Veinte

131 13 20
                                    

~•||•~

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

~•||•~

—Hola, Ember.

El suave murmuro de Taehyung y la gentil sonrisa que tenía en su rostro cuando me vio en la puerta del salón me hicieron sentir un escalofrío en todo el cuerpo.

¿Acaso estaba teniendo otro sueño?

Encajé un poco mis uñas en la palma de mi mano, lo cual dolió lo suficiente como para estar segura de que no estaba en un sueño. Por su parte, Taehyung me miró confundido al ver que que no le respondía y, en su lugar, solo lo observaba como si de un fantasma se tratara.

—¿Tú tampoco revisaste tu correo anoche? —preguntó con una media sonrisa en su rostro.

—¿Tú tampoco revisaste tu correo anoche? —preguntó con una media sonrisa en su rostro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El mismo rostro que acaricié en mi sueño.

Parpadeé un par de veces sintiendo que mi boca comenzaba a conectarse a mi cerebro de nuevo, lo cual me permitió hablar.

—¿Cuál correo? —me sorprendí por la claridad con la que mi voz se había escuchado.

—La profesora Lee mandó un correo anoche avisando que no vendría durante la primera hora de clase —contestó, aun mirándome desde el escritorio—. Tenía que ver con algo sobre su bebé y una de sus citas con el pediatra.

Una sensación de alivio me inundó. Bien, al menos ahora todo tenía sentido y mi teoría de que seguía soñando podía ser fácilmente desechada.

—Por eso no hay nadie —suspiré aliviada, asintiendo sin poder verlo a los ojos.

—¿Qué pensaste?, ¿que de pronto yo sería tu profesor particular? —bromeó enarcando una ceja y tragué saliva.

Se podría decir que en mi sueño me diste clases particulares, pero fueron más sobre la práctica y no la teoría, pensé sin poder controlarme.

—N-no —titubeé, sonriendo nerviosa debido a mis pensamientos. Tenía que tranquilizarme si no quería lucir como un bicho raro frente a él.

—Al menos no estaré solo esperando que comience la siguiente clase —comentó sin verme, jugando de nuevo con el lápiz que tenía en su mano.

I'm In Love Too • KTHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora