La chica que quiere - Catradora

✏️ | Parte 1

Debido a la corta edad de Adora, no entendía lo que la palabra mudarse implicaba, le dijeron que tenían que irse muy lejos y Adora estaba emocionada pensando que solo era un viaje, no sabia que no iban a volver.

A diferencia de Adora, la cual estaba emocionada, su hermana Mara se veía realmente decaída, y una vez fue encontrada llorando en silencio mientras que veía una foto de ella con su mejor amiga.

Cuando el día llegó, Adora ayudaba a cargar cajas pequeñas y cargaba su gran cantidad de peluches al camión, Madame Razz debido a su avanzada edad tenía que ser ayudada por Mara para llevar las otras cosas.

Todo estaba listo en el camión y este se dirigió al que seria su nuevo hogar, Madame Razz estaba al volante del auto y Adora atrás esperaba con sus amigos los peluches.

Mara terminó de sacar la última cosa de su cuarto, una foto en un marco, Adora se asomó a ver a su hermana, cuando se sorprendió al ver a Light Hope esperando a Mara.

Al Mara verla, sus ojos brillaron y corrió a abrazarla, a pesar de Ligh Hope ser más alta, Mara la levantó del suelo y la abrazaba con mucho cariño, como si no quisiera dejarla ir.

Cuando Light Hope volvió al suelo, acunó el rostro lloroso de Mara en sus manos y le dio un pequeño beso en la mejilla, después de eso se alejó y se despidió con la mano.

Adora vio a Mara llegar como en un estado de transe, al ver atrás vio como Ligh Hope se cubría el rostro y al volver a ver su hermana estaba haciendo lo mismo.

–Como lo siento Mara –Madame Razz dijo con pena.

Mara solo le sonrió a la mujer, dejando a entender que todo estaba bien, después de todo comprendía que mantener a dos niñas no era fácil y menos aún si la despedían por su edad.

Afortunadamente encontró otro trabajo, esta vez como bibliotecaria, pero lejos de donde estaban viviendo, pero lo bueno es que parecía un buen lugar.

Los vecinos eran muy agradables y uno de ellos le pidió a Madame Razz que cuidara a su hijo, a lo cual ella aceptó encantada. Adora se volvió muy buena amiga de este niño de actitud extravagante, y se sentía como si fuera parte de la familia.

Un día ese niño de nombre Swift Wind llamó a Madame Razz "tía" por el cariño que le tenía, cosa que llevó a que Adora se confundiera y creyera que él es su primo.

Cuando finalmente llegó el momento de volver a clases Adora no entendía por qué tenía que usar un uniforme nuevo y Mara también usaba uno distinto.

Adora con curiosidad entró al cuarto de su hermana para preguntar, no estaba, pero ahí se encontraba su celular con un mensaje reciente. Curiosa tomó el celular y leyó que era un mensaje de Ligh Hope que decía "te extraño.

Adora con intención de ayudar a Mara, escribió como pudo un "yo tambin t estraño" y lo envió, e intentando ver como enviarle una carita feliz, abrió la cámara delantera y tomó una foto de ella con un gran acercamiento a su cara.

Light Hope escribía y se retractaba una y otra vez, hasta que contesto con un simple mensaje "¿Adora?", a lo que la niña envió un audio diciendo "que hace este botón, creo que algo está pasando, ¿Light Hope estas atrapada ahí dentro? Mara es muy envidiosa"

El audio no se había detenido, se escucharon unos rápidos pasos y una puerta golpeándose, "¡Adora, pequeña! ¿Qué haces aquí?" a lo que Adora respondió "hablar con Light Hope, no sé si lo estoy haciendo bien" Mara soltó una risa "dame el celular" Adora se negó "No, eres una envidiosa y quieres a Light Hope para ti sola"

Después de eso se escucharon forcejeos y risas de Adora hasta que audio, finalmente terminó y fue enviado, a lo que Light Hope respondió riendo, cosa que avergonzó a Mara.

–Yo también quiero hablar con mis amigos, los extraño –Adora comentó–, ¿Cuándo vamos a volver?

–Adora... eso no es posible –Mara alborotó su cabello.

–Mi amiga Catra también me va a extrañar, quiero volver –los ojos de adora se pusieron vidriosos.

Mara se sintió mal por la pequeña niña, mudarse lejos de sus amigos no era fácil para nadie y menos para Adora que aun parecía no entender la situación.

–Hagamos una promesa –Mara llamó la atención de la pequeña–, las dos vamos a volver, no sé cuándo, pero debes comportarte bien.

–¿Volveremos a ver a nuestros amigos? –Los ojos de Adora brillaron con ilusión.

–Sí, debemos ser pacientes –Mara soltó un pesado suspiro–, ahora ve a prepararte para tu nueva escuela.

–Está bien, lo prometo –Adora emocionada salió corriendo a su cuarto a alistarse.

Cuando Mara y Adora estaban listas, Madame Razz las esperaba en la puerta, como era de costumbre Adora se sujetó de la mano de Madame Razz y llegaron a la nueva escuela.

Mara se encargó de llevar a Adora a su nuevo salón, allí Adora sintió gran nerviosismo al ver a tantos niños desconocidos, rápidamente tomó asiento en un lugar vacío, sacó su cuaderno para dibujar y distraerse.

Algunos niños veían con curiosidad a ella o lo que dibujaba, poniéndola nerviosa y encogiéndose en su asiento, después de unos minutos todos tomaron asiento y el profesor pasó lista.

–Adora, ponte de pie y preséntate con tus compañeros –El profesor mandó.

Adora de inmediato obedeció, debido a su torpeza hizo caer todas sus cosas de la mesa, algunos niños se empezaron a reír y Adora enrojeció de la vergüenza.

–Yo... nombre... A...Adora... tengo... –Adora entrecortada y se enredaba mucho.

–Recoge tus cosas y toma asiento Adora.

Adora asintió y de inmediato empezó a recoger sus cosas mientras que escuchaba a unos niños que aún seguían riendo, un niño la ayudó a recoger sus cosas.

–Gracias... –Adora susurró.

El niño con cabello crespo y cejas pobladas sonrió y volvió a su asiento, Adora sonrió de vuelta y curiosa volteó, estaba mirando a otro lado, pero la niña que estaba sentada justo a su lado por alguna razón la estaba viendo molesta.

Las tareas me consumieron, pero ahora que terminé haré todo lo posible para segurir escribiendo ☆