8:17 p.m.
Esa misma noche, una vez que todo quedó en silencio, ambos jóvenes se dirigían hacia las ruinas en donde Miranda había conocido a Dio; el viento dejó de soplar, como si el tiempo mismo respondiera a la tensión generada por el miedo, a la vez como si la Madre Naturaleza pudiera responderle a su muda espera de la noche.
Había cuerpos yaciendo en el suelo, siendo algunos aplastados por las ruinas mientras otros expresaban terror escrito en sus rostros demacrados y uno que otro aparecía con los ojos rasgados y ensangrentados, además de arañazos en su pecho.
El ambiente se volvía cada vez más helado de lo que ya estaba, sobre todo al momento de recorrer las oscuras avenidas pertenecientes a los barrios pobres de San Bernardo; Miranda comenzaba a tocar los muros con sus manos para guiarse en la oscuridad, pues era tanta de la cual le impedía ver a pesar de toda luz iluminando escasamente en los faroles.
Una lluvia torrencial había arribado hacia el lugar, cuyas gotas frías como el hielo recorrían el bello rostro de la muchacha, algo que, por obvias razones para una dama similar a ella, no era nada normal en el Londres Victoriano.
De vez en cuando solía aparecer algún incauto pescando en el lago o una pareja de enamorados dándose un tierno beso entre la sombra en altas horas nocturnas, mas debido al clima de mal augurio y el mal presentimiento en los espacios abiertos como parques o plazas comerciales, no se pudo apreciar a ninguna persona.
Cada paso entre la hojarasca y el lodo ensuciando los botines, daba a Miranda un sentimiento de familiaridad cuando ella y compañía llegaron al bosque; pero, ¿por qué? ¿Acaso su deja vu la llevó inconscientemente hacia el arbolado o sólo era una coincidencia?
En ese instante, una tenue luz brillaba en la oscuridad junto a una melodía alegre, haciéndose más bizarra la ambientación; al notarlo, Miranda no pudo entender cómo puede sonar algo así en un sendero cubierto en tinieblas, hasta que su serenidad cambia a una expresión de sorpresa cuando la chica y su compañero se acercaron al lugar donde pudieron ver con claridad.
Se trataba de una pequeña cajita musical bellamente hecha a mano, pintada en tonos alegres similar a los colores pastel entre los cerezos, entonando la canción "Pop Goes the Weasel"; al lado del juguete, se encontraba una vela blanca junto a la grulla de papel que venía con el ala quemada.
Al acercarse, una voz femenina, similar al de una niña en plena pubertad, rompió la escena al decir:
—Espero que te agrade mi cálida bienvenida, hija del tiempo.
—¿Quién anda ahí?— exclamó Dio al sorprenderse, a lo que Miranda se giró la cabeza sólo para ver una silueta en medio de las tinieblas; dando un paso adelante, vio con claridad la dueña de dichas palabras: se trataba de una niña no mayor a ella, con doce o trece años de edad, cabello rubio y ondulado en las puntas a la altura de la cintura, tez clara y sonrosada, vistiendo una camisa blanca de manga larga debajo de un vestido negro puro como la noche, calcetas blancas y zapatos negros tipo Mary Janes, sumando un listón carmesí en el lado derecho del pelo; por último, lo que la diferenciaba de otras niñas eran, sin duda alguna, sus ojos de un rojo escarlata expresando una mirada apagada y a la vez llena de calma.Dio quedó perplejo ante la presencia de la infanta, pero al mismo tiempo sintió alivio al saber que no mostraba miedo, ni hambre, ni mucho menos frío o cansancio, pensando que era una niña valiente; en cambio, Miranda vio que la niña estaba sola y le expresaba compasión luego de verla cansada, empero algo le impedía acercarle, le decía que no se fiara de ella y debía correr o luchar.
Ella tenía un mal presentimiento en el fondo, pero siendo discreta y con una mirada maternal da un pequeño paso al intentar acercarse hacia la chica, mostrándose amistosa con ella y conservando la calma.
ESTÁS LEYENDO
Touhou Kirisome no Amnesia: La historia de Sakuya Izayoi. (TouhouMaria#2)
FanfictionPrecuela de Biological Clock y segunda historia de TouhouMaria en que nos narrará la historia de Sakuya: su infancia, su vida como una humana en el mundo exterior y su camino hacia una nueva esperanza contada por la voz de una mujer que sufrió pero...