerco a ella.

-Lo único que me molesta es que has salido con ese idiota, yo se que parece que él quiere ser tu amigo o no sé qué pero yo lo conozco.

-¿Por qué eres tan preocupado?

-No le creo nada, está jugando contigo.

-¿Qué te hace creer que yo busco enrollarme con él?

-Aléjate de él.

-Samuel, una cosa es decirme que te preocupas y la otra muy distinta exigir que no lo veo nunca más. Ahora sal de aquí, por favor.

-¿Vas a seguir saliendo con él?

-No seas tan pesado.

-¿Pesado?

-Lo que yo hago con mi vida no es asunto tuyo igual que lo que tú haces, ahora necesito cambiar.

-Vale, cámbiate mientras estoy aquí, no voy a mirarte.

-¿Estas de broma?

-Quiero seguir hablando contigo.

Carla da vuelta, ya tenía el pijama preparada en la cama. Quedo mirando sus espaldas, tiene piel muy suave, es una princesa, la verdad. Algún tipo de deseo hacia ella se despierta en mí, me acerco, ella siente mi cercanía por detrás.

-¿Qué haces? – pregunta

-Déjame ayudarte. – suspiro

Carla queda en silencio, pongo mano sobre su brazo, quitando su sujetador lentamente, dejándolo en el suelo. Pongo manos sobre sus pechos, tocándolos, apretándoles, le hago sentir un placer.

Entre Carla y yo existía una atracción sexual, nada más... solo eso.

Carla gemía, dio vuelta, desabrochando mi camisa, tocando mi abdomen, mi miembro duro es notable, no deja de mirarlo. No sé que me está pasando, no quiero resolver estos asuntos de esta manera pero no puedo resistirme.

Carla acuesta sobre cama, quita sus bragas, siento ganas de correrme tan solo verla tan desnuda esperando para que me quito las pantalones y empiezo sabotearla con mi boca.

Joder.

Carla me sonríe de manera juguetona, a veces es así, a veces le gusta jugar de esa manera... quito pantalones, ahora mi miembro es aun más visible dentro de bóxer, se volvió muy duro, no puedo quitarme esas ganas de querer correrme dentro de ella.

Pasamos algunos minutos besándose y tocándose mutualmente... un sentimiento despertó en mí en cuanto sentí mano de Carla sobre mi miembro, no puedo controlarme.

-¿Qué estamos haciendo? – cuestiono

-Ya sabes... - suspira

Lo sabia... estábamos resolviendo nuestra discusión de esa manera.

Después de algunos minutos Carla se encuentra sentada sobre mi polla dura, subiéndose y bajándose con mucho deseo, esto no debía volver a pasar pero son algunas situaciones que no se pueden controlar.

Empiezo gemir, siento manos de Carla sobre mi pecho, sigue con lo suyo, me está haciendo gemir tanto que no se si pueda contenerme, voy a correrme dentro de ella...

-Joder... - grito

Carla se ve bastante satisfecha, me hace sentir puro placer con esos movimientos tan sexi.

-No puedo más. – suspiro entre gemidos

Carla cierra los ojos, toma mis manos, los pone en sus pechos, haciéndome volver tocarlos mientras subía y bajaba. Seguíamos así unos segundos más, hasta que llegamos al orgasmo al mismo segundo.

Fue maravilloso.

El siguiente día fui a ver a Polo que estaba trabajando, necesitaba hablar con alguien quien quizás podría entenderme.

-¿Te acostaste con ella?

Le conté toda la historia, necesita saber todo lo que paso desde el principio o mejor dicho desde la última vez que le vi.

-Si, otra vez.

-Eso está bien.

-Es mal, Polo. No debía pasar por estas cosas, tendría que cuidar de mis acciones, no pretendo estar con ella pero al fin me encuentro en la misma cama, follando con ella.

-Samu, yo lo tengo muy claro, se lo que te pasa.

-¿Lo sabes? Explícame porque yo no entiendo nada.

-Yo creo que tu estas empezando a sentir algo por ella aunque ni tú mismo te das cuenta de eso.

-No digas estupideces.

-Te digo lo que veo.

-Yo estoy enamorado de Marina.

-¿Y donde esta Marina ahora? Por lo que me has contado parece que más le importas a Carla que a Marina.

-Carla me está soportando porque tiene que hacerlo, entre otras cosas, lo que paso fue un error, nada más.

-Vale.

-¿Qué, no me crees?

-No, no te creo, lo que dices es una excusa, quieres ignorar lo que sientes pero no sé si eso va salir perfecto, podrías perder a única persona que en realidad te quiere de verdad aunque esa persona sea Carla.

Polo esta flipando, no estoy enamorado de Carla, en ese momento recibí una llamada de Marina. Estaba ansioso de oírla de nuevo, hablamos por 30 minutos pero todo fue una discusión, esperaba oír su respuesta, quería saber cuándo va volver pero ella me dijo que aun no está segura, oí una voz masculina a su lado.

Ahora me sentí muy desesperado, la quiero y ella no piensa volver pronto, no sé qué hacer, me vuelvo loco, ella me vuelve loco, Carla me vuelve loco, todos me vuelven loco... a la mierda con la vida.

Alma gemela | CARMUEL|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora