The Erudite; JinTae

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—¿Crees que los directivos de Sungkyunkwan realmente ayudarán? —le preguntó Sun, respirando con irregularidad mientras intentaba sostenerle el paso a Taehyung.

—Es la única opción que me queda.

—¿Te han parecido confiables? —preguntó de nuevos, por fin pudiendo alcanzar al muchacho —. No me has contado mucho sobre tus visitas a la Academia.

El Rey estaba seguro de que aquellos directivos serían de mucha ayuda. Aunque llevaba pocas semanas en su puesto, se había esforzado para ganarse el aprecio y confianza de esos hombres.

De eso no cabía duda.

—Lo son.

A Sun aquella respuesta no pareció convencerle del todo —. ¿Has seguido en contacto con Kyungjoon? — Taehyung volteó a verla con curiosidad —. Ya sabes, ese que es amigo del erudito Kim. Me ha parecido una persona muy... ¿Amable? No entiendo cómo es que logró calmarte.

—Jin quería que nos conociéramos —murmuró con un deje de tristeza —. Parece ser que tenemos un nuevo aliado.

—Pero... ¿No te parece que su amabilidad es excesiva hacia alguien que apenas conoce?

—Que tú no lo seas ni con nosotros no hace que todos sean iguales que tú, Sun —se mofó, haciendo que ella le mirara con odio.

—Hablo en serio —dijo en voz baja —. Siento que no tengo permitido fiarme de nadie más, todos parecen esconder cosas.

Taehyung asintió, dándole la razón. Sin embargo, el amigo del erudito parecía ser muy sincero, de verdad que lo parecía. Y era un poco difícil de creer que alguien como él fuera a apuñalarles por la espalda. Si fuera de esa manera, entonces no habría ido hasta sus aposentos a avisarle sobre la situación de Jin, ni siquiera hubiera intentado tratar de ayudarle a retomar la calma.

Era como si desconfiar de él no estuviera entre sus opciones.

—En fin, demasiada paranoia —dijo Sun entre risas, intentando suavizar el ambiente. Miró a Taehyung, quien parecía estar acomodando su sombrero mientras hacía una mueca —. ¿Te molesta llevarlo?

—Estoy más acostumbrado a no usarlo.

—¿Entonces deberíamos privarte de ellos y dejar tu cabello suelto al estilo de Goryeo?

Taehyung abrió la boca, notando el tono de burla que su amiga había usado, pero al final no pudo evitar reír a la par. ¿Cabello suelto? Ni de loco.

—Prefiero no hacerlo.

—Ah, pero te verás muy bien —dijo ella, juntando ambas de sus manos como si hubiera tenido una fantástica idea —. ¡Antes lo llevabas de esa forma!

—Antes, solo cuando estábamos nosotros dos —recalcó, fingiendo una sonrisa. Sun se llevó una mano al pecho como si estuviera conmovida.

—Me siento especial. ¿Has dejado que el erudito te vea así...?

—No —intervino de inmediato, mirándola con sorpresa y vergüenza —. ¿Por qué habría de hacer yo eso?

—No puedo creer que te de vergüenza eso y que luego vengas conmigo a hablar de como deseas pasar una noche de...

—No hables —la calló, alzando una de sus manos. La cortesana frunció el ceño y refunfuñó en voz baja.

—Que por cierto, hablando de él, ¿le irás a ver más tarde? —preguntó ella, ladeando la cabeza con curiosidad —. ¿Debería preparar algo para llevarle?

El Rey se había pasado por la prisión Real esa mañana, antes del informe, para dejarle ropas limpias. Con esa visita se dio cuenta que su madre parecía haber privado a Seok Jin de comer y de beber, como si estuviese intentando matarlo de forma lenta y dolorosa. Taehyung había llamado entonces a Sun para ayudarle a preparar algo para su pareja y comer junto con él.