CAPÍTULO|55

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KIN

UN AÑO DESPUÉS

Había llegado el gran día.

Oficialmente ya era asistente en la editorial para la que había estado haciendo mis prácticas, lo que significaba comenzar por todo lo alto y lucir fantástica para mi primer día laboral.

Me puse un vestido lindo y peiné mi cabello lo mejor que pude, también compré nuevos tacones y un lindo bolso para la ocasión.

Me aseguré de salir temprano de casa y pasar por algo para desayunar y es que si utilizaba la cocina seguramente iba a despertar a Noah y por lo que escuché había llegado bastante tarde del trabajo.

Cómo siempre mi jefa ya había llegado a la oficina y parecía tan contenta que me recibió con una sonrisa cuando me vio entrar.

-Estoy segura de que hoy será un gran día -se acercó a saludarme y dejo un libro recién impreso sobre mis manos.

-¿Y esto? -pregunté contagiada por su felicidad.

-Es pan recién hecho y de la mejor calidad. Estamos esperando tremendo éxito.

Lo acerqué a mi nariz y ¡Dioses! Amaba el olor de los libros recién salidos de imprenta.

Le eché un vistazo y no supe realmente por qué pero en automático llamó mi atención.

-¿Detrás de esas gafas? -pregunté.

-Si ¿Encantador verdad?

¡Mierda! No podía ver unas gafas o escuchar de ellas porque en automático pensaba en el pasado de la manera más inevitable posible.

-¿Por qué no había oído hablar de este título hasta ahora?

-Íbamos a debutar con el señor Pearlman desde el año pasado con otro título, pero a última hora hubo un cambio total y salió esta obra de arte.

Busqué el nombre del autor en la portada:

«D.C. Pearlman» una extraña sensación recorrió mi cuerpo al leer esas iniciales pero..., no podía ser ¿O sí?

-Es un hombre encantador y estoy segura de que te va a caer muy bien cuando lo conozcas mañana con el lanzamiento oficial.

-¿Hablas de un cóctel de lanzamiento y conocer al autor de..., de verdad?

-Bueno es algo que solamente hacemos con los autores debutantes pero si, exactamente. Así que mi querida Kin, tu primer trabajo oficial es leer este libro completo para mañana.

Me emocioné tanto que di un saltito de alegría cuando mi jefa me dio la espalda y se encerró en su oficina, algunos compañeros se me quedaron mirando pero no me importó, la felicidad estaba volviendo a mi vida y con más intensidad.

Las primeras horas de la mañana me preocupé por darle un toque personal a mi nuevo lugar de trabajo y lo arreglé lo más lindo posible. Cuando me aseguré de que todo estuviera listo puse manos a la obra y me senté en mi cómoda silla de oficina para leer:

Capítulo 1

Toda mi vida como en la teoría aprendí que la oscuridad es fácil de alcanzar, aunque nadie mencionó que no es absoluta hasta que llegaste tú.

Este es mi descubrimiento personal de como la oscuridad es la ausencia de la luz. Y para saberlo, tuve que perderte a ti...

Automáticamente quedé enganchada y no pude parar de leer sobre la vida de ese niñito que no podía ver los colores por una rara maldición familiar y como es que para ellos siempre fue tan normal que creían que todo el mundo lo pasaba igual.

DETRÁS DE ESAS GAFAS -Libro 1-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora