Si le preguntaras a toda la clase por Kin Novelli ellos dirían que es fuego, la chica más candente y guapa de todo el salón, con una carita de que rompe mil platos y que todo el mundo estaría dispuesto a recoger para al menos recibir una de sus sonr...
Me puse de puntas pero no pasó nada, voltee a ver a Donovan que admiraba todo mi cuerpo.
-¿Pasa algo? -pregunté confundida.
-No es nada. Ven aquí.
Su rostro se mostraba serio pero le restó importancia con sus acciones, me cargó y buscó mi boca con frenesí, sin separarnos caminamos hasta pisar la colchoneta y Donovan me fue guiando hasta acostarnos sobre ella. Estaba fría y mi cuerpo no dudó en demostrarlo al erizarse.
-Lo siento, intentaré arreglar eso la siguiente ocasión.
Le sonreí, no pude evitarlo y afirmé un movimiento de cabeza.
DONOVAN
Solamente había sido un instante, un puto instante bastó para que todo me regresara a la cabeza. Ya no estaba concentrado y algo dentro de mi deseaba decirle a Kin que se fuera cuando la vi ser parte de mi intimidad al llevarla ahí y tomar mi libro.
Me preguntaba si le gustaría que siguiéramos cogiendo si supiera mi secreto. No, seguramente no. Ella era muy predecible.
Tuve que alejarme unos minutos antes de cagarla o hacer algo mal pues yo tambien la deseaba como ella a mi. No dejaria que mi pasado se interpusiera en mis deseos. Había estado deseando a Kin demasiado tiempo; respiré profundo un par de veces mientras me preparaba para ella.
Cuando volví y la vi completamente desnuda supe que de verdad la tenía en la palma de mi mano y no la iba a dejar ir tan fácilmente aunque ni de coña iba a cometer el error de enamorarme.
Estaba tan hermosa y absorta en sus pensamientos como una estatua griega en en museo y automáticamente me convertí en el más astuto ladrón de arte, silencioso camine hasta ella y la atrape en mis brazos.
Kin dio un brinco al sentirme y su piel de había enchinado con mi contacto.
-De puntas -ordené firmemente y Kin sin chistar obedeció. Estaba a punto de hundirme en ella cuando mis pensamientos volvieron a atacarme.
«¿Te la vas a follar igual que a...?» escuché a mi mente decir «¿Qué?» pregunté «¡Dioses! Como le encantaba de esa manera..., y ahora vas a ensuciar a Kin de la misma forma»
Salí de mi ensimismamiento cuando escuché a Kin hablar y aunque mi deseo por ella no había desaparecido sentí una ligera repulsión al verla en esa posición y sin pensármelo la tomé entre mis brazos y la besé.
Mi beso fue intenso, apasionado, era un beso que deseaba silenciar mis pensamientos y al sentir el respingo de su cuerpo tocando lo frío automáticamente todo se fue.
Me encantó ver su sonrisa y el rojo intenso de sus mejillas, el deso en su mirada y sin hacerla esperar me aferre a sus caderas y me hundi dentro de ella.
Tuve que morder mis labios para no gruñir pero me pareció delicioso y de Kin ni hablar, intento mantenerse callada los primero diez segundos pero no pudo resistirse más de lo que yo en evitar hacer movimientos más rápidos, mi chica estaba demaciado húmeda y por consiguiente era mucho más fácil el movimiento de mis caderas.
¿Cómo podía verse tan guapa en esa posición? Y tan vulnerable..., no, ella era mucho más fuerte, más lista, poderosa, todo el mundo hacia lo que ella quería y era tratada como lo reina blanca.
Y ahora yo era el único que la podía ver así, haciendo una deliciosa mueca de placer con su boca, que la podía escuchar, sus gemidos sonaban como ópera en mis oídos y ¡Por Eros! Sentirla. Sentir el estrecho y cálido centro de su placer que me estaba volviendo loco.
¡Dioses! A pesar de todas mis atrocidades y mis infiernos, de verdad que en ese instante se estaba volviendo realidad mi más grande fantasía sexual.
Follarme a Kin.
Se esforzaba por mirarme a los ojos mientras follabamos, eso era una buen señal, Kin no deseaba que parara de moverme..., al parecer ya se había aprendido las reglas aunque claro, todavía no tenía la capacidad de llevarlas a cabo correctamente.
Y basto un pequeño instante para que no pudiera aguantar y la vi apretar los ojos y dejarse llevar como si nada más existiera el mundo más que su placer.
Dejé pasar su falta y la permití perderse en lo que sentía; intercalaba mis movimientos a veces lentos, a veces rápido y ella se apretaba o se relajaba, su calor me palpitaba y por un instante a pesar de la deliciosa sensación que también me causaba también logré perderme en su rostro y con bastante satisfacción también pude percatarme de que yo era el único en conocer esa parte de ella pues, ninguno de sus imbeciles ex novios la habían hecho sentir como lo hacía yo.
Y nunca, inconscientemente juré que nadie nunca lo haría.
Sin dejar de moverme junté y levanté las piernas de Kin y aunque ella no lo esperaba eso facilitó mucho más el acceso de mi falo hasta su punto G. Y yo ¡Yo estaba en la gloria! Pues con esta posición alcanzaba la mayor profundidad de su vagin*.
De nuevo aceleré mis movimientos y sus gemidos se volvieron más altos, mi respiración estaba acelerada y ni hablar del choque de nuestra piel, sonaba tan magnífico como era.
-¡Dioses! Afrodita, Persefone, Eros, Zeus -la escuché gemir y entre risas le iba a pedir que dejara de llamarlos o iba a invocarlos y esto iba a terminar tal vez en una orgía, pero lo siguiente que salió de sus labios me hizo perderme en mis deseos-. ¡Donovan! ¡Ooh! -gimoteaba-, Sigue, no pares ¡Ah! Donovan, Donovan.
Mi nombre sonaba delicioso proviniendo de su boca y cuanto más lo decía más aceleraba y por un momento yo también cerré los ojos y me dejé llevar hasta que sentí a Kin teniendo placenteros espasmos que la hicieron apretar y abrazar mi hombría que simplemente se dejó vencer hasta tenerme temblando de placer.
Ambos abrimos los ojos y volteamos a vernos y no se si las acciones de Kin fueron impulsos del momento o si de corazón simplemente se había dejado llevar por todas las sensaciones pero una vez que me miró me sonrió y me besó con calidez en la boca.
-Me gustas mucho Donovan...
La escuché decir.
🖤Hola de nuevo mis queridas brujitas y unos que otros fantasmitas, pónganse los sombreros y saquen las varitas para ponerle estrellas al capítulo y/o comentarios. Espero que le haya emocionadopor que a mi se me acelero el corazón. 😱🤭
Hablando un poquito de otras cosas, se que muchas de ustedes estánaquígracias a las promociones de Facebook,les pido su apoyo para que esta historia siga creciendo. Muchas gracias por leer y nos vemos en el siguiente capítulo muy pronto. 🤗🤩
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