DONOVAN
-...Gracias por todo Donovan mal cogedor egocéntrico cuatro ojos.
Estaba divirtiendome de lo lindo hasta que escuché la muy ofensiva despedida de Kin y debo de admitir que me dejo descolocado por unos segundos mientras la veía alejarse.
Nadin, la encargada de la biblioteca, mal interpreto mi mirada que perseguía a Kin en su andar pues inmediatamente que se cruzó con la mía se levantó de su lugar y con una sonrisa linda y coqueta me señaló el pequeño cuarto donde nos habíamos encontrado en anteriores veces. La vi desaparecer entre los estantes y sinceramente no me interesó de todos modos; mis pensamientos seguían procesando las palabras de Kin que me habían herido y molestado de tantas formas.
«No Kiny, no creas que has ganado» cargué mi mochila y alcancé a la chica que casi llegaba a la salida, la tomé del brazo y sin pensármelo nada la fui llevando entre los pasillos escondidos de la biblioteca hasta que llegamos a mi escondite, un pequeño pasillo al que ningún estudiante llegaba pues solo había libros viejos que ya casi no eran de mucha utilidad en sus ramas de estudio.
Lami mis labios antes de quedar de frente con Kin y la besé. Ella no se resistió y aunque al principio se mostró rígida un minuto después ya estaba siguiéndome el pasó.
«Acabas de meterte en la cueva del lobo » dije para mis adentros.
KIN
Ni si quiera pude resistirme a él, darle una bofetada o esquivarlo, simplemente me dejé llevar por los deliciosos labios de Donovan con los que había soñado la noche anterior; cerré los ojos presa de todas las sensaciones que provocaba en mi cuerpo. Mi mochila tiró un par de libros cuando me pegué más al estante antes de resbalar de mis brazas y Donovan tiró la suya al suelo mientras su cuerpo se pegaba más al mío, su manos me sostuvieron de la cintura y podía sentir con claridad el calor que emanaba al sentirlo tan cerca de mi.
¡Hades! El entusiasmo incrementó cuando su mano comenzó a bajar lentamente hasta encontrar la orilla de mi falda y nuestro beso se intensificó, sus dedos jugueteban con la tela y estaba segura de que estaban a punto de colarse dentro de la prenda hasta que simplemente nuestras bocas se separaron.
Abrí los ojos lentamente, confundida, avergonzada, tal vez un poquito mareada y muy deseosa de más. Donovan me miraba fijamente mientras se mordía el labio lo que me pareció tremendamente sexy y su cabello estaba ligeramente desordenado ¡Oh Afrodita! ¿Cómo es que nadie más lo podía ver como lo hacía yo?
-Me tengo que ir -lo escuché decir en voz baja, recogió su mochila y se dio la media vuelta.
-¡Espera! -lo miré confundida-. ¿Eso...eso fue todo?
Donovan volteo a verme, había tomado una expresión indiferente.
-Pense que era un mal cogedor, egocéntrico cuatro ojos -guardó las manos en los bolsillos de su abrigo-. No sé por qué esperabas algo más de una persona con esas características..., a menos de que no lo sea.
Me puse roja cómo cereza pero eso no me detuvo.
-Bueno, ahora que te conozco mejor creo que si eres un poco egocéntrico.
Aunque parecía que debatía en hacerlo al final Donovan saco una leve sonrisa.
-¿Pero no un cuatro ojos?
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DETRÁS DE ESAS GAFAS -Libro 1-
Storie d'amoreSi le preguntaras a toda la clase por Kin Novelli ellos dirían que es fuego, la chica más candente y guapa de todo el salón, con una carita de que rompe mil platos y que todo el mundo estaría dispuesto a recoger para al menos recibir una de sus sonr...
