Ya Veremos |• VMin.

🍰1.

Día 1...ya no quería levantarse a pesar de que ya era un nuevo año, nuevo comienzo y, según dijo el año anterior, nueva vida, el solo quería dormir todo el dia.

— pero eso es pedir mucho— murmuró aún con sus ojitos cerrados.

Solo le quedó contar hasta siete cuando el ya conocido sonido del timbre de su departamento se hizo oír.

— maldición!!— pataleo en su cama quitando las cobijas de su cuerpo— eres un buen amigo Jimin— se puso de pie y camino a ciegas, ya que sus ojitos aún estaban algo cerrados, fuera de la habitación— un muy buen amigo, nadie es como tú, eres putamente genial y debes saberlo ya— bostezó mientras se daba pequeñas palmaditas en sus mejillas, una vez llegando hacia la puerta, la abrió enfrentando a su pesadilla de todas  las mañanas.

— hey bebé!!— le sonrió ingresando dentro sin esperar una invitación, pues el no la necesitaba y nunca la necesito.

— carajo taehyung!!— suspiro cerrando la puerta y siguiendo al castaño quien ingresó a la cocina— en qué quedamos imbecil?

— sinceramente no lo recuerdo— le sonrió mientras encendía la cafetera y tomaba una tasa de la alacena, todo como si fuera su propia casa— deberías saber ya que tengo muy mala memoria...

— pues agradece amigo mío que la mía es perfecta— lo fulminó con la mirada— y si mal no recuerdo el trato era que ya no pasarias a las seis de la mañana por un maldito café que puedes comprar en la cafetería de a una cuadra!!

— dos...son dos cuadras jiminnie— interrumpío.

—como sea!!— golpeó sus manos sobre la barra, no le gustaba está situación ya pasaba lo normal— ten consideración...

El y el castaño eran muy unidos, crecieron juntos y siempre, pero siempre, compartían todo juntos. Eso estaba bien al menos cuando ambos eran niños, con el tiempo, una vez se mudó a su propio apartamento, eso se volvió una rutina de la cual ahora el Omega no podía escapar. Todas la mañanas, justo a las seis, su amigo tocaba su puerta insistentemente, la rutina consistía en que el alfa pasaba por allí, se bebía una taza de café, le sonreía con burla y partía a la estación con los demás...lo malo? el debía de levantarse temprano para recibirlo y park Jimin no era nada lindo cuando lo despertaban de su hermoso sueño.

—bien, bien, no exageres...— suspiro sirviendo su café en la taza— pero comprende mí situación...tu departamento queda a solo una cuadra de la estación de bomberos y el café a dos, es mucho para mí...

— me importa dos cominos Kim, no puedes seguir con esto— suspiro— dijimos que ya no lo harías y sigues con ello, esto es injusto...

— lo siento...— dejó su tasa sobre la barra y la rodeó hasta llagar donde el rubio— no te enojes conmigo mochi— le sonrió acunado las tiernas mejillas de su amigo.

— está vez no funcionara— dijo quitando las manos del castaño— ya estoy cansado de esto...es algo agotador.

— Minnie...

— por todos los cielos taehyung, vives en el departamento de enfrente, prepara tu propio café imbecil!!

Porque si, a pensar de que su amado amigo tenía su propio departamento en frente, iba solo al suyo...

— Jimin, amargas mí día...porque no eres normal...— suspiro alejándose dos pasos del Omega.

— te refieres a porque no soy como los demás omegas que de seguro estarían más que encantados de recibirte con una tasa de café caliente porque no eres nadie más ni nadie menos que el gran Kim taehyung— exagero con sus manos.

— Jimin...

— me da igual no ser así...— suspiro cabizbajo— no tengo que ser como ellos y eso está bien para mí...si es eso lo que esperas ya vete de aqui— sin decir nada más salió de la sala de cocina directo a su habitación encerrándose en ella.

Odiaba los estereotipos impuestos de la sociedad, no estaba mal con ser un Omega, básicamente le daba igual, lo que le molestaba era el hecho de que por solo serlo todos esperasen sumisión de su parte, el no era así y no lo sería, le gustaba experimentar retos en su vida, la independencia, la libertad, no era para nada un Omega común y eso todos en el pueblo se lo habían dejado más que claro.

— jiminnie?— susurro tocando levemente la puerta del rubio— no es eso a lo que me refería...y-o no quise...lo siento— suspiro apoyando su cabeza en la puerta— lo entendiste mal, me gustas tal y como eres, ya deberías de saberlo chim, tú no necesitas ser como los demás, el solo hecho de que seas diferente es lo que te hace especial...lo lamento.

Esperó paciente a que el rubio abriese la puerta pero eso no sucedió por lo cual cabizbajo se alejó de esta dando media vuelta dispuesto a salir de allí.

— quiero helado de chocolate— susurro jimin por lo bajo del otro lado de la puerta antes de que el castaño se alejará por completo.

— hecho— asintió con una pequeña sonrisa taehyung.

— yo elegiré la película hoy...

— bien...pero que no sea de romance— súplico.

— será de romance—decreto.

— bien... supongo que lo tengo merecido— asintió, odiaba esas películas porque la mayoría eran tristes y terminaba llorando a mares— te veo en la tarde!!— se despidió alejándose de la habitación pero en menos de un segundo la puerta fue abierta, unos torpes pasos se oyeron acercándose a él y acto seguido unos pálidos brazos rodearon su cintura.

— ten un buen día— susurro bajito con su mejilla pegada contra la espalda del castaño.

— gracias— asintió acariciando las pequeñas manitos del Omega.

Lo que el rubio no sabía era que el castaño no solo pasaba por su café de  todas las mañanas, sino más bien lo hacía, más que nada, por el solo hecho de oír a la dulce voz del Omega desearle buenos días...con el tiempo se había acostumbrado tanto a ello que sentía que su día no podría completarse sin ese "ten un buen día" de parte del tierno Omega.