–Pensaba que ella no te agradaba –Kyle comentó burlón.
Ni así Catra ponía atención a lo que estaban hablando, ni siquiera le prestaba atención al emparedado que Scorpia traía para ella, no paraba de mirar a todos lados buscando a la rubia.
Al parecer Catra finalmente había cedido, dejaba de alejarse y de vez en cuando se sentaba con Adora, cosa que se volvió una costumbre porque unas cuantas semanas después no podían estar lejos una de la otra.
–Adora está con sus amigos –Lonnie comentó.
Con solo mención de su nombre Catra volteó a mirar y mostro un gesto de decepción.
–Debió decirme... –Catra le dio una mordida a su comida.
–Al principio te comportabas como una per... –la boca de Lonnie fue cubierta por la mano de Rogelio la cual retiró–... persona desagradable con nosotros, y ahora mírate aquí.
Catra solo desvió la mirada, y se concentró en su comida.
–Entrapta me dijo que, aunque a veces sea un poco malo, en el fondo solo quiere amigos y amor –Scorpia dijo abrazando a la chica.
–¡Eso es mentira! –Catra respondió histérica intentando soltarse.
La inocencia de Scorpia era de lo más gracioso, en especial cuando molestaba a Catra sin quererlo. Después de haber sido molestada, Catra no aguantó más y se levantó de la mesa, no sin antes forzar a Scorpia a recibir dinero.
Con el emparedado en la mano empezó a alejarse buscando donde sentarse, pero al no ver nada, prefirió salir de la cafetería y sentarse en una banca afuera.
Mientras comía se ponía a pensar sobre lo que había dicho, era verdad, después de un tiempo terminó por acostumbrarse a Adora y ahora la veía como alguien cercano, cosa que le inquietaba porque eso era lo que quería evitar.
Concentrada en sus pensamientos, dio un salto al sentir algo frio pegado a su mejilla, al voltear a mirar encontró a Adora riendo mientras le extendía un café helado.
–Pensé que estabas con los chicos –Adora comentó.
–No los aguanto más, no dejan de molestarme –soltó un suspiro y recibió el café–, prefiero estar contigo.
Eso tomó desprevenida a la rubia, no esperaba que el ser cercana a Catra la haría más sincera, no podía evitar ponerse roja y desviar la mirada, tenía que admitirlo, Catra nunca le dejó de gustar, y ahora más aún.
–Te ves mal ¿tienes un golpe de calor? –Catra preguntó preocupada.
Adora solo tartamudeaba y quería que la tragase la tierra. Catra se puso en frente a ella, extendió su mano hacia su rostro y en respuesta Adora cerró los ojos con fuerza, cuando sintió un leve toque en la frente.
–Parece que no tienes nada –Catra murmuró–, mejor ve adentro o te vas a quemar por el sol.
–Tienes razón, el sol está muy fuerte –Adora empezó a reír nerviosa.
Catra se encogió de hombros y volvió a tomar asiento, abrió la lata de café y empezó a tomar de esta.
–Este café no significa que me dejes de deber un favor –Catra comentó.
–Lo sé, es solo un regalo, recuerdo que aquí fue cuando te disculpaste conmigo por primera vez –Adora murmuró–, parecías de las personas que nunca se disculpan.
–Antes era así, pero ya no quiero ser como esos cobardes que no admiten su error –Catra frunció el ceño y arrugó la lata en su mano.
La rubia tragó saliva al notar que tocó un tema delicado y empezó a pensar algo para desviar el tema.
–Aquí hace mucho sol, ¿no quieres ir a sentarte conmigo adentro? –Adora reunió el valor para decirlo.
La chica levantó la mirada con emoción y si esta tuviera orejas sobre su cabeza estas se moverían, mostrando su interés.
–Estoy bien aquí, pero no es mala idea –Catra intentó mostrarse desinteresada.
–Si es así, vamos –Adora estaba feliz.
Catra sin dudar se levantó y fue junto a ella, pasó su brazo sobre su hombro y por la diferencia de altura la hizo agacharse, quedando de esta manera más cerca de su rostro.
Mientras entraban Catra se quejaba de la clase mientras que bebía su café mientras que Adora solo podía responder con onomatopeyas como "ajá" "sí" mientras que sentía que su rostro ardía.
Cuando se acercaban a la mesa, los amigos de Adora la buscaban con la mirada porque se estaba demorando y cuando finalmente la encontraron no pudieron evitar soltar un suspiro.
–Parece que está a punto de explotar –Bow se burló.
–De seguro por dentro ya hizo corto circuito –Glimmer rio.
Cuando llegaron a la mesa, Adora se soltó del agarre y miraba mal a sus amigos al ver como estos se reían de ella.
–Chicos, les presento a Catra, ella comparte algunas clases conmigo –Adora introdujo a la chica–, ellos son Bow y Glimmer, mis mejores amigos.
Por alguna razón Catra no pudo evitar gruñir y dar una mirada no muy agradable.
–No esperaba verte por acá –Glimmer dijo burlona.
–Estoy aquí por Adora, brillitos –Catra respondió burlándose de su llamativa ropa.
Había empezado una pelea entre esas dos, Bow intentaba calmar a Glimmer, Adora también iba a hacer lo mismo, pero recibió una llamada de Light Hope, la cual había estado esperando por mucho tiempo.
Adora le pidió el favor a Bow de que se encargara mientras que este le pedía con la mirada que no lo abandonada. Adora estaba apenada por irse así pero el explicaría después a Catra.
Al contestar la llamada estaba feliz porque esperaba recibir noticias de su familia, pero solo se escuchaban unos sollozos.
–¿Hola? ¿Hope estás ahí? –Adora dijo con algo de miedo.
–Mara... Ella... –la voz de Hope no paraba de entrecortarse.
–¿Qué es lo que sucede? –Adora preguntó con miedo.
–Mara... Mara fue... –Light Hope murmuró algo que Adora alcanzó a entender y rompió en llanto antes de colgar.
Catra después de calmarse de su pelea con Glimmer, fue a buscar a Adora, cuando la vio fue corriendo hacia ella. Estaba sentada en el suelo en posición fetal, con la respiración errática, al parecer tenía un ataque.
Lo único que pudo hacer fue agacharse junto a ella, abrazarla y acariciar su espalda, murmurando que todo estaba bien, temiendo la gravedad de la situación.
Me es difícil publicar de manera diaria por cuestión de tiempo, pero lo haré lo más seguido posible.
Por lo que veo aún hay problemas para algunos con la notificación de cada capítulo, no sé si hay manera de arreglarlo, solo puedo recomendar que revisen cada dos o tres días;;
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La chica que quiere - Catradora
JugendliteraturUn día se escuchó a Adora decir "No es mi tipo", ¿creen que esas palabras detendrán a Catra? La respuesta es no, aunque esto haga que tenga que cambiar y sacrificar varias cosas, no descansará hasta ser la chica que quiere, y será la chica que nece...