CAPITULO 95

242 20 0
                                    

SAMUEL

Carla acepto mi propuesta de matrimonio y tenía que llamar a todos para darles la noticia, era cursi y romántico, así soy.

También llame a Polo para que venga a mi casa, no tenía tiempo de visitarle en el bar ya que Carla tenía mucho trabajo que hacer y yo quede a solas con Jota.

Era un bebe tranquilo, eso me calma porque no había pasado mucho tiempo a solas con él para poder saber cómo calmarlo si llega a llorar.

-¿Qué tal, hermano? – decía en voz alta que casi despierta al bebe

-¡Que te calles, idiota! – Dije con voz baja - ¿Qué no ves que está dormido?

Polo se excusa al ver que Jota se encuentra en su cuña dormido, no había logrado despertarlo.

-Lo siento, tío.

-Hoy me toca estar todo el día con él, Carla está trabajando.

Era justo que yo quedara con él, hasta ahora fue ella quien hacia todo el trabajo.

-Yo pensé que íbamos celebrar tu futuro matrimonio – decía

-No, ahora no, tenemos que cuidarlo.

Polo se aburría mucho, le veo sentar en el sofá y buscar cualquier forma de diversión.

-Al menos podríamos tomar un café, ¿no crees?

-Si, vete a la cocina, tu por lo menos estas acostumbrado en hacer cafés todo el día – bromeo

A Polo no le gusto mucho esa broma, pero se fue a la cocina para preparar el café.

Yo tome a Jota en mis brazos, se estaba despertando poco a poco.

-Hola, hijo... eres muy hermoso y muy tranquilo, va ser que podemos hacer todo sin tu mama. Y ni te imaginas, ella creía que iba fracasarlo... - decía entre risas

Seguía hablándole cuando de repente sentí un olor muy característico llegando de su pañal, alguna posibilidad que se me olvido por completo.

-No, ¿no me digas que...?

Jota estaba ya bien despierto, además sonriéndose malvadamente.

Polo venia de cocina con café, pero ahora necesitaba su ayuda en otra cosa.

-Aquí esta... - decía

-Ven, ven acá.

-¿Qué pasa?

-¡Tenemos que cambiarle el pañal!

Estaba desesperado, Polo era el único que se encontraba acá en estos momentos.

-Ey, no me miras así, ni de coña voy a hacerlo – decía como si estuviera huyendo de mi

-Yo jamás lo hice, siempre mire a Carla o niñera hacerlo, no tengo ni idea por donde comenzar.

-A ver...

Seguimos así siguientes diez minutos y aun no teníamos la idea como hacerlo, Polo buscaba todo por el internet pero aun era difícil.

Le entrega Jota a Polo para averiguar qué hacer, entre Jota llorando y Polo estando desesperado era como tener dos bebes en la casa.

-Ya se, vamos a llamar a Lu – decía

No pude detenerlo, el toma el móvil y la llama explicándole lo que paso, preferiría seguir buscando respuestas por el internet que tener que soportar Lu recordando esto para el resto de nuestras vidas.

Ella vino en menos de cinco minutos, no podía creer que éramos tan inútiles para hacer algo tan simple.

-¿Qué hacemos? – dije desesperado

-Ay, mi amor, que mala suerte te toco estar en manos de estos dos inútiles – decía al tomarle en brazos

-No le hables mal de mí, sino ayúdanos – decía casi rogándola

-Por favor, Lu – Polo también lo hacia

-Está bien, pero tu... - dice señalando hacia mi - ... tú te vas conmigo para que por fin aprendas como cambiar pañal.

Alma gemela | CARMUEL|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora