—Has estado muy distraído estos días.
La voz de Choi le sacó de su ensimismamiento. Habían pasado tres días desde lo que había pasado en el jardín y no podía dejar de pensar en ello.
Ahora se encontraba junto a la funcionaria a las afueras del palacio Donggung, la presencia de Yoongi estaba ausente y era un tema que les intrigaba a ambos, pues luego de aquel día que habían sido descubiertos en el jardín del príncipe, Yoongi no se había aparecido frente a ellos como normalmente lo haría.
—Solo estoy pensado —le respondió Seok Jin, recargando su espalda al tronco del árbol y volteandola a ver.
Era sorprendente que Choi hubiese sobrevivido las dos semanas que llevaba en el palacio. Según ella alegaba, los funcionarios estaban lejos de suponer que ella en realidad era una chica y no un chico, y eso era algo de lo cual alegrarse.
Por su parte, tampoco creía como estas semanas se le habían pasado en un abrir y cerrar de ojos. Aún así, había sido una odisea para él pues habían salido varias veces del palacio sin el debido permiso y habían evadido a un montón de guardias. Su recta conducta estaba yéndose a la basura. Luego estaba el príncipe Taehyung. El sentido común del erudito se había esfumado en un santiamén y, por más que se arrepentía, seguía pensando en lo sucedido. Le producía una gran inquietud.
—Quien diría que el príncipe decidiría pasarse por ese jardín justo en la hora que estábamos nosotros —comenzó a decir Choi, luego hizo una mueca —. Estuve a punto de creer que mi racha de dos semanas se arruinaría.
—Tampoco me lo esperaba.
—Nunca lo había visto en persona antes. Bien, ví su rostro en el registro que tenemos en la oficina de decretos reales pero él luce aún más intimidante en persona —explicó ella, jugueteando con el listón de su hanbok —. Creí que nos pondría algún castigo severo, pero nos lo dejó pasar... Al menos agradezco que no sea como mis superiores.
—¿Te han puesto algún castigo?
—Por ahora no. Pero tienen mala fama.
—Ya veo... Pues sí, el príncipe parece una mala persona, pero no lo es.
—Creí que te caía mal —mencionó ella, ladeando la cabeza —. Siempre te descargabas sobre él con nosotros y le decías un montón de cosas despectivas. Veo que ha cambiado tu opinión.
Jin pudo jurar que había cierto deje burlón en las últimas palabras de la chica, bufó con fastidio y la miró incrédulo —No es así. Él sigue siendo insoportable.
—No trates de esconder tus palabras —dejó salir una risa —. ¿Cómo van las clases con él?
—Canceló la clase de hoy —Jin hizo una mueca al recordar aquello y se encogió de hombros —. Está concentrando su atención en la organización del Cheoyongmu para la celebración real.
El erudito tenía curiosidad sobre cómo estaba llevando las cosas, puesto que parecía muy nervioso el día anterior. Por más que le había preguntado, el chico no se dignaba a responderle. Sin embargo, Jin había notado un gran cambio en la personalidad de Taehyung esos últimos días, aunque seguía con sus palabras sarcásticas y su poco desempeño en las clases, ahora se dirigía de una manera menos fuerte al erudito, como si sus acciones se hubieran ablandado.
¿Sería por lo del casamiento?
—Tengo una duda —Mencionó Jin antes de que la chica pudiera hablar. Choi ladeó la cabeza un tanto confundida de que le estuviera preguntando algo a ella.
—¿Sobre qué?
—Sobre los casamientos en la familia real —Jin dijo sin más, Choi pareció sorprendida.
ESTÁS LEYENDO
The Erudite; JinTae
FanfictionKim Seok Jin es un joven erudito famoso por su gran intelecto y su recta conducta, quien ayuda a su padre en la librería del pueblo. Su destino cambia cuando una orden del rey llega, una orden que no le agrada para nada. Debiendo renunciar a su futu...