Capítulo 31 3/4 Primer encuentro

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Hace algunas semanas me empecé a preocupar por el viejo pues desde que le explique todo no lo he visto.
Esa mañana recibí un mensaje de su celular decía que estaba en problemas y que lo viera en la iglesia, me pareció extraño así que lo discutí con Samael aniki.

- me parece algo extraño, que me dices tú?

» puede ser algo serio pero de igual forma no me gusta como se va el rumbo de esto; las cosas avanzan más rápido de lo que tenía planeado, tendré todo listo en unos días pero no puedo hacer nada al respecto de esto; tendrás que ir averiguar qué es lo que sucede; Amaimon está en otra misión por lo que tendrás que ir solo.

- de acuerdo.

» ten cuidado, no tengo un buen presentimiento.

Salí del lugar y en unas horas me encontraba frente a la iglesia que fue mi hogar durante mi niñez aunque sentía algo extraño había algo en ese lugar que no me gustaba para nada. De pronto todas mis alarmas se activaron al no poder escuchar ni ver a las personas de la región; es cierto que este lugar no es muy concurrido pero está en un lugar poblado y al no haber absolutamente nadie a los alrededores me alarmó bastante y más aún cuando al voltear a los lados el final de la calle parecía obstruido por neblina muy espesa, pronto todas las edificaciones al rededor de la iglesia se fueron perdiendo en la neblina dejando la iglesia en un lugar totalmente en blanco.

La puerta se abrió y por ella paso una persona que nunca antes había visto tenía el teléfono de mi padre en una de sus manos y con la otra me saludaba de lo más común.

Lamentablemente para ti, este será el lugar de tu tumba como a todos los demás que están dentro de la iglesia.

- quien eres tú? Que es lo que le hiciste a mi familia?

Por el momento estarán bien pero no por mucho.

De uno de sus bolsillos saca un detonador.

Sabes que es esto, verdad?

- maldito baja eso! Que es lo que pretendes?! Dónde está mi familia! Responde!

A los que tú llamas familia se encuentran luchando entre la vida y la muerte adentro de la iglesia, esos payasos no deben llamarse exorsistas incluso el paladín es viejo; me fue muy fácil acabar con ellos.

- maldito desgraciado!

Rin desenfundó su katana listo para pelear pero la persona delante de él levantó una mano tratando de calmarlo.

Wow wow cálmate o detonó las bombas en este instante.

Rin le gruño pero no quería que los chicos sufrieran por sus acciones apresuradas.

Empecemos de nuevo, me llamo Noriko y vine por órdenes del Vaticano a matarte así también a matar a aquellos que te escondieron de los altos mandos; seguí a Fujimoto hasta este lugar y los ataque cuando tenían la guardia baja.

- así es como trabajas? Cómo un cobarde, atacas cuando están indefensos, eres un asco!

Noriko: yo no lo llamaría cobarde más bien ingenioso; ahora lo que tengo en mis manos es un detonador con dos funciones la primera es para incendiar las llamas benditas las cuales deberían ser incapaces de ser manipuladas por un demonio como tú, de esta manera todas las personas en el interior morirán calcinadas, serán quemadas vivas! Y podrás escuchar sus gritos desde aquí!

- estás loco.

Noriko: y la segunda función es por si decides entrar en la iglesia a salvar a tus amigos, vez eso de ahí.

Sin quitar la vista por completo del sujeto frente a el Rin ve de reojo lo que Noriko señalaba.

Noriko: eso de ahí es un tanque cargado con diferentes sustancias usadas para matar demonios, en cuanto tu entres serás expuesto a todo lo que te lastima con suerte matandote al momento, de no ser así agonizaras hasta tu muerte unos minutos después.
Porsupuesto que esto no podría ser tan sencillo, ya sea que quieras entrar a salvarlos o los dejes morir a su suerte yo peleare contra ti.

- si lo que quieres es una pelea la tendrás pero deja fuera de esto a los chicos y al viejo!

Noriko: no entiendes, yo vengo a matarlos a todos no haré lo que tú pides.

- en ese caso no hay otra opción.

Rin se lanzó rápidamente contra Noriko con su katana empuñada Noriko desenfunda su espada y forcejea con Rin.

- te vencere y salvaré a todos!

Rin arroja el brazo contrario hacia atrás.

Noriko: que divertido eres! Vamos gatito pelea!

Rin decidido atacó al corazón de Noriko pero al atravesarlo Noriko se desvanece como humo.

Noriko: cierto, se me estaba olvidando algo...

Rin lo buscaba, podía oír su voz pero no podía verlo, sin saber cómo ni dónde sintió el filo de una espada cortar varias veces su cuerpo en puntos estratégicos como huesos blandos o tendones para finalizar con una estocada atravesando su estómago, fue ahí en dónde Noriko volvió a hacerse visible.

Noriko: me tomé la libertad de hacer un campo especial en dónde yo controlo la percepción y sentidos de mi contrincante.

La sangre fue haciendo un hilo bajando de la boca de Rin; cuando Noriko saco su espada de su cuerpo cayó al suelo escupiendo la sangre que obstruia sus vías respiratorias.

Noriko: si encantas tu espada con versos fatales logran hacer más daño a un demonio de lo que puedes imaginar.

Noriko daba por terminada la pelea así que se dió la vuelta listo para oprimir en botón de las bombas.

- espera! Esto.. aún no termina!

Rin se levantó y volvió a enfrentar a Noriko con movimientos más lentos pues en serio le dolían las heridas; Noriko en un corte rápido manda a volar la katana de Rin y confiado atacó de frente creyendo dar una estocada mortal en el corazón pero Rin lo esquivo aún así atravesó el lado derecho cerca de la clavícula.

Noriko: iluso, no conseguirás nada!

- te equivocas, te tengo justo donde quiero.

Haciendo presión en ambos lados y con un golpe rápido rompe la hoja de la katana.

Noriko: desgraciado! Sabes lo que has hecho?!

- te dejo sin cartas jugador. [Tengo que evitar que active las bombas o todos morirán]

Hijo de satánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora