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[Cap. 34]
🍃No quiero dejarte ir.

El tiempo transcurría y los días pasaban sin cambio alguno. Jiwoo no respondía a mis mensajes y llamadas, y tampoco parecía querer verme. Estaba destrozada, durante casi toda la semana no había prestado atención ni a una sola clase, e incluso me había saltado un par, cosa que jamás había hecho, para intentar hablar con ella durante sus recesos.

Después de múltiples intentos, me había rendido por completo. Ella no iba a aceptar mis disculpas de ninguna forma, y yo solo debía conformarme con eso, después de todo, no había nadie más culpable que yo en todo esto.

—¿Por qué no estás en clases? —oí decir a Woon, sacándome del trance en el que había permanecido por unos minutos.

—No me siento muy bien —respondí enviándole una sonrisa de lado.

—¿Sucede algo? —volvió a preguntar y yo negué. —¿Quieres que te lleve a casa?

—No, me queda cerca así que caminaré hasta allá.

—Haru, ¿Segura que estás bien...

—Solo estoy cansada, no es nada grave —dije intentando tranquilizarlo. Era consciente de que mi rostro era un lío, pero no quería hablar con alguien acerca de lo mala amiga que había sido.

—Llámame si necesitas algo, no importa la hora — añadió preocupado. Pareció recordar algo, así que abrió su bolso y sacó una barra de chocolate dentro de este. —Ten, quizás esto te levante el ánimo.

—Gracias, Woon—dije sintiendo como una sonrisa genuina se extendía por mi rostro, quizás la primera de todo el día.

Tal como lo había dicho a Woon, caminé hasta el departamento con la intención de que aquel viaje mantuviera a mi mente calmada y no con ganas de querer morir cada cinco segundos. A penas llegué, me lancé a la cama y me envolví entre las sábanas.

Miré hacia un laso, en donde se encontraba aquel sobre blanco con la advertencia de que me mantuviera alejada de Hoseok. Los días pasaban y yo no era capaz de pensar en alguien que quisiera alejarme de él, así que simplemente lo había tomado como una broma molesta por parte de alguna fanática loca de "J-hope".

Me sentía mal en todos los sentidos, psicológica y físicamente. Sentía que incluso mi respiración era agotadora, y mis párpados pesaban pero no podía conciliar el sueño. 

Había intentado mil formas de hablar con Jiwoo, pero nada funcionaba. Había perdido a mi mejor amiga, y me dolía más que cualquier otra cosa que me hubiese sucedido antes.

Escuché un par de golpes en la puerta, y con pesar caminé hacia a ella para abrirla, dejando ver a Hoseok fuera.

—¿Qué tal? —preguntó, pero sabía la respuesta. Hoseok había estado viendo y viviendo el pesar junto conmigo. 

—Me siento horrible —confesé y el hizo una mueca. Volví a mi habitación con Hoseok detrás de mí, y fui directo hasta la cama.

—¿Volviste a perder clases? 

—Uhum —respondí asintiendo y el rodó los ojos. Hoseok no estaba de acuerdo con algunas decisiones que estaba tomando, como saltarme las clases o comer menos de lo normal debido a que casi no tenía apetito.

—Bien, saldremos de aquí —dijo tirando de mi brazo para levantarme de la cama.

—¿Cómo que saldremos?

—No voy a dejar que mi novia esté encerrada en su habitación todo el día mientras se mata pensando qué hizo mal.

—Pe...

Perfectly Imperfect (#1); Jung HoseokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora