Capítulo 37

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La mirada de Rin se volvió cruda, levantando el mentón y mostrando por inercia sus colmillos esa postura significaba que por nada iba a retroceder estaba listo para pelear a muerte.

Soy un demonio residente de gehena por lo que peleare si hay algún desacuerdo; no quiero causarle problemas a Samael aniki pero como rey demonio e hijo de Satán no voy a retroceder por nada, peleare a muerte, si él no se retracta y se aleja esto debe terminar con alguien muerto y puedo asegurar que ese no seré yo.

Yukio sintió la tensión en el ambiente, al que tenía enfrente no era una persona común lo supo por la posición en la que coloco parecía retarlo pero el no cederían tan fácil sin embargo su padre le dijo que no debía precipitarse ni ser impulsivo por lo que suspiro resignandose.
Al ver su oponente retroceder el ambiente se calmo un poco aunque seguía en alerta.

= Si buscas a Mephisto es inútil, fue a una reunión al Vaticano.

- [Vaticano? Serán los asesinos que mencionaron? De ser así tiene sentido que llevará a Amaimon] pero que malos... No me llevaron.

Rin dejo sus pensamientos y lo dijo en voz alta era uno de sus malos hábitos que solo le pasaba cuando hablaba de sus hermanos.

= ...llevarte? Acaso eres un exorsista?

- y tú un policía haciendo un interrogatorio?

= No, yo soy exorsista estoy bajo las órdenes de Mephisto y trabajo para él como maestro en farmacología demoníaca.

- [maestro.. quiere decir que enseña a personas inexpertas.. está creando más asesinos] mientras no te metas en mi camino todo estará bien; si Sam- Mephisto fue a una reunión llegará tarde así que yo me largo.

= Estar en tu camino? hey espera, a dónde vas?

Rin hace a un lado a Yukio para salir de la habitación, se detiene a unos pasos de Yukio y voltea a verle para decirle.

- eso no te importa; mantente alejado de ellos o lo pagarás muy caro.

Con eso dicho se fue del lugar con extrema tranquilidad dejando a Yukio con muchas preguntas.

= [Quien será ese chico? Parece tener unos 15.. pero nunca mencionó su nombre o propósito; tal vez pienso de más solo debo dejarlo pasar]

Busco entre sus ropas dándose cuenta de algo.

= Hijo de-!

~Con Rin~

Si no puedo ver a mis hermanos no se molestaran que de una vuelta, me pregunto... de que serán estás llaves.

Tenía en su poder un manojo de llaves y una billetera que le había quitado a Yukio cuando salió, siempre fue bueno para robar y no se arrepentía de ese don.

Paso todo el día en la ciudad comprando cosas gastando todo el dinero que tenía la billetera para después ir a muchos lugares con las llaves.

Una florería que apesta, un pasillo de gran tamaño que se parece a los pasillos del castillo, una zona nevada muy bonita que es resguardada por demonios, un comedor especial del cual tome algo de comida, un dormitorio aburrido y por alguna razón un cuarto médico.

Después de su viaje fue a un punto alto descansando muchas horas pero siempre manteniéndose en alerta; cuando estaba por irse escucho como alguien se quejaba, se acercó a ver de quién se trataba y vio a un pequeño gato con la pata herida.

- que pasa pequeño? Eso se ve muy mal.

Kuro: me duele mucho pero no me he podido curar...

Cualquiera escucharía a un gato maullar como cualquier otro, incluso kuro pensó que no le ayudaría porque no podía entenderlo pero para su sorpresa Rin si entendió.

- la herida es profunda, fue una pelea muy dura; contra que peleaste?

Kuro: me entiendes?!

- si, pero dejémoslo en secreto, quieres?

Kuro: si! Me llamo kuro; mi compañero y yo peleamos contra el rey impuro hace días... peleamos pero no pudimos derrotarlo y muchas personas resultaron lastimadas por eso.

- así que el rey impuro.. es un sirviente del rey de la putrefacción [Astaroth ni-san] si esa herida te la hizo las esporas contaminadas puedo ayudarte.

Kuro: enserio? Cómo? Eres doctor?

- no precisamente.

Con su mano izquierda sujeto la patita de kuro y con la derecha recorrió toda la herida; a medida que su mano recorría la herida está se limpiaba quitando la putrefacción y los restos de carne carcomida. Kuro sintió un agradable calorcito curar su herida; pero se preguntaba porque el chico podía entenderle además de curar una herida que los exorsistas expertos tardaban en curar. Rin por otro lado quería ser discreto por eso colocaba su mano obstruyendo la vista de kuro para que no viera sus llamas mientras lo curaba.
Al finalizar de purificar la herida saca una venda de uno de sus bolsillos traceros.

- la herida ya está limpia, se curará completamente en unos dos días, te recomiendo no mojarte la pata y dejarte la venda puesta.

Kuro: gracias! Eres un gran doctor!

- no soy doctor.

Se puso de pie para retirarse después de acariciar la cabeza de kuro pero se detuvo a unos pasos.

- no lamentes las vidas que no puedes salvar, peleaste y diste todo lo que pudiste pero simplemente el enemigo fue más fuerte que tú y no debes lamentar eso, toma la derrota como una lección y vuelvete más fuerte si quieres evitar que se repita; adiós kuro.

Kuro: adiós y gracias!

Rin se fue del lugar y kuro se quedó ahí mismo con sus pensamientos.

Kuro: es un chico extraño pero muy amable; me gustaría que Shiro lo conociera; uhg? Que es eso?

En el suelo yacían la cartera de Yukio y un manojo de llaves.

Kuro: es de Yukio, tal vez lo encontró tirado y se le cayó cuando me ayudó, terminaré el favor y le entregaré esto a Yukio.

Tomo las cosas y se fue a la habitación de Yukio encontrandolo con muchas cosas en el suelo como si buscará algo.

Kuro: un huracán paso por aquí acaso?

Por los maullidos Yukio detuvo su búsqueda.

= Oh, eres tú kuro; oye en donde encontraste eso?

Kuro: un chico amable me ayudó.

= Son mis llaves, gracias kuro, me has salvado.

Kuro: como quisiera que puedas entenderme.

= Buen chico, quieres algo de comida?

Kuro: bueno al menos me alimenta bien.

Hijo de satánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora