El tiempo en pasaba en la escuela se volvió ciertamente monótono para Catra, no la pasaba mal gracias a sus amigos, pero estar en distintos salones la hacía sentir sola.
No logró hacer muchos amigos durante la primaria, siempre permaneció junto al trio de Lonnie, Kyle y Rogelio, los cuales eran buenos amigos con los que pasó una buena infancia.
Al momento de iniciar la secundaria y la adolescencia de Catra, tuvo que irse a otra escuela debido al trabajo de Shadow Weaver y el cambio no fue fácil.
Catra no era buena socializando, pero hacia lo mejor que podía ser agradable, y finalmente después de un tiempo logró unirse a un grupo que ella consideró amigos.
A la edad de 12 años de Catra, Shadow Weaver accedió a empezar a enseñarle las bases de la costura, Catra debía practicar bajó la supervisión de la mujer para evitar cualquier tipo de accidente.
Poco a poco Catra fue mejorando, incluso ayudando a Shadow Weaver, cosa que le recordaba a los viejos tiempos en su niñez, pero ahora tenía mayor participación.
Las notas de Catra no eran las mejores, pero tampoco eran malas, le gustaba mostrar su boletín de calificaciones a Shadow Weaver, en especial las notas de gimnasia, clase en la cual destacaba sobre los demás.
A pesar de la poca expresividad de Shadow Weaver, de vez en cuando tenía gestos de afecto como alborotar su melena, o acariciar su mejilla cuando esta se sentía mal.
Algo que Catra se dio cuenta con los años que no entendía de pequeña, en la pared se encontraban artículos de periódico, todos trataban de la misma persona, Micah.
Catra curiosa empezó a investigar sobre aquella persona, descubrió que se trataba sobre un diseñador en ascenso, Catra se sintió fascinada por su trabajo, viendo sin falta todas sus pasarelas.
La curiosidad de Catra la estaba matando por saber cuál era la relación de Shadow Weaver con el diseñador Micah, en especial porque al ver aquella pared se le veía llena de nostalgia.
Una vez que se llenó de valor para preguntar al respecto, recibió una respuesta contundente, que la hizo dejar el tema de lado.
"No quiero hablar al respecto"
Algo que Catra no se esperaba era volverse a encontrar con Hordeano, él estaba cursando último año y estaba a punto de graduarse, Catra hacia todo lo posible para evitarlo y que no se diera cuenta de su presencia.
Fueron varias las ocasiones en las que intentó visitarlo, pero se le negaba la entrada o el mismo Hordeano la trataba con desprecio, dando se cuenta que no era el buen hermano que creía que era.
Esconderse al parecer no fue lo suficiente, varios rumores se empezaron a expandir alrededor de ella, las personas que pensaba que eran sus amigos se alejaron, y todo empeoró el día de graduación de Hordeano.
Catra esperaba que después de que Hordeano se fuera todos los falsos rumores alrededor de ella desaparecieran, pero todo empeoró, por alguna razón había un gran grupo rodeando su escritorio, murmurando de forma despectiva.
No podía entender que hacían todos ahí, y ni siquiera pudo preguntar ya que fue llamada a la dirección, fue acusada de robo, según algunos testigos y el mismo Hordeano, fue encontrado en su escritorio un objeto que Hordeano reportó como perdido.
A pesar de que Catra intentaba decir que ella no hizo nada de eso, las pruebas contra ella la hacían ver como culpable, y Hordeano reía cuando nadie más que ella lo veía.
"Que tengas una buena vida, hermana"
Fue lo último que escuchó de Hordeano. Al inicio del siguiente año, fue recibida peor de lo que esperaba.
"Rara" "Nunca me agradó" "Está loca" "Sus ojos no son normales" "Desagradable" "Ladrona"
Entre otras cosas que hablaban a sus espaldas, incluso proviniendo de esos a los que llamaba amigos, Catra empezó a llenarse de muchas inseguridades, tanto de su físico como de su persona.
A pesar de todo, Catra no se iba a quedar así, empezó a juntar mucho rencor, cosa que le hizo tomar una actitud más fría, tosca y agresiva, cada vez que escuchaba a alguien hablar mal de ella terminaba en una pelea.
Su reputación empeoró, ahora no era objeto de burlas por el miedo que generaba, causando que fuese llamada a la dirección en bastantes ocasiones, y los regaños de Shadow Weaver causaban que terminaran en fuertes peleas.
Aun así, a pesar de lo fuerte y a veces insensible que Catra se mostraba, eso solo era una coraza, estaba sola, siempre que se veía a un espejo le entraban ganas de llorar y se preguntaba si de verdad merecía todo eso.
La adolescencia es una etapa llena de cambios, en la cual se empieza a formar la individualidad, para Catra el uso del mismo uniforme con falda era agotador y ya se encontraba por graduarse ese año así que quería hacer algo al respecto.
Catra con la experiencia obtenida gracias a Shadow Weaver, y con mucha paciencia y esfuerzo, logró confeccionar un pantalón del uniforme casi perfecto obteniendo a cambio los dedos llenos de curas debido a la aguja.
Cuando Shadow Weaver la vio lista para salir con el obvio cambió en su uniforme, solo tomó un sorbo de su café y dijo "presta atención a tu clase de matemáticas, no quiero ver más malas notas"
Catra se vestía libremente sin importarle lo que los demás dijeran, no estaba rompiendo las reglas de su uniforme así que no podían decirle nada, exceptuando cuando tenia la corbata desatada y la camisa desacomodada.
El ultimo año seria igual que los pasados, pasar su tiempo sola y practicar costura, pero ese año se encontró con alguien que cambió eso, una persona nueva.
Era algo poco común que en ultimo año hubiese estudiantes nuevos, aun así, llegó una persona particular, su nombre era Doppler Morfer, Catra no logró descifrar si era chico o chica debido a su ambigua apariencia, pero decidió no prestarle más atención.
Se suponía que iba a ser solo un capítulo, pero quedó muy largo así que espero que disfruten estos dos capítulos seguidos ;)
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La chica que quiere - Catradora
Teen FictionUn día se escuchó a Adora decir "No es mi tipo", ¿creen que esas palabras detendrán a Catra? La respuesta es no, aunque esto haga que tenga que cambiar y sacrificar varias cosas, no descansará hasta ser la chica que quiere, y será la chica que nece...