2083 ー NCT

17. ¿coincidencias?

La tensión en el ambiente se sintió apenas Johnny tocó un pie dentro del lugar. Absolutamente todos lo miraron, sorprendidos y alerta por su sola presencia, y es que cada uno era consciente del peligro que era él para ellos, no solo por todo el poder que poseía, sino por todo el equipo que tenía detrás.

—¿Qué haces aquí? —espetó Jaemin, poniéndose a la defensiva.

Johnny carcajeó, mirando a Jaemin con fingida inocencia.

—Lo que dije recién. Estoy aquí para recibir sus servicios —repuso, guardando sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón.

Jeno metió su mano al bolsillo con destreza al ver la acción de Johnny, listo para atacarlo por si se atrevía a acercarse demás.

—No es necesario —Jaemin lo paró, colocando su mano sobre la de Jeno para impedir que iniciara una pelea—. ¿Qué quieres? —dijo, dirigiéndose ahora a Johnny otra vez.

—Supe por ahí que uno de sus servicios eran los asesinatos, ¿no? —Todos asintieron al unísono—. Pues bien, hay alguien a quien me gustaría que mataran.

—No cobramos barato —saltó Haechan en un intento por intimidarlo.

—Eso no es un problema para mí —le dijo con indiferencia—. Te daré lo que me pidas, si es que haces bien tu trabajo.

—¿Cuál es su nombre? —Jaemin parecía predispuesto a aceptar su pedido.

Johnny hizo una larga pausa antes de nombrarlo.

—Na Jaemin. —Soltó una risa malévola.

—Maldito hijo de... —Jeno alzó el arma, listo para apretar el gatillo.

—¡No! Jeno, no lo hagas —le ordenó su líder, quitándole la pistola de las manos. Él estaba igual de airado, es más, sentía la sangre hervirle por todo el cuerpo, sin embargo, prefería contenerse antes que causar un alboroto innecesario.

Johnny, en cambio, seguía riéndose a carcajadas, como si hubiese dicho el mejor chiste del año.

—No voy a aguantar que alguien me tome el pelo —espetó el de cabellera azul, mirando a Johnny con severidad. El mayor lo miró, y dejó de reír gradualmente, pero sin dejar esa sonrisilla burlona—. Menos alguien como tú. Así que vete.

El pelirrojo volvió a reír al oírlo.

—Pues, alguien aquí ya lo está haciendo... —dijo, mirando a Jisung de soslayo.

El chico sintió la mirada de Johnny sobre él, y sus piernas no pudieron evitar temblar. Había eliminado cualquier tipo de contacto, ¿cómo fue que los encontró? Esto sólo podía ser obra de Mark, lo más probable...

Jaemin alzó el arma que le había quitado a Jeno. Si decía una tontería más, no vacilaría y le dispararía para que se dejase de bromas. Odiaba sus aires de superioridad, odiaba que Johnny siempre aparentara ser alguien poderoso cuando estaba atestado de miedo por dentro.

—Hey, tranquilo —el pelirrojo alzó sus manos en signo de inocencia—. Vengo en son de paz...

—Vete antes de que te quite tu son de paz con un disparo en la cabeza —lanzó Jaemin, irritado. Johnny sólo venía a traer problemas.

—Está bien —se resignó—. Ya no necesito sus servicios, me las puedo arreglar solo —se quejó, girando sobre sus talones para salir—. ¿En serio les va tan bien? Si tienen un servicio de mierda...